Un Divorcio Pendiente ©

CAPITULO 16

ANASTASIA

—Alex!, ¿que haz hecho?—grito con todas mis fuerzas al teléfono

Sasha y yo nos encontramos, en una cafetería frente al hospital. Mientras le contaba todo lo ocurrido en puro llanto como un bebé.

Después de dudar, burlarse y apiadarse de mí; no tardó en unirse en mi coro de gimoteos y abrazos de consuelo por lo que nos hizo Alex.

—¡Bueno en este momento eres tú la que haz hecho algo!—responde furioso después de largos segundos—¡me acabas de dejar sordo!

—¡Imbécil sin corazón, casi nos matas del susto!—doy un golpe en la mesa

Alex se dedicó a mandar a cada una un mensaje así de cruel para encontrarnos en el mismo hospital

—¡Casi aborto!

—Pero no estás embarazada

—Si lo hubieses estado habría abortado!

—Si, pero no lo estás, no seas paranoica

—¿Como pudistes ser tan cruel?

Suelta una carcajada

—¡Ambas eran muy intensas y dramáticas!—se queja—La única manera de arreglar este asunto era así, además me llamaban cada cinco minutos para quejarse de la otra Sí,¡Cinco minutos!!—grita

—¿No había otra manera?¡Eso fue muy insencible de tu parte—le digo y observo frente a mí una Sasha llorosa absorbiendo su batido ruidosamente , aun en ropa de dormir , con una pantufla en un pie y en el otro una sandalia

Suelto una pequeña risa y enseguida garraspeo

—Está bien—suspira —lo siento mucho, de verdad no lo pensé cuando envié el mensaje, solo quería que arreglaran sus problemas

—Gracias—murmuro—¡para la próxima mide tus actos mocoso!

—Esta bien lagarto—ríe—dirle a Sasha que lo siento mucho —suspira—¡voy a dormir

—¡No te he perdonado aun...!—cuelga sin más

Sasha se termina el batido haciendo un sonoro ruido con el absorbente

—Eres bipolar—me dice limpiándose la comisura de la boca con las servilletas—lloras, gritas, te enfadas y de repente ríes—me da un golpe en el hombro

Rio ante su comentario bajando la vista hasta sus pies, y le tomo la mano

—¿Te sientes mejor?

—Si—asiente varias veces mientras se limpia el resto de lágrimas de las mejillas—gracias por todo Ana, creí que ya no me querías como amiga—hace un puchero

—Siempre lo serás—absorbo mi jugo de fresa-es difícil deshacerse de ti—me da un golpe fuerte en
el hombro —¡Auch duele!

—¡Te lo mereces!—ríe arrugando la nariz

—Si—sonreímos a la vez

Somos bipolar

⊙.☉

Salgo del baño después de una larga y relajada ducha, me pongo un vestido suelto, azul cielo ,con pequeños corazoncitos blancos ,mi cabello suelto y me dispongo a bajar.

Ya en la escalera, casi me caigo al oír dos voces tan conocida y siento en mi vientre fuertes patadas de mi bebé falso

¿Son quién creo ?

M-mis padres...

¿Qué hacen mis padre aquí?

—¿Papá, mamá? –interrogo llegando a la sala