Capitulo 1

160 10 0
                                    

-No puedo creer que te salieras con la tuya.
-¡Sebastián!
-Te voy a echar mucho de menos.
-También yo.
-Pero nos veremos en navidad ¿Cierto?
-Ajá, vendré en navidad.
-Ven aquí, te quiero mucho Mariana.
-Yo también te quiero como no tienes idea Sebastián.
-Promete una cosa.
-¿Qué?
-Que nuestra amistad siempre va ser lo más importante ¿Okay? Toma.
-¿Qué es?
-Una pulsera con mi inicial, yo también tengo una con la tuya.
-Hay algo más importante que una pulsera, siempre estaremos conectados uno con el otro, para el resto de la vida.
-...¿Qué?

-¡Mariana es hora de irnos!
-¡Ya voy mamá!

-¿Qué quisiste decir con eso?
-Nada, no es importante; tengo que irme o perderé el vuelo.
-Está bien. Cuídate y promete que enviaras fotos de Italia.
-Lo prometo, te quiero Sebastián.
-Yo también te quiero mucho.
-Adiós.
-Adiós.

Entré al auto de mis padres y nos fuimos al aeropuerto. Había entrado a la universidad de alta moda de Milán con una beca del 100%.
Estaba empezando a cumplir mi sueño más grande que era convertirme en una gran diseñadora de modas y estar en las pasarelas de la semana de la moda de Nueva York, Paris, Milan, Barcelona. Todo era casi perfecto, solo había un pequeño detalle, un detalle de un par de semanas creciendo dentro de mí y es que estaba embarazada cuando viaje a Italia para empezar a estudiar diseño de modas, mis padres no lo sabían, solo mi abuela Nena quien se había ofrecido a ir conmigo a Milán con el pretexto de que mi abuelo era Italiano y quería recordar cuando se conocieron y su época de romance por Venecia y Florencia.

-Bueno ya está todo listo mamá, este es tu pasaporte, debes tenerlo contigo en todo momento.
-Que sea una persona de la tercera edad no me hace ser tonta Adriano.
-Nunca dije eso mamá.

-No eres una anciana mamá Nena.
-Tengo 62 años cariño y tu padre dice que soy senil.

-No dije eso mamá.
-Parece que lo haces.

Mi padre y mi abuela tienen una relación bastante peculiar, pero me encanta como es, se quieren mucho y son muy cercanos.

-Cariño no tienen que irse, puedes estudiar moda en Nueva York.
-Mamá sabes que no podemos pagar una escuela tan costosa.
-¿Estarán bien solas en Italia?

-Ya deja de preocuparte Lucia, Mariana está bien conmigo, ella me ayudará a decorar linda mi vieja casa...

-¿No es así cariño?
-Así es mamá Nena.
-Bueno linda es hora de irnos o perderemos el vuelo.
-Ya estoy lista.

-Mamá, papá; nos vemos en unos meses... ¡Los amo!
-...

Me despedí de mis padres y de mi hermano menor Luca. Mi nana y yo abórdanos y media hora después estábamos volando con destino a Milán.

-¿Estás bien cariño?
-Sí, estoy bien.
-¿Ya pensaste si se lo vas a decir o no?
-Ya lo decidí, Sebastián nunca va a saber que mi bebé es suyo.
-Está en todo su derecho de saberlo.
-¿Y arruinar nuestra amistad por eso? Prefiero que no lo sepa; mamá nena, él lo dejo muy claro hace tiempo. No está en sus planes ser papá.
-Entonces si no estaba en sus planes ¿Por qué no se cuidaron?
-Abuela ya te dije, estábamos muy borrachos y era nuestra graduación, las cosas se descontrolaron.
-Ya no me llamaste Mamá Nena, ahora fui abuela; está bien cariño ya entendí.
-Mamá Nena lo siento es que todo esto del bebé me pone no sé cómo, ni si quiera se lo pude decir a mis padres.
-Está bien Mariana.

Me había portado muy mal con mi abuela, era la única persona en el mundo además de claramente que sabía sobre la existencia de ese bebé.
Después de muchas horas de vuelo por fin aterrizamos en Italia, estaba muy cansada y me dolía demasiado la espalda además de las náuseas horribles que tenía.

-Mamá Nena ya no puedo más.
-¿Qué pasa cariño?
-Tengo muchas náuseas y me duele todo el cuerpo.
-Ya vamos a casa para que descanses, tomes un baño y comas algo.
-No tengo hambre, solo quiero dormir.
-No dormiste en todo el vuelo.
-No pude.
-Vamos a casa.
-Sí, vamos.

Nunca había estado en la casa de mi abuela, cuando se casó con mi abuelo y nació mi padre, ellos se mudaron a Estados Unidos y no volvieron a Italia. Cuando mi abuelo murió mi abuela regresó unos meses a su vieja casa, pero después mi padre la convenció para que se mudara con nosotros y desde entonces ella ha estado viviendo en nuestra casa.

La hija de mi mejor amigoWo Geschichten leben. Entdecke jetzt