Te Necesito (#1) BORRADOR

34. Despedida De Soltera

No se imaginan lo que reí escribiendo este capítulo. Denle mucho apoyo, por favor.

Narra Rose

25 de Marzo, 2018.

Me observo al espejo y respiro varias veces para no largarme a llorar en este mismo instante, todo a mi alrededor se siente un sueño y tengo mucho miedo de en algún momento despertar.

Hoy por fin estaba teniendo unas de las últimas pruebas de vestido y era emocionante.

Nadie aún de la familia lo había visto, pero yo lo amé desde un principio. Había optado por tomar la decisión por mi cuenta, solo con la ayuda de Brig dándome algunos consejos.

Mis recuerdos van a cuando tenía dieciocho y supe que estaba embarazada. Fue muy difícil para mí, cuando creía que nada me podía derrumbar, lamentablemente siempre llagaba algo y lo hacía.

Siempre estaré enormemente agradecida de tener unos padres tan comprensibles y amoroso. Ellos estuvieron en cada momento, sin ni siquiera tener la obligación de hacerlo, pero lo estuvieron para mí y mi hijo.

Me sobresalto al sentir pequeños golpes en la puerta del vestidor, esta se abre y la cabeza de Brig se asoma.

-¿Estás lista? -pregunta sonriente. Esta mujer siempre andaba feliz.

Asiento algo aturdida por las emociones y vuelvo mi vista al espejo para darme una última repasada.

-Lo estoy -murmuro. Doy un largo suspiro, para después girarme y comenzar a caminar hacía donde se encontraban las demás.

Si ahora me encuentro así, ya no me quiero imaginar para la boda. Siento que todo mi cuerpo va a temblar.

-Bueno queridas -escucho a Brig-, ahora les podré presentar a nuestra novia.

Las chicas que hace un momento estaban delante mío retocando algunos detalles, se apartan y me dejan pase libre para poder acercarme.

Quiero reír al ver la reacción de cada una. Emily y mi madre son las primeras en ponerse de pie, mientras Freya y mis primas parecen estupefactas en sus asientos.

Mi vestido era corte de princesa, con escote V, sin mangas y muy largo; además de tener como detalle algunos diamantes.

-¿Y? -pregunto al ver que ninguna habla. Me muevo un poco como si estuviera modelando, haciéndolas reír.

Mamá se acerca un poco.

-Estas hermosa, cariño. Pareces una princesa -murmura. Sus ojos están cristalizados y hace que las ganas de llorar vuelvan con más fuerza.

-No es una princesa, ella es una reina. -Emily da unos saltos en su lugar, para después acercarse y tomar mis manos con cariño- Eres fascinante, Rose Black, y quiero que nunca lo olvides.

Río con mis ojos humedecidos.

-Si me lo dices tú, créeme que nunca se me olvidará.

Ella va hablar, pero Freya se le adelanta.

-Por favor, ahora quiero mi espacio con mi nuera. -También llega a mi lado y me repasa con una enorme sonrisa- No sabes la suerte que tiene mi hijo al tenerte.

Me hecho aire con las manos y miro hacía el techo para no llorar.

-No digas eso. Yo soy la suertuda al tener a un hombre tan maravilloso.

Los siguientes minutos fueron alagos tras alagos y yo no podía estar más feliz.

Tener mi vestido de novia era un paso muy grande, que necesitaba tener o me volvería loca. Ahora solo quería ver la reacción de Amos.