𝑺𝒂𝒃𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒕𝒆 𝒂𝒎𝒐... || 𝐁𝐘𝐋𝐄𝐑

¿Y si acaso no me ama?

Narra: Will

- El.. creo que esto me queda mal, eh... ¿Crees que me no veo mal? ¿Esto feo? Capaz a Mike no le gusta como me veo... Me veo muy mal con esto, ¿verdad?

- Que no, Will. Yo sé de ropa, me enseñó Max, es tu propio estilo. Además de que estás increíblemente guapo, te marca culo. A Mike le gustan los pequeños detalles como tú culo.

- ¡EL! Vaya tontería.

- No lo es, es que mírate tío. Tienes más culo que yo.

El y yo habíamos estado durante una hora eligiendo ropa ya que según ella "no era lo indicado", pero no puedo decir nada, no entiendo de ropa ni mucho menos de conjuntos.

- Esto... Mmm... Mira, ponte esta camisa mejor, que pegan con los vaqueros y va a quedar genial para un cita - Me tiro la prenda a la cara.

- El, no es una "cita" tal como lo dices, es una quedada que me a preparado Mike - Dije poniéndome la

- Shh, calla. Es una cita y ya, champiñón.

- ¿Y ese nuevo mote?

- Uno que te pega a tí y a tu pelo - Me puso bien la camisa y me miró de arriba a abajo alejándose - Tío, estás genial. Te ves increíble, Willy.

- ¿Tú crees..? - Estaba dudoso de si me veía bien.

El se acercó y me agarro de la cara haciendo posar sus manos en mi rostro y me sonrió.

- Will, de verdad que estás increíble. Es la primera vez que se te ve tan ilusionado por algo y que vayas así de bien vestido, y eso que tú te vistes genial. Pero es increíble, como tú en sí. Estás genial hermanito - Le sonreí. Esas palabras me hicieron que se iluminasen mis ojos, fue muy lindo lo que dijo. El capaz no es mi hermana de sangre, pero me da igual. Ella es todo para mí.

- Gracias, Jane, te quiero mucho - Le abracé tan fuerte como pude.

- Ahora sí. Vete, ya es la hora, vas a llegar tarde y Mike sabes muy bien que es MUY impaciente - Se separó del abrazo sonriéndome y agarrándome de los hombros.

- Sí, Mike es demasiado impaciente - Empezamos a reír y salimos los dos del cuarto hacia la puerta.

- Muchas suerte, Willy. Espero que te lo pasa bien con Mike. Y no os toquéis mucho, porfavor, eh - Eleven empezó a reír.

- Sí, sí, tranquila. No creo que nos toquemos mucho - Reí con ella - Bueno, muchas gracias por todo Jane. Eres la mejor.

- Tú sí que eres lo mejor pelo seta.

- Y dale, cortas el momento bonito, ostia.

- Que sí, Willy, que sí - Eleven empezó a reír y reí con ella - Bueno tío, ya va a salir el programa que me gusta, me tengo que ir, guapo. Además de que Max va a venir y no tengo nada preparado. Pásatelo genial, no os toquéis mucho, que no haya ningún pedido y eso. Bueno... ¡Adiós! - Término y me cerró la puerta en la cara.

- Qué... ¿Acaba de pasar? Bueno, da igual. Llego tarde, mierda.

Salí corriendo hacia el lugar de la cita, el Castillo Byers. Fui lo más rápido posible hasta llegar hay. No se veía nada, estaba muy oscuro todo y empecé a tener un poco de miedo.

- ¿Mike? Eh llegado... ¿Dónde estás?

Tenía miedo, no escuchaba nada. Me metí dentro del Castillo Byers y no había nadie, no estaban ni las luces prendidas. Las encendí y me senté en el colchón que había.

- Supongo que aún no a llegado o que está por llegar... O capaz e llegado antes...

Me quedé hay por una hora y nadie llegó, empezó a llover, al notar que ya perdía las esperanzas mi mente empezó a pensar por sí misma: "¿Y si me a dejado de plantón?" "¡¿Y si realmente solo quería reírse de mí?!" "¡¿No soy lo suficientemente bueno para él?!" "No soy nadie..." "Y sí..." "No.. ¿me ama...?". Mis lágrimas caían rápidamente. ¿Realmente el amor de mi vida me había echo un regalo con una carta para quedar y cuento justo llegó me dejó de plantón? Era increíble...