¿Te acordaste de mí? (Cap. 3)

504 37 16
                                    

Narra Will:

Me desperté con unos gritos de El. Ya habíamos llegado. Estaba tan feliz que abrí los ojos tan rápido como pude. Cuando me asomé vi que estábamos pasando por las calles, viendo los árboles que había antes de llegar a mi casa.

Justo cuando llegamos, estaban todos en la puerta de la casa esperando a que llegáramos. Traían un cartel que nos decía "Bienvenidos de vuelta".

Al salir del coche, El salió disparada a donde estaba Mike, el cual tenía un ramo de flores y una carta.

- ¡Byers! - Me di la vuelta y ya estaban mis amigos abrazando me.

- ¡Chicos! - Les respondí el abrazo - Cuanto tiempo.

- !Queríamos hablarte, pero Mike siempre tenía la línea ocupada por el walkie talkie.

- Bueno, tampoco exagereis, tampoco he estado hablando con El todo el rato. - Nos reímos todos y Mike dejo de reír y empezó a mirarme - ¿No me vas a decir nada? ¿Ni un abrazo, ni un "hola"? - Me dió una cálida sonrisa de las cuales me encantan.

- Bueno, si El te suelta sí - Nos reímos todos. El se soltó y fue corriendo a donde Max para darle un cálido abrazo.

Abrace a Mike y note algo lo cual hizo llamar mi atención. Era la carta que vi antes, le miré y cruzamos miradas. Me dio una cálida sonrisa muy amplia.

- Esto es para tí. No lo habrás ahora. Ábrelo cuando estes asolas. - Dijo entre susurros pero con un tono dejando claro que era una orden. No paramos de cruzar miradas sonriendo y sabiendo que teníamos que contarnos mucho hasta que vino El y nos separó el abrazo.

- ¡Mike! Tendrás algo preparado ¿No?

- ¿Preparado? - Pregunto con duda Mike.

- ¡Sí, tonti! ¡Algo por nuestra llegada! - Dijo El muy feliz pero también dudando si realmente tendría algo preparado.

- Am - Mike miro a sus amigos con una cara de socorro. - Sí, claro, vamos a ir aaaa... Que te lo diga Dustin - Dustin le miró con una cara de odio.

- Vamos al cine y después a casa de Mike. - Esa era la venganza de Dustin para Mike.

- Si, claro, a mi casa.. Pero primero vamos a ayudaros con las maletas y acomodar os.

- Sí, pues ir agarrando maletas, aquí hay bastantes. - Dijo Hopper.

- ¡Vale! - Dijeron todos a la vez.

El y Max agarraron la maleta de El y salieron corriendo hacia su habitación. Me pareció extraño a la velocidad que iban. Agarradas de la mano cerrando la puerta de un portazo. Mike y yo nos quedamos sorprendidos y empezamos a reír.

- ¿Qué harán con tanta prisa? - Dije riéndome.

- No lo sé, pero algo se esconden esas dos - Reímos juntos y fuimos a poner mis maletas en mi cuarto.

Mike cerro la puerta de mi cuarto y empezó a ayudarme a sacar las cosas de la maleta.

- Oye Mike - Hable sin mirarle.

- ¿Sí? - Pregunto sentándose en la cama.

- ¿Qué era la carta que me diste? Se que me dijiste de mirarla cuando esté a solas, pero me da intriga - Me levante y me senté al lado de él, no muy cerca como para estar cara a cara, pero tampoco tan lejos para estar de una punta de la cama a otra.

- No te lo puedo decir, ya lo sabrás cuando la leas - Me dijo mirándome a los ojos y después puso una cara tímida mirando hacia otro lado inmediatamente. - ¿Sabes? Estoy teniendo problemas con El.

- ¿Con El.. - Me interrumpió la misma mencionada abriendo la puerta de un golpe diciendo que tardamos mucho. Mike y yo nos asustamos por eso. - El, cuántas veces te dije que tocaras antes de entrar.

- Uy, perdón ¿Me perdonas, hermanito? - Dijo abrazándome y después soltándome de pronto.

- Ajá, pero para la próxima toca la puerta.

- Que sí, que sí - Dijo riendo y después noto que estaba Mike a mí lado. - ¿Qué hacéis tan pegados? - Respondió muy seria.

- Oh.. No estamos tan pegados, solo... - Dije - Mike solo me ayudó a ordenar y bueno.. ¿nos sentamos para descansar un poco..? - El nos miró raro y con duda pero llegó Max y le agarro de la mano dirigiéndola hacia afuera.

- ¡Vamos, El! Oh, chicos ¿Ya estáis? Estamos esperando.

- ¡Oh, si claro! - Salía del cuarto pero Mike me agarró de la muñeca me trajo hasta él - Luego tienes que contarme cómo te ha ido en estos años, no he sabido tanto de tí por El - Dijo mientras ponía uno de mis mechones detrás de mí oreja.

- Am.. ¡Si, claro! - Seguro estaba más rojo que un maldito tómate, que idiota. Me puse nervioso, lo sé, lo dije hasta tartamudeando..

- Bueno, ¿vamos?

- Sí..

𝑺𝒂𝒃𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒕𝒆 𝒂𝒎𝒐... || 𝐁𝐘𝐋𝐄𝐑Where stories live. Discover now