Amor Cristalino

Capítulo 38

Eddie

Al día siguiente me levanté temprano para preparar el almuerzo que llevaría ese día, no estoy acostumbrado a hacer algo así, pero quería darle algo a Sky después de la vergüenza que le hice pasar ayer. Sinceramente la plática con mi tío fue bastante incómoda, pero al menos no se enojó ni mucho menos, solo me dijo que tuviera cuidado con lo que hacía. Tomé mis cosas para irme a la preparatoria y mi tío me detuvo.

— ¿Ahora le preparas el almuerzo? Debe ser una chica bastante especial — comentó mi tío con una sonrisa mientras leía el periódico tomando su café.

— Bueno, solo lo hago por el mal momento que le hice pasar ayer — respondí mirándolo.

— Dile de mi parte que no vi nada, que no estoy molesto con ella y que se puede quedar a dormir aquí, siempre y cuando tenga el permiso de sus padres — agregó agitando el periódico.

— Se lo diré — suspiré. Para que los padres de Sky la dejen dormir aquí, tendrá que decirles alguna mentira.

— Por cierto, este sábado se estrena una película, podemos ir a verla al mediodía,  puedes invitar a Sky — sonrió.

— Está bien, le voy a comentar, ya me tengo que ir, nos vemos tío — dije tomando las llaves de mi auto para irme.

— Nos vemos, cuídate, Eddie — me dijo antes de salir de la casa.

Subí a mi auto con una gran sonrisa, era el pretexto perfecto para volver a pasar el rato con ella, aunque no sé que tan cómoda estaría después de la situación de ayer, en cuanto llegue se lo diré. Me puse el cinturón de seguridad y conduje hasta la preparatoria, cuando llegué me estacioné en uno de los lugares disponibles.

Antes de salir del auto, tomé un pequeño pedazo de papel y un lapicero para escribir sobre él:

"Te veo a la hora del almuerzo en el bosque". 

Tomé mis cosas para salir del auto e ir directo a dejarle la nota dentro de su casillero.

Después de dejarle la nota, me fui directo a clases de literatura, con una profesora como Guligan, llegar tarde no es una opción, Steve atravesó la entrada del salón y se dejó caer sobre el asiento que estaba a mi lado, llevó sus manos a su rostro suspirando pesadamente y lleno de frustración.

— ¿Puedes creer que ahora ya no puedo traer a mi novia a la escuela? — dijo bastante molesto.

— ¿De qué hablas? — lo miré muy confundido.

— Que ahora un tipo viene a dejarla a la preparatoria y llevarla a su casa — resopló lleno de frustración, cruzando sus brazos.

— ¿Un tipo? — crucé mis brazos recargándome sobre el respaldo de la silla, y antes de que Steve me respondiera la profesora interrumpió.

— Alumnos, buenos días, vayan abriendo su libro en la página 230 — llegó diciendo la profesora Guligan.

Sentía que las clases transcurrían de manera lenta, pero por fin era la hora del almuerzo, fui a mi casillero a tomar la comida que había preparado y la bolsa de papel que Sky había dejado olvidada en mi auto, salí de las instalaciones para cruzar las canchas de fútbol y así adentrarme al bosque, cuando llegué Sky no estaba, dejé las cosas sobre la mesa y tomé asiento para esperarla.

Ahora que lo pienso, después de contarle mi pequeña historia me siento un poco más vulnerable, las únicas personas que sabían la verdad sobre Lizzy son Hargrove y Steve, cada vez me estoy abriendo más con ella y eso me da un poco de miedo...