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Narrador pov.

Definitivamente su mamá no le había gustado la idea de que ella se quedará unos días más en Forks.

Aunque siendo honesta con ella misma, ya se lo esperaba. Sin embargo no se arrepentía de la decisión que había tomado, solo extrañaba a su gato Apolo.

Esperaba que sus padres lo estuvieran cuidando bien, se levanto de la cama emocionada aunque tenía algunas cosas que hacer de lo contrario tendría una discusión con sus padres y era lo que menos quería.

-¡Ashley!¡Tienes visitas!.-exclamó su tío.

Ashley sintió que su corazón se aceleraba había llamado a la casa Cullen, la que había contestado fue Alice Cullen; la hermana de Edward.

Entonces aquello significaba que Alice le había pasado su mensaje a las hermanas Denali o eso esperaba porque ¿Quien más podía ser?.

-¡Voy en un momento!.-Ashley se cambio de ropa tan rápido como pudo y se observo en el espejo, con una leve sonrisa y tratando de no ilusionarse bajo.

Para su completa dicha ahí estaban Tanya, Irina y Kate sentadas en el sofá hablando con Charlie.

-Me tengo que ir a la comisaría Ashley.-dijo Charlie al tiempo que se ponía de pie, ella sonrió y asintió.-Te dejo con tus amigas, fue un gusto conocerlas.-Charlie sonrió tímidamente y sin más se fue.

Ashley frunció levemente el ceño ¿Por Qué la palabra amigas no le gustaba? Tal vez porque no es suficiente... Ella movió la cabeza tratando de alejar esos pensamientos "raros".

-Nos alegra que te hayas quedado unos días más.-habló Tanya haciendo que Ashley saliera de sus pensamientos.


-Si... Bueno decidí quedarme unos días después de todo hace mucho tiempo que no venía a Forks.-dijo Ashley restándole importancia.

-Y yo pensé que era por nosotras.-Comentó Kate.

Ashley nunca se considero buena para expresar sus emociones, ni siquiera con sus padres en cambio ocultaba lo que realmente sentía era algo de lo que ella ya estaba acostumbrada, ella soltó un suspiro algún deseaba poder expresar lo mucho que las tres rubias causaban en ella, sin sentir que estaba mal.

-También.-susurró Ashley haciendo sonreír a Kate, Irina y Tanya.-¿Como estan Carmen y Eleazar?.-pregunto al tiempo que se sentaba a lado de Tanya.

-Están de regreso a Alaska.-respondió Irina mirando a su compañera. Aunque una parte de ella deseaba poder abrazarla y besarla no podía llevarse por sus impulsos Ashley nunca había salido de su zona de confort y sobre todo ella vivía tratando de complacer a los demás antes que a ella.

-Pensé que ellos todavía estaban aquí con ustedes, pero me alegra que igual se quedaran ustedes unos días más.-murmuró Ashley notando algo que le pareció un poco extraño en los ojos de las tres rubias, frunció levemente el ceño pero no dijo nada.

-¿Has decidido ya dónde vas a continuar los estudios?.-preguntó Tanya cambiando el tema. Ashley le sonrió aunque tenía que ser sincera porque ni ella misma sabía cual elegir.

-Todavía no. He recibido varias cartas de aceptación, pero aún estoy
valorando mis opciones.-la voz de Ashley fue amable.-Pero...-esa dudo si decirlo o no.

-¿Pero?.-Presionó Kate mirando como su compañera suspiraba como si algo le agobiara.

-Pero al final mis padres terminaran eligiendo por mi.-completó Ashley haciendo una mueca.

-¿Dónde te han aceptado?.-preguntó Tanya.

-Syracuse... Harvard... Dartmouth... y la Universidad del Sudeste de Alaska.-contestó Ashley mirando a las tres rubias y les guiñó un ojo al pronunciar lo último.

Kate soltó una risita tal vez había una posibilidad de estar cerca de su compañera.

-¿Harvard? ¿Dartmouth?.-preguntó Irina, incapaz de ocultar el asombro.-
Vaya, eso está muy bien, sobre todo la universidad de Alaska pero al final será tu decisión después de todo esta es tu vida Ashley.-Irina se puso de pie y se acerco hasta ella, agarró sus dos manos y le sonrió con cariño.

-Tienes razón y lo haré.-susurro Ashley ruborizada al tener a Irina así tan cerca.-pero la Universidad de Alaska... realmente no la tendrán en cuenta mis padres cuando puedo acceder a estas estupendas universidades. Aunque los convenceré para que me dejen estudiar ahí.-agregó Ashley sintiendo como Kate la abrazaba inesperadamente.

Durante el tiempo que siguió, las hermanas Denali disfrutaban la compañía de Ashley y de algún modo ella no pensó en su futuro o algo relacionado con sus padres o con su vida sólo se limitaba a disfrutar la compañía de Kate, Irina y Tanta, no siquiera importaba que Kate invadiera su espacio personal.

Por un momento sintió como si la sala empezara ser asfixiante cada vez que las tres hermanas se ponían cada vez más a su lado y sobre todo cuando sonreían.

Probablemente por el momento no lo admitiría pero amaba la sonrisa de las tres rubias.

Ashley se quedo por un momento observando el rostro de Tanya después de Irina y por último el de Kate. Sus rostros definidos, sus labios rosados sin necesidad de brillo y sus ojos, los cuales antes estaban de unos dorados claros pero ahora estaban casi oscuros.

Curioso

Pensó ella. No entendía el torbellino de emociones que las Denali le provocaban ni siquiera se acercaban a las emociones de cuando alguien le gustaba, sin duda esto era nuevo y distinto.

Le gustaba y le asustaba a la vez esa sensación, todo era tan nuevo...

Sin duda todo esto podría ser un desastre.

En el fondo Ashley lo sabía al igual que las hermanas Denali.

En el fondo Ashley lo sabía al igual que las hermanas Denali

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𝐷𝑖𝑠𝑎𝑠𝑡𝑒𝑟 | 𝐿𝑎𝑠 ℎ𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛𝑎𝑠 𝐷𝑒𝑛𝑎𝑙𝑖Where stories live. Discover now