[ Epílogo ]

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Porque todo tiene su final, bueno más o menos.

Habianse enterado de buena fuente de que aquel hombrecillo ya había tirado la toalla, ninguna caricatura o persona del medio quería que la representase.

Eso los tenía algo contentos pero tampoco podían mofarse de la desgracia ajena.

Las tareas del hogar se prolongan y el trabajo hace lo mismo. Aún así, encontraron un balance perfecto.

Y cuando Chip entrego aquella regalo que tanto había deseado. La respuesta de su novio lleno su corazón de alegría.

—¡Si!— grito de golpe, saltando a los brazos de su ahora prometido. —Espera,— se separó de golpe—¿Una boda? ¿De verdad?  Es demasiado . Te amo, pero no quiero que te sientas comprometido a esto.
—El dinero es lo de menos. No me va tan mal en la agencia y no pasa nada, amor. Tu, vales todos los sacrificios.

Dale sonrió con júbilo, abrazando de nuevo a Chip, llorando de felicidad y permitiéndose ser tan feliz como lo soñó en su niñez.
Famosos o no, tenían lo que necesitaban, que era el uno al otro. Y eso estaba bien para ambos.



Quedate || Chip X Dale Where stories live. Discover now