La Mejor Amiga de Meliodas 4: El final de la historia

XVIII: Todo Será Congelado

Narrador:
Por otro lado, la lucha continuaba, Merlín seguía tratando de completar el hechizo, mientras que Ludociel trataba de defenderla de los posibles ataques del demonio original, fue entonces que se percataron que el Demonio Original estaba luchando con todo su poder para así mismo autodestruirse, la desesperación y el sentimiento de no saber que iba a pasar los invadía sobretodo a Merlín y Ludociel, hasta que en eso una Luz dentro de toda la oscuridad apareció.

Mael: Falso paisaje, desaparece ante mi gracia- dicho esto las nubes que habían alrededor comenzaron a disiparse. Los Pecados restantes también estaban llegando.

Zeldris: Así que regresaste, Estarossa o mejor dicho, ¡Mael!-en eso vió a un lado, estaba sorprendido-Imposible, ¿Qué haces ahí? Y ese par de alas del Clan de las Diosas...

Aisha: ¿Sorprendido?-dijo sería, en ese momento el Demonio Original y Mael comenzaban a pelear, esta era la lucha de ambos, cuando menos lo espero, Aisha antes de que pudiera decir otra palabra ella se sorprendió mucho al punto de tener miedo-No...-dijo al ver el mandamiento que solía poseer levantándose y tratar de contenerse-Fue mala idea venir aquí.

Gowther: Hermana, ¿Qué sucede?-dijo al verla un poco pálida.
Merlín se percató de inmediato, ahora estaba haciendo dos cosas a la vez, intentando completar el hechizo y así mismo tratar de contener al mandamiento faltante. Zeldris al ver lo que estaba pasando no dudó en atacar a Merlín, Ludociel había hecho lo posible por defenderla, quienes ayudaron en hacerlo fueron Elizabeth, King y Diane.

Elizabeth: Merlín, ¿Cuánto falta para completar el hechizo?

Merlín: 5 minutos, pero... El Mandamiento quien sabe cuanto más pueda resistir-Elizabeth miró un poco inconforme.

Aisha: Está bien, Elizabeth-dijo un poco más tranquila-Es inevitable que no absorba ese mandamiento, he recuperado mis memorias, estabilidad y domino mis dos poderes, por lo que no estoy asustada

Mael y Zeldris ahora luchaban, era increíble verlos sabiendo que estaban muy parejos, también Escanor miraba sorprendido ver como el portador original de su gracia, utilizaba su poder, era obvio que el poder era mayor al que él usaba. Faltaban ya 2 minutos, el agotamiento de Merlín ya era notorio, se había descuidado un poco a lo que el Mandamiento se había liberado esta vez, la sorpresa de todos los Pecados se hacía ver, King, Diane, Gowther y Elizabeth intentaban detenerlo, sin embargo era inútil, antes de que Aisha pudiera hacer algo, sintió como si sus corazones se detuvieran por lo que cayó al suelo, el Mandamiento entró en ella sin más, todos los pecados restantes estaban sorprendidos y sin saber que hacer, Elizabeth trató de cubrirla con una especie de barrera de Luz, en lo que ella aún parecía agonizar.

Gowther: Princesa Elizabeth, quién sabe cuál será la reacción de Aisha ante su luz, podría herirla-dijo preocupado.

Elizabeth: No lo hará, esa barrera está hecha para tranquilizarla, dormirla y protegerla-dijo tranquila-Todo estará bien, Aisha.
Es justo como ella lo había dicho al poco tiempo ella había caído desmayada, sus alas se habían desvanecido. La situación comenzaba a verse crítica pues ya sólo faltaba un minuto para completar el hechizo, Mael había sido herido y Zeldris estaba atacando hacia Merlín.

Ludociel: Todos, ¡Protejan a Merlín!-King usó una de las formas de Chastifol creando una protección con todos dentro, Zeldris estaba tan desesperado que comenzó a golpear con todas sus fuerzas dicha protección.

Mael: ¿Qué es lo que te ata a tal extremo? ¿Qué te lleva a este punto? -preguntó un poco extrañado por la desesperación de Zeldris, en ese momento Mael lo atacó por la espalda, haciendo que este cayera, el hechizo se había completado, todos veían hacia el capullo.

Hawk: ¿Realmente se detuvo el capullo?

Hendrickson: Mira allá arriba, el pájaro se detuvo.

Todos miraron hacia Zeldris por un momento.

Elizabeth: Buen trabajo Merlín-ambas fueron a ver a Aisha-¡Aisha! ¡Aisha despierta!-todos los demás fueron a verla, a excepción de Hawk que iba directo al Capullo.

Diane: ¿Aisha estará bien?-dijo un poco preocupada.

Merlín: No debe tardar en despertar-dijo un poco agotada-Después de todo, se detuvo la transformación del Capitán en Rey Demonio.

Hawk: Oigan, no quiero interrumpir, pero el Capullo está vacío...

Todos se quedaron congelados al escuchar eso. Zeldris que yacía en el piso, rió un poco.

Zeldris: Ahora si puedes cumplir con tu promesa, Rey Demonio.

Meliodas: Te hice pasar un mal rato, Elizabeth y a ustedes también, Pecados Capitales-dijo como si nada, él lucía muy diferente, era mucho mal alto, fuerte con una cabellera más larga, era como si hubiera roto su maldición y finalmente hubieran pasado los años frente a él.

Elizabeth: ¿Eres tú, Meliodas?-dijo muy seria.

Meliodas: Y tú también bicho raro-dijo al ver a Hawk.

Elizabeth: Tu no eres Meliodas...-dijo esta vez molesta.

Meliodas miró a Aisha por un lado.

Meliodas: Aisha, ya es hora de que te levantes-todos miraron hacia su dirección, ella comenzó a levantarse poco a poco, todos miraban sorprendidos-¿Por qué no vienes hacia acá Aisha? ¿No quieres revivir los viejos tiempos?- ella seguía sentada, de espaldas y sin decir un sola palabra, él notó algo raro.

Elizabeth: ¿Quién eres tú? Responde-no dijo nada. Zeldris se levantó como podía, para tratar de obtener la atención de su hermano mayor.

Zeldris: Cumplí mi promesa Meliodas, dime dónde está Gelda- dijo con algo de dificultad.

Meliodas: Zeldris, ¿Tu corazón sigue atado a esa Vampiresa?-Las palabras que escuchó lo sorprendieron mucho, no comprendía lo que él quería decir-Los dos siempre estuvieron encaprichados por esas tonterías, no puedo creer en lo que se han convertido.

Diane: Esa forma de hablar... ¿Realmente no es el Capitán?-dijo dudando.

Hawk: El jamás me había llamado bicho raro-dijo un poco sorprendido.

Aisha: Por supuesto que no...-Su voz había cambiado un poco-Él es el Rey Demonio-dijo al ponerse de pie aún de espaldas.

Rey Demonio: Hija mía, la única que no me defrauda eres tú, lo único que has hecho es obedecer...-Aisha agachó la cabeza ante ese comentario mientras seguía de espaldas.

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¡Hola! Ha pasado muchísimo tiempo, y es que por mas que quiera escribir, en mi mente ya nadie espera mi regreso a este fanfic, además de que he estado muy ocupada con la universidad, es mi último año y por lo tanto también las expectativas han aumentado. Pero ese no es el caso... Quiero agradecerles a los que han seguido leyendo y a los que también siguen esperando capítulos, no sé si pues volver a ser constante al menos lo que resta del año, pero ya casi termino mis estudios lo que facilitaría un poco más el actualizar.
Hasta entonces...

-Mizu.