Capítulo 10

43 5 6
                                    


Matthew

La mañana llega y el sol da en mi rostro calentándome, me remuevo un poco pero el calor en mi pecho logra despertarme. Carissa yace dormida a mi lado, su rostro está sobre mi pecho y es realmente maravilloso admirarla, intento levantarme sin despertarla porque quiero grabar la imagen de su cabello cobrizo sobre la blanca almohada, el top que lleva deja a la vista su abdomen plano. No puedo evitar la tentación de tocar su blanca piel, deslizo mis dedos por su mejilla y desciendo por su cuello hasta su clavícula, sus pestañas revolotean mientras que se remueve y eleva los párpados para regalarme su dulce mirada.

—Buenos días— dice tiernamente.

—Buenos días hermosa— la ayudo a incorporarse —tengo muchas ganas de dejarnos encerrados en este lugar por días, pero debo ir a trabajar y tú debes prepararte para recibir a los obreros.

—Es cierto, Matt debemos irnos ahora mismo— dice exaltada —hoy es un día muy importante.

—Vamos juntos a casa— sugiero tomando su mano.

—Eh, pues debería recoger todo antes de irme— rehuye de mí buscando excusas.

—No señorita, nos vamos ahora mismo.

Entramos a casa juntos, no suelto su mano en ningún momento, mi madre nos saluda efusivamente. Sé que ella lleva tiempo esperando esto, tomo algo de café y fruta antes de excusarme para ir por una ducha veloz. Al culminar con mi rutina matutina bajo por algo de comer. Carissa baja unos minutos después, enfundada en unos vaqueros negros y una camisa de cuadros color rojo, los primeros botones están abiertos y me dan un vistazo de su largo cuello.

—Muero de hambre— exclama Carissa tomándo asiento frente a mí —¿Dónde está Ava?

—Sigue durmiendo— respondo y me levanto para darle a mi madre un sonoro beso en su mejilla.

Carissa está en la mesa disfrutando su desayuno, me apoyo en el respaldo de su silla y beso su mejilla, ella gira el rostro sonrojado y me mira con ojos muy abiertos, intenta decirme algo y yo solo sonrío al verla así, la sorprendo dejando un dulce beso en sus labios.

—Iré con los chicos a las plantaciones pero volveré pronto para ayudarte en lo que necesites— le sonrío acariciando sus mejillas —nos vemos en un rato.

—De acuerdo, que tengan buena jornada— me sonríe y le correspondo el gesto antes de salir.

Adelanto mucho trabajo con los chicos y dejo instrucciones antes de tomar a Zeus y dirigirme a las cabañas. Al llegar lo primero que ubico a través un ventanal es a Carissa, han dispuesto una mesa para los planos, desde donde estoy puedo verla sonreir mientras el arquitecto le explica alguna cosa, está emocionada con el proyecto eso lo sé. Avanzo para sorprenderla pero al tener una mejor visión del interior, enfoco también a Garrett quién no pierde tiempo para acercarse a ella cuando esta se tropieza, la toma de la cintura y la ayuda a incorporarse.

“Este tipo me lleva al borde ya, ¿Quién se ha creído?”

—Buen día señores— mi tono es serio pero lo suficientemente fuerte para captar la atención de todos.

—¡Oh! Matt que bueno verte— dice aun sosteniendo a mi chica —pensé que no nos honrrarias con tu presencia.

Carissa al verme se aparta de su lado y sigue mis movimientos con la mirada. Cuando estoy junto a ella beso su mejilla y tomo su mano para entrelazarla con la mía.

—He venido para ayudarte en lo que necesites, ¿Estás bien?— ella asiente un poco sorprendida por mi acción.

—Si, ultimamos detalles con el arquitecto pero ya los obreros han empezado a trabajar, tendremos algo de ruido un tiempo— la vibración en su voz me dice que está algo nerviosa.

CarissaKde žijí příběhy. Začni objevovat