15 horas || Tsukiyama

Día 1: Miyagi-Tokio (parte 2)

Una hora después están sentados en la cama del hotel, una película a la que dejaron de prestarle atención hace mucho sonando en la tele. Tadashi le hizo comprar todo tipo de snacks de regreso y Kei renuentemente había probado todas, lo que significa que esa era toda la cena por hoy, lo que los dejaba con otro plan para la noche.

—Tengo una mayor tolerancia y lo sabes— Tadashi había dicho, como un mentiroso, y se había convertido en un reto.

Era una prueba, lo que significaba que el experimento sólo era válido si bebían lo mismo, ¿no? Un shot del vodka de Tadashi, una lata de bebida sabor fresa de Kei, otro shot y ahora una bebida sabor manzana...por supuesto, como ya sabían, Kei estaba borracho después del cuarto shot y dos latas de bebida, aún reclamando que no estaba borracho.

—¿Suficiente o vas a terminar vomitando? — Tadashi pregunta, sonriendo mientras bebía una lata sabor cereza — Ya no puedo beber esto, sabe a medicina.

—¡Já! Estás pedo, yo gano.

—Dios, estás empezando a sonar como Kageyama y Hinata— Tadashi ríe, más ligeramente que de costumbre, bueno, está mareado, no como Kei que está completamente borracho, frunciendo el ceño con la idea, Kei es un molesto pero lindo borracho.

—¿Me veo como que me faltan neuronas? — honestamente, viendo cómo Kei intentó tomar un trago de su lata pero calculó mal y terminó derramando un poco del líquido sobre su camisa y su única reacción fue decir "oh", sí, sí parece. — ¡Acabate eso! Estoy bebiendo más que tú.

—Tsukki, por favor— le dice, sólo un poco molesto—. Puedo seguir tomando shots, pero esta cosa sabe horrible.

—¿Ves? Eso es trampa, tómatelo.

—Tsukki— le reclama pero un Kei ebrio no se detiene tan fácilmente así que trepó por la cama y lo rodeó con un brazo, manteniéndolo en su lugar mientras que su otra mano se posó sobre la de Tadashi alrededor de la lata, tratando de dársela a beber como si fuera un bebé—. Tsukki— repite, un poco más avergonzado y riendo nerviosamente cuando la lata choca contra sus dientes—. Vamos.

—Shhh, tómalo— arrastra las palabras, lo cual hace a Tadashi reír. Kei volvió a empujarla hasta que la lata estuvo contra sus labios, Tadashi lo alcanzó con la otra mano y terminó bebiendo, era sabor cereza y lo odiaba aún más que el vodka puro, el sabor a dulce artificial no era de su agrado de por sí, juntarlo con alcohol le daba náuseas, aún así bebió el resto de la lata y se lanzó por otro shot de vodka cuando terminó para quitarse el sabor de la boca.

Cuando vuelve a mirar a Kei, él está recargado contra las almohadas, aplaudiendo lentamente y con una ligera sonrisa en sus labios.

—Bien hecho, 'Guchi— ríe—. Ya estás aprendiendo a beber.

—Cállate— le dice, tirándose en la cama a su lado.

—Me falta un shot ahora, ¿verdad?

—No— miente, porque está lo suficientemente borracho, ahora es momento de convencerlo para que no termine de rodillas en el baño.

—¿Cuánto más crees que falten para que literalmente no recuerde nada mañana?

—Tsukki— se queja—. Ya dices que no recuerdas nada cuando estás así.

—Eso es porque es vergonzoso— confiesa—. De verdad quiero no recordar.

—Vas a estar mirando el techo toda la noche, ¿qué no quieres recordar?

Kei aún así se levantó por su vaso de shot para servirse otro y tomarlo haciendo gestos.

—Entonces empieza a hablar de cosas que no quieres que recuerde.