EL CELOSO DE MI SUEGRO (+18)

El chorro

Leo levantó mis piernas, hundió la cabeza de nuevo en mis partes y continuó lamiéndolas.
-Mm Leo, se siente tan bien...
-Aún se puede sentir mejor- cogió el mando de la ducha y cambió su chorro de modo que ahora salía con más potencia, me recorrió la vulva y finalmente lo dejó sobre mi clítoris, haciendo pequeños movimientos con su muñeca.
-Ah, Leo, es muy fuerte, me siento rara- empecé a sentir contracciones vaginales, muchas cosquillas y algún que otro escalofrío.
A pesar de sentirme extraña en vez de bajar las piernas o cerrarlas las sujetaba bien abiertas para que me diese más fuerte el chorro.
Leo introdujo sus largos y elegantes dedos en mi interior, frotando mi pared frontal.
-Creo que me voy a venir Leo...
-No lo contengas Emma, gime para mí...
Sentí como si fuese a orinarme delante de Leo.
-¡Agh!- gemí mientras tenía un squirt y un chorro de líquido salía de mi interior- Leo me contempló en silencio.
-Eres perfecta Emma, me vuelves loco.
-Leo, tú también me enloqueces...
Me agaché y puse su miembro entre mis pechos apretados entre ellos, con su punta rozando mis labios.
-Deja que yo también colabore Leo...
-Emma...
Empecé a moverme para que mis tetas le masturbasen y abrí la boca para mamarle el glande, sus gemidos me excitaban mucho y me daban una extraña sensación de satisfacción, sobre todo cuando conseguí que se viniese llenando mi boca salpicando de nuevo mi cara con su blanco semen.