-Estábamos durmiendo... Era reconfortante tener el calor de alguien a mi lado pues, yo no acostumbro dormir con nadie...- balbuceó y me reí con ironía.

-Sí, claro...- le discutí y suspiró cansado.- Me callaré, solo para que acabes rápido.

-Solo pensaba en la manera en la que habías actuado y no pude evitarlo. Hormonas a la acción, quise alejarme pero no me dejaste hacerlo. Comenzaste a balbucear mientras te acariciaba... Así...- tocó mi vientre con sumo cuidado y me dio escalofríos, por dios que lo recordaba. Había tenido la misma reacción.- Te pregunté si te gustaba y me dijiste que sí, así que te besé, así...- llevó sus labios a mi cuello y recordé que se lo había dicho.- Te pregunté que más podía hacer, subiendo mis manos. Te pregunté si podía tocarte y me dijiste...

-Hazme tuya...- balbuceé y sus manos se metieron dentro de mi sujetador con cuidado, como lo había soñado. Claro que en mi sueño, ni él ni yo dormíamos, eso era solo algo que "siempre" hacíamos.

-Te mordiste el labio exactamente como lo haces ahora y luego...- sentí mi pecho endurecerse y Andrew soltó una pequeña risita.- Esto...- balbuceó pasando sus dedos por mis endurecidos pezones y presioné más mis pechos contra su mano, mientras mis labios liberaban un quejido.- Y bueno... Tenía que saber si estabas disfrutándolo así que...- bajó su mano hasta debajo de mi ombligo y bajó mi pantalón corto un poco antes de meter su mano con suavidad entre mis piernas, hacer un lado mis bragas y recorrer con un dedo ese lugar tan delicado...- Estabas tan húmeda como ahora...

-Ah, Andrew...- gemí apoyando mi cabeza en su pecho y sacó su mano, dejándome dolorida allí pero en cuanto oí que hacía, me sorprendí, me sonrojé y mis dolores crecieron. Tenía ese travieso dedo entre sus labios...

-Y sabías tan delicioso como ahora.- suspiré una vez más y volteé hacia él, para verlo a los ojos.- Fue lo máximo a lo que llegué...

-Eso no explica que haces aquí...- le recordé pero no podía quitar mi atención del dedo que aun mantenía cerca de sus labios.

-Me gusta acostarme contigo, verte dormir... Es la única forma de tener una imagen de ti para todo el día porque no te dejas ver nunca. No estás cuando me voy, no estás cuando llego. Tomo mis desayunos calientes y como mi cena de igual manera pero no es lo mismo sin ti...- parpadeé más comprensiva y me permití sonreír hacia él.- Y por cierto, no hago nada más que abrazarte cuando vengo entre días. Tú eres la que comienza a soñar y no me deja dormir...

-Lo siento, son mis enloquecidas hormonas de virgen.- me burlé y se inclinó a mi lo suficiente como para que su frente quedara pegada a la mía.

-¿Puedo hacer algo por ti?- preguntó en un susurro, sin quitar su mirada de la mía y de mis labios.

-¿Quieres acabar de darme el masaje que no dejaste que Harry me diera?- le pregunté y una media sonrisa se dibujó en su rostro antes de que se inclinara aun más para intentar tocar mis labios, pero me alejé lo suficiente.- Esa será tu paga.

-De acuerdo, pero que no se te olvide que solo tengo un brazo...- se burló arrodillándose en la cama y yo hice lo mismo.- Pero aun puedo moverlo de... Todas formas.- se entrecortó por el dolor que sentía al mover su brazo para dejarlo sobre mi hombro como el otro, entonces hizo presión.

-Mmm...- comencé al sentir sus manos.- Mhmm... Así...- no sé en que momento de los masajes perdí el control pero mis suspiros (por no admitir que eran gemidos) crecieron.- Mmhm, sí... Dios, ah, así, Andrew... Oh, dios... Más... Fuerte, mmmh, ahhh.- entonces sentí su cuerpo pegado al mío y sus manos bajaron a mis senos.- Andrew...- lo regañé con voz cortada, pero era algo tarde ya que sus labios estaban en mi cuello y su respiración agitada sonaba en mis oídos.- Andrew...

Honey Girl [TERMINADO]Where stories live. Discover now