002 / Al Oeste

40 10 0
                                    

Emma Walsh

Entré a mi casa con miedo, solloze al ver todo destruido, las mesas rotas, los sofás rasgados y las paredes manchadas con sangre.

Quería gritar.

Estaba desesperada.

—¿Mamá?—Pregunté subiendo las escaleras—¿Kayli?—Llame a mi hermana, no escuché respuesta.

Deje de moverme al ver una puerta entré abierta, me metí con cuidado encontrandome con mi mamá en el suelo presionando su abdomen débilmente.

—Mamá—Me arrodille a su lado.

—Dios mío, mis plegarias fueron escuchadas, estas viva hija mía—Sonrió felíz mamá, le quité la mano de la herida, abrí la camisa para investigar la herida.

—No es profunda, estarás bien—La abrace con cuidado de no aplastarla—¿Y Kayli?¿Ella está bien?

—Fue por tu padre no mucho después de que te fuiste—Comentó.

—¿Está en la comisaría?—Asintió, suspire aliviada—Vamos al auto, te ayudaré a subir y nos iremos.

Ayudé a mamá a pararse, tomamos un poco de ropa y toda la comida que teníamos en la casa, como no también llevamos a el fiel a amigo de la familia.

Ikeni, un perro Pitbull de cinco meses, cariñoso y muy dormilón. Se había escondido debajo de la cama en el momento del ataque según lo que comentó mamá quien trató de protegerlo de todas las formas posibles.

Y lo logró.

—Iremos a la comisaría y luego a el Oeste—Hable.

—¿Al Oeste?¿Qué hay ahí?

—Según lo que me dijeron hay una base de refugiados y tenemos dos días para llegar.

—¿Quién te lo dijo?

Miré a mamá a los ojos, ¿Cómo le diría qué fue uno de ellos quién me dio la información?

—Una persona—Solté, asintió no muy convencida.

Llegamos a la estación de policía, baje con cuidado. Detuve a mamá cuando trató de bajar.

—Mamá escuchame, no hagas ruido, ellos no son buenos escuchando, solo que no te vean—Sin dejarla responder cerre la puerta, subió las ventanillas y se agachó, Ikeni sin saber porque también lo hizo.

Sonreí.

Eran tan lindo.

Me adentre en la comisaría, habían policías muertos en el suelo, conocidos, eran amigos de Papá. Tomé sus armas con total dolor.

También tome un equipo de primeros auxilios para tratar la herida de mamá.

Papá y Kayli no estaban ahí, lo deduje al momento de entrar en la oficina de Papá y no ver las fotos familiares, nadie más que el las llevaría.

Miré el papel doblado con mi nombre escrito.

Emma, ve con tu madre al oeste, hay
Un campo de refugiados. Nos vemos allí. Las amamos.

At: Papá y Kayli.

Tome la carta y sali corriendo de la estación directo al auto, subí al vehículo y deje el arma sobre mamá. No sabimos disparar pero haríamos el intento.

—Papá y Kayli fueron al Oeste al el campo, los encontraremos allá—Comenté entregandole la carta. Estaba sorprendida, ese chico ¿Back? me había dado la información correcta, ¿Pero por qué?

De repente recordé algo y brinque en mi lugar, ¿Por qué me había besado?¿Era algo que ellos solian hacer? Me pregunté confundída, inconscientemente lleve una mano hacía mis labios, el era un chico lindo pero era uno de esos monstruos.

¿Qué significaba?

—Emma ¿Qué tienes?—Indago mamá preocupada.

—Estaba pensando en nuestra familia, me preocupa que no lleguen al Oeste como dijo papá. Además Victor...no sabemos nada de el—Hable apenada, Victor era mi hermano mayor, un militar que esta al servicio desde hace un año, llevamos mucho tiempo sin verlo.

—Estarán bien. Ahora ayudame, no puedo sola—Levantó una aguja con hilo, asenti desinfectantando mis manos para tomarla.

Suspire antes de susurrarle a mamá que todo estaría bien.

Pase lo que pase.



























—Se ve peligroso—Miré el vecindario que tenía delante, Ikeni chillo asustado. ¿Habrían más de ellos ahí?—Mejor lo rodeamos ¿No crees pequeño?—Acaricie su cabeza sonriendo leve.

Mamá, Loren, dormía en el asiento de copiloto. Se había desmayado luego de coserla pero se repondria, solo debía apresurarme y llegar a la base para que la tratatan como era debido. La noche se estaba poniendo, solo quedaba esta noche y el día de mañana antes de que anocheciera.

¿Qué haran ellos en la noche?¿Descansaran?

Suspire, era mejor dejar de pensarlo tanto.

Avance en el vehículo, me paralice al ver a una criatura oscura en el suelo, parecía estar paralizado, quizás resbalo y cayó. Era extremadamente grande, tendría unos dos metros de altura y se veía bastante flaco.

¿Qué habrá pasado?

Sea lo que sea, espero que no se levanté en mucho tiempo.



I N E F A B L EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora