Lost in Love // Zayn Malik

Capitulo 2 - No te vallas.

Tome aire repetidas veces, esto, esto era lo que me faltaba, que mi padre nos dejara, me quería morir, no podía controlar mi respiración, me posicione sobre mis rodilla, no podía contener más tiempo en mi estas lágrimas, no me importaba llorar frente a mi madre, pero necesitaba respuestas, y solo ella me las podría dar. Levante mi rostro y mire a mi madre, tan solo me miraba pero no hablaba, era el momento.

-¡Madre!- la llame, con un tono de voz grotesco - Me podrías decir el motivo del por qué él se ha ido y nos ha dejado - mi respiración era entre cortada, no me podía controlar, sentía que me moría; ella no respondía, solo me miraba -¡Te acabo de hacer una pregunta, no piensas responder!- le grite, tan fuerte que hasta yo me asuste.

-Nos ha engañado tanto tiempo hija- dijo, con su respiración entre cortada -Todo este tiempo fingió que nos amaba cuando solo mentía- lagrimas caían por el contorno de sus mejillas, frunció el ceño y continuo -Él tenía una amante, llevaba tiempo sospechando, pero jamás creí que el fuera capaz de hacernos esto, no sé cómo, ni por qué, pero el ya no era feliz a nuestro lado. Hace días, cuando estabas en casa de Taylor, tu padre llego borracho, me enfurecí en cuanto vi su estado, le pregunte que cual era el motivo, que si algo andaba mal en el trabajo, pero él no respondió mis preguntas, solo me miro y se burló, eh irónicamente me dijo "El único problema que tengo eres tú y tu estúpida hija que solo han sido un estorbo para mí todo este tiempo, yo tan joven, a mis 41 años pudiendo disfrutar de la vida, pero no, tengo que ir a trabajar para que ustedes se traguen lo que yo compro ¡con mi dinero! Pero sabes que, yo no las amo, es más, en este momento me voy con Rosie, ella sí que me entiende". Hija, esas fueron sus últimas palabras antes que cruzo con migo, agarro una maleta y hecho todo lo que pudo, trate de detenerlo, le grite, me hinque para que permaneciera a nuestros lados, pero no lo logre, él se ha ido, nos ha dejado por esas estúpida mujer llamada Rosie- dijo ella, pobre de mi madre, se veía mal, en el momento en el que abrí la boca para decir algo, ella me detuvo - Rosie Smith es su nombre, ella es la mujer, fue lo único que pude investigar, sé que tal vez estés molestas con migo por no habértelo dicho antes, pero hija, no sabía cómo explicarte esta tragedia, no sabía cómo lo tomarías, tenía miedo a que me dejaras por coraje- fue lo último que dijo antes de taparse su rostro con uno de sus cojines.

Trague saliva con lágrimas que habían entrado a mi boca mientras mi madre hablaba, no podía, sabía que debía decir algo, hacerle saber que no estaba molesta con ella y que jamás me iría de su lado, pero las palabras no me salían, las tenía atoradas en mi garganta, lo único que salía de mi eran lágrimas, y más lágrimas, no me podía contener, me le acerque y la abrase tan fuerte como pude, me necesitaba, nos necesitábamos, solo éramos ella y yo.

Después de estar unos minutos abrazadas, era mi momento, estaba lista para hablar, no sabía exactamente lo que debía decir, pero sabía que tenía que decir algo -Madre, yo no me iré, permaneceré con Tigo hasta el día en el que me case o algo así - la tome de la barbilla eh hice que me mirara -Jamás, escucha, jamás te dejare sola, ahora solo somos tu y yo, ya averiguaremos como superar esto, pero lo aremos juntas, estas bien- fue lo que me salió, sabía que no era suficiente, pero en el momento en el que mi madre, beso mi mejilla y me abrazo, supe que esas tontas palabras que habían salido de mi boca, le habían ayudado aunque sea un poco.

*

Estaba ya lista para irme al instituto, había pasado una mala noche, llorando y soportando las arcadas, y el odio inmenso que sentía hacia mi padre y esa mujer, pero una vez alguien me dijo "No guardes rencor en tu corazón o vivirás rodeada de amargura" era el momento de usar esas palabras en mi vida.

Tome mis cosas y me dirigí hacia al comedor, mi madre había hecho mis desayuno favorito, panqueques y zumo de naranja, me senté en mi respectivo lugar, mi madre enfrente de mí, tomamos el desayuno en silencio, al término, me levante y bese la mejilla de mi madre antes de tomar camino al instituto.