El espectáculo natural parecía acabarse terriblemente rápido, pero cuando Kyungsoo se separó para ver a Jongin, el más alto al fin pudo observar los meteoros, o eso fue lo que creyó, porque dentro de los ojos de su compañero inocente, encontró el brillo de muchas estrellas... 

     —¡Eso fue hermoso, Jongin!

     —Es hermoso. Es —lo corrigió.

     —Fue, porque ya acabó.

     —No habló de los meteoros, sino de ti.

     —¿De mí? —preguntó abriendo mucho sus ojos y pestañeando rápidamente dándole una apariencia más adorable.

     —Me gustas más que todas las estrellas, Kyungsoo.

     El muchacho levantó sus cejas y boqueó sin saber qué decir, Jongin se acercó despacio, se inclinó y lo besó. Lo abrazó por la cintura y el más bajo se levantó en la punta de los pies mientras se sujetaba de Jongin sin interrumpir el beso. Era suave, inocente, pero amoroso, justo como Kyungsoo.

     Escucharon a una persona abrir la puerta y al voltear descubrieron a Sehun.

     —Oh, lo siento. No sabía que... Yo vine a ver los meteoros y... —En la espalda de Sehun colgaba un estuche con un pequeño telescopio.

     —Olvídalo, Sehun, el espectáculo acaba de terminar...  —informó Jongin.

     —Me quedé dormido —dijo fastidiado—. Corrí en cuanto desperté y aun así no logré ver nada. Solo vine a interrumpir, lo lamento.

     —¿Ya conoces a Kyungsoo, mi compañero de habitación? Kyungie, él es Sehun, uno de mis mejores amigos.

     Kyungsoo parecía muy avergonzado porque Sehun los hubiera descubierto en medio de un beso, inclinó su cabeza a modo de saludo sin decir una sola palabra y durante todo el rato evitó mirar a Sehun a los ojos. Jongin pensó que era completamente la cosa más tímida que existía.

     Sehun no necesitaba verlo dos veces para reconocer a ese hombre... pero se dio cuenta del modo en que Jongin lo miraba, así que evitó mencionar nada. Se despidió con cortesía y volvió a dejarlos solos.

     Kyungsoo salió del cubículo del sanitario para lavarse las manos y encontró a Sehun apoyado en el lavamanos, esperándolo. Le había parecido que desde hace tres días este lo seguía como una sombra y le causaba escalofríos.

     —Así que Kyungsoo, eh...

     —Sí, ese es mi nombre.

     —La primera vez que nos vimos no nos dio tiempo de presentarnos, solo follamos. Era un sitio muy similar a este. ¿Lo recuerdas?

     La piel blanca de Kyungsoo se tornó roja como una manzana.

     —Y-yo, y-yo... perdóname, por favor —suplicó haciendo una venia—. Sabía que tu rostro me era familiar... La verdad no lo recuerdo muy bien, era la primera vez que tomaba licor y yo... yo no soy para nada de esa manera... de hecho yo nunca, nunca... —Y en ese punto de sus titubeos, empezó a llorar alarmando a Sehun.

     —Oye, tranquilo. ¿Estás bien?

     —Seguramente estás pensando que soy una persona horrible... Entraste justo en el momento que Jongin me besaba, él dijo que yo le gusto. Nunca antes le había gustado a nadie, ¿entiendes? Pero debes pensar que soy de lo peor. No te culpo, mi comportamiento ha sido errado y reprochable. Perdóname, por favor —volvió a suplicar, esta vez con más fuerza. En ese preciso momento, Chanyeol entró al sanitario.

Inocente [Fanfiction EXO]Where stories live. Discover now