Hipersexual

Capítulo 11

Donde están mis cosas, dios un maldito lápiz, lo he perdido, tomo el bolso y guardo todos los cuadernos. - Verónica- Dijo mamá en tono tímido.

- Espera, como es que es mi primer dia de Universidad y no encuentro el lápiz? Lo tenía hace un segundo- Respondo-.

- Lo tienes en la oreja- Mamá.

Levanto mis manos un poco temblorosa y ahí estaba, que desastre.

- Relajate, esto es todo lo que querías deberías estar emocionada por tu primer día en Relaciones Públicas- Dijo Papá.

Lo que no saben es que al salir de la universidad debo ir al estudio para la portada de un nuevo tema de Hipersexual, dios que nervios.

- Tienen sus cosas?- Pregunto-.
- Si, todo listo y volveremos el fin de semana- Mamá.
- Esta bien, vamos- Dije-.

Tomo mis cosas y recojo mi cabello, salimos del Penthouse y si vuelvo a escuchar a la maldita bocina decir que tengo visita voy romperla.

Salimos del Iceberg, y ellos se irán a otro taxi, me acerco y abrazo a mamá y después a papá. - Gracias por visitarme- Dije-.

- Tranquila, en cinco días vendremos- Papá.

Maldición denuevo? Otra tortura más.

Me monto en mi taxi y ellos en el suyo, mi estómago cruje y estoy asustada, todo el tiempo lo estoy, a cada rato, todo momento, constantemente, siempre estoy asustada, siempre.

Al cabo de minutos llegamos, oh dios, oh dios no. Y si olvidó mi nombre?. Calmate Verónica.

Pagó y bajo del taxi, acomodo mi bolso y sostengo más mi cabello, todas estas personas y no conozco a nadie, donde esta mi horario?. Camino mientras intento saber cual es mi siguiente clase y un tropiezo con una chica y la empujo.

- Oh, lo lamento tanto- Dije avergonzada-.
- Ve a operarte, perra- Dijo y se fue.

Que horror, miro a todas partes y me siento en una banca a esperar; no quería ser esa chica que no tiene amigos, pero aquí sera difícil hacerlos por lo que veo.

Voy y miro mi horario por cuarta vez hasta entenderlo, camino por el pasillo un poco solo y veo que la class esta llena, no quiero pasar aún, no tarde que horror, esperaré.

...............

Salgo y sin conocer nadie sostengo fuerte mis libros y espero por Marcus.

- Esa es la nueva- Escuche.

Me volteo sin reconocer a estas personas, a toda música se estaciona rápidamente Marcus con el Porshe, camino hacía el coqueta y me inclinó para abrir la puerta. - Gracias por venir amor- Digo y lo beso-.

Subo y me río suavemente, él comienza a conducir. - Que ha sido eso?- Marcus.

- No lo se- Conteste-.

Me llevo al trabajo, entramos y me dejo en mi camerino y esta vez había una suave música, relajante y me quede quieta.

Salí con traje de colegiada sexy, me sentí en mi pupitre pero no podía sacarme esta canción de la cabeza, el profesor se acercó me abrió la camiseta y tomaba con fuerza mis senos, me sentí abusada; después me arrodilló encima de su escritorio y simuló penetrarme con una regla, todo actuado.

Marcus me llevo a una discoteta, tome una pastilla creo que esta éxtasis, la música a full volumen, bailaba con Marcus sin poder parar, las luces de neón estaban por todas partes y Marcus pasó sus dedos mojados con pintura floreciente por mis labios y mi cuello, seguimos bailando y disfruto del momento, no quiero que acabe.

Marcus me tiró sobre su escritorio, me bajo el pantalón, se bajo el suyo y se coloco el condón, me levanté y lo bese, me sujete fuerte, lo metió y me contraje. - AAAAHS- Susurre y sonrió-.

Los dos perdiamos el sentido, y otra pastilla nos tomábamos; las revista era impresa, copias y copias de mi desnuda para otras empresas.

Voy a la universidad, estudio y vuelvo con Marcus, más fotos y después voy hasta su casa, me lanzó a la piscina. - No quiero que esto termine- Pienso en lo profundo-.

Al siguiente día vamos por unos helados y después volvemos al parque de diversiones, Marcus toma con fuerza mi mano, y su mirada de nerviosismo me entretiene. - Aquí vamos- Digo-.

Llegamos a lo alto de la montaña rusa y después bajamos y Marcus grita y después la brisa y la rapidez lo excita, Dios, así que me dejo llevar también - Asi se siente cuando me lo haces- Dije-.

Damos dos vueltas y después volvemos a bajar. - AAAAAH- Gritó.

Llego el jueves, y estoy enrrollada en las sabanas de Marcus, no se que sera de mi vida, él entra y se recuesta sobre mi, besa mi cuello y reposa su cabeza en mi brazo.

- No se si esto es muy perfecto o si es realmente malo pero lo disfruto- Dijo.
- Mañana vuelven mis padres Marcus- Digo-.

Suspira y sube la vista hasta mis ojos, y su barba esta un poco crecida y aún permanece sexy.

- Los días han pasado bastante rápido- Dijo.
- Si nos drogamos estos tres días de noche, si- Respondí.
- Te haré el desayuno y te llevare a la Universidad- Marcus.

Se levanta y sale de la habitación, tomo mi ropa y comienzo a vestirme.