𝐅𝐄𝐄𝐋𝐈𝐍𝐆
𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫┊Sumie Kawamura, héroe profesional conocida como Domain. Sumie se verá envuelta en una situación complicada con una nueva organización que rápidamente crece, lo que no esperaba es que cierta persona saliera de prisión...
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Una vez más estábamos en el sofá, esperando las supuestas explicaciones a Shigaraki, aunque no pasaba por desapercibida su cara de pocos amigos, debió ser algo malo.
— ¿Y bien?
— Me encontré con el líder de esa supuesta organización. — Me sorprendí por sus palabras.
— ¿Hablas en serio? — Pregunté atenta.
— ¿Y te digo algo? Son una bola de inútiles. — Gruñó.
— ¿Qué te dijo? — Pregunté.
— Quería que me uniera a ellos. — Confesó. — Sumie, tu eres el objetivo de ellos, quieren matarte.
Quedé callada, ¿Ellos matarme? ¿Por qué?
— No se el motivo, solo eso dijo. Claramente no acepté y ahí ocurrió todo, él provocó las explosiones y me entregó a las autoridades haciéndose el idiota. — Explicó. — Desconozco su Kosei, en ningún momento lo usó.
— Eso explica...
— Cuando lo vea no me importará y lo voy a desintegrar. — Advirtió.
— No, lo necesitamos para el interrogatorio, no hay que matarlo al menos que se rehusé. — Dije.
— Si pasa me avisas para desintegrarlo, ese tipo me las pagará por devolverme a ese lugar asqueroso. — Si que estaba molesto Shigaraki.
— Eso pasó... — Bajé la mirada pensando.
— ¿Me crees? — Preguntó de repente.
— Dudo que seas tan idiota por hacer una estupidez y entregarte así nada más. No eres tan idiota. — Rodé los ojos.
— ¿Cómo debería tomar eso? — Volvió a preguntar. — Sonó como ofensa.
— Es un cumplido. — Suspiré mirándolo. — Shigaraki, ahora estás bajo mi cargo. Esto quiere decir que tus actos son mi responsabilidad, si haces algunas estupidez, me llamarán en seguida.
Sonrió levemente. — No estaría mal jugar con tu reputación un poco...
— Lo haces y te mato yo misma. — Le miré mal.
Se encogió de hombros. — No prometo nada.
Mis ojos se dirigieron a sus manos, ya no estaban tan resecas como antes, lo cual, aumentó mi curiosidad, por inercia tomé una de sus manos, analizándola con cuidado, la expresión de burla de Shigaraki cambió totalmente, ante mi tacto se tensó.
— Tus manos no están como antes, están más suaves. — Comenté sin verlo a los ojos.
— Tch... — Gruñó bajo. — Haces que todo sea difícil.
No comprendí sus palabras, por lo que, tuve que verlo a los ojos, soltando su mano, ¿Qué quiso decir?
— ¿Qué cosa es difícil? — Pregunté.
— ¿Qué tan tonta puedes llegar a ser? — Preguntó.
Su mano tomó mi mentón, atrayéndome a él.
— ¿E-Eh?
Sus labios tomaron los míos callando lo que iba a decir, abrí los ojos grande sin creerme lo que sucedía, esta era la primera vez que podía sentir su cercanía, en el pasado solo lograron ser pequeñas insinuaciones y caricias pero sentir sus labios era totalmente distinto, en segundos terminé por corresponder el afecto, sintiendo mi corazón y mi ser volver a la vida, una sensación totalmente distinta. Seguí el ritmo que sus labios llevaban viajando a otro mundo, donde solo los dos existimos, tomé su rostro con mis manos, acariciando suavemente su piel, deseaba que fuera eterno pero entonces el aire comenzó a faltar, obligándonos a separarnos, fueron escasos centímetros, lo suficiente para mirarnos.
— Sabes que te odio... ¿No? — Murmuró Shigaraki.
Fueron sus palabras que me hizo comprender la sinceridad de sus sentimientos, tal vez no lo aceptaba pero entonces el tiempo dictará lo que sucederá.
Sonreí levemente. — Lo sé, amargado.
Se sentía bien el que pudiera tocar libremente, sin el miedo de desintegrar, porque después de todo, Shigaraki había conseguido controlar bien su quirk, me dejaba tranquila, empezar a creer que desde ahora en adelante todo estaría bien, con él yo estaría bien, estando a su lado mientras pueda estar con vida.
