-Quackity? No lo conozco, para mi es el acepta sobornos
historia de Quackity
no habrá nada +18
esta es una historia que quería sacar muchisisismo antes que ¿friendship or love? ", tenía la idea pero no sabía cómo desarrollarla, así que sólo léanla...
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Los días habían pasado, sintiéndose cercano el momento en el que aquella chica tuviera que despedirse de su amado.
Hoy sería su última noche durmiendo juntos , su última noche haciendo recuerdos los dos al lado de otro y aunque no sería la última vez que estarían juntos se sentía como si así lo fuera.
-no puedo creer que mañana salga tu vuelo - musito el pelinegro acariciando el pelo de la rubia
-Pero Alex no te desanimes, nos veremos muchas veces más, vendré a visitarte y tu podrás ir también a México - la rubia soltó un suspiro y posó su mirada en el - te lo prometo - dejo un pequeño beso en los labios de él
-Creo que eres lo único que me mantiene vivo en estos momentos
-Eres un idiota! - la rubia le pegó un golpe en el hombro mirándolo - eres increíble , tu única razon de vivir deberías ser tu mismo
-Si ,pero también te agrego a la lista - el del gorro dejo salir una pequeña risita mientras acariciaba el pelo de la contraria
Así pasaron su última noche , entre juegos y platicas tribiales , manteniendo la promesa de verse de nuevo y más seguido. No pasó mucho tiempo más para que los dos jóvenes se quedarán plácidamente dormidos abrazados
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Alexis veía a la rubia cerrar la maleta, pensaba en lo linda que se veía incluso haciendo una cosa tan simple como esa aunque muy en el fondo ese sentimiento de tristeza se encontraba. La iba a echar de menos, se había acostumbrado a la presencia de Laurette, verla recién despierta, comiendo cerial aún adormilada y la veces en las que se quedaba dormida en su hombro casi al final de una película. Soltó un suspiro casi que nostálgico, definitivamente iba a extrañar a esa linda rubia de ojos azules.
-Listo - escucho decir a la rubia con su maleta en mano - el vuelo sale en dos horas así que tenemos tiempo de llegar y comer algo juntos
-Claro, lo que quieras - el más alto tomo la maleta con una sonrisa reprimiendo sus ganas de besarla
Los dos subieron al auto del pelinegro empezando su camino hacia el aeropuerto, y aunque el viaje solo fuera de 30 minutos por dentro deseaban que durará una eternidad, queriendo detener el tiempo un poco más. Buscaron algo que comer en el área de alimentos hasta que se decidieron por un Subway cada uno, se sentaron en una de las mesas y empezaron a comer con tranquilidad pues aún tenían un poco de tiempo antes de que el vuelo de la más baja saliera.
