CHICOS POBRES CON CORAZONES RICOS... |ATEEZ|

Cap 2.- Sabes más de lo pactado... ¿ahora qué? (pt3)

—Entonces... tú y Wooyoung, son... ¿algo?

Notó como Yeosang se puso rígido casi imperceptiblemente.

—¿A qué te refieres? —cuestionó tenso.

Hubo un valiente intento de actuar como si nada estuviera pasando, pero Hongjoong...

Él creció en un lugar que era la más extraña mezcla entre libertad y aprisionamiento. Había visto parejas de todo tipo, ser aceptadas sin chistar. Pero también había visto parejas al extremo opuesto del espectro, siendo molestados y atormentados dentro de ese mismo espacio.

Sabía con bastante exactitud cómo se veía alguien que estaba escondiéndose. Y podría creerse la actuación de Yeosang, si no estuviera tan seguro que esas bromas que vio antes y sus reacciones a todas ellas...

Seonghwa recordándoles de la presencia de Hongjoong; un extraño

Eso... y el ligero destello de miedo en los ojos de Yeosang

Hongjoong se quedó quieto por un momento, como tratando de no asustar a una pequeña paloma que saltaba por el suelo. Él fue afortunado de sólo experimentar esa clase de miedo por un periodo muy corto en su vida. Pero había visto suficiente en otras personas de sus antiguas escuelas.

— No le diré a nadie. —dijo con firmeza, mirando a Yeosang

Yeosang... tal vez podía ser un poco distante y frío, pero nunca le había hecho nada a Hongjoong.

E incluso si lo hubiera hecho... ese asunto no era algo que deba usarse para vengarse de alguien.

Su pecho se apretó un poco cuando los dedos de Yeosang se aferraron contra el borde del escritorio, mirando alrededor, como si de pronto fuera dolorosamente consciente de su soledad. Sin nadie que pudiera ayudarlo o desviar el tema.

—Escucha —dijo Hongjoong sin rodeos, reuniendo sus cosas porque después de todo, aún tenía que ir a clases. —No tengo derecho a juzgarte. Yo solamente he salido con chicos.

Los labios de Yeosang se presionaron a la vez que su rostro se volvía pálido y sepulcral.

— Y tal vez no me conozcas —aseguró Hongjoong — pero, confía en mí, Yeosang. Yo nunca usaría algo así en tu contra. Eso es tan jodido en niveles que ni siquiera la mitad de las personas en esta escuela se atreverían a usar.

El chico parecía querer desaparecer solo por fuerza de voluntad y Hongjoong sintió otro golpe de arrepentimiento en el pecho

—No le diré a nadie —dijo con firmeza y casi mirando al alma de Yeosang con la intensidad que demandaba que el chico entendiera eso. —No es mi asunto. Si tu quieres, voy a olvidar que he dicho una sola palabra al respecto. Pero... Incluso si no sabes nada de mí, Yeosang, puedes confiar que es algo que me llevaré a la tumba.

Dio un paso mientras se echaba la mochila al hombro, haciendo que Yeosang se pusiera rígido de nuevo.

—No conozco sus situaciones —Hongjoong admitió con firmeza — y pienso que es una porquería que tengas que esconder algo así. Pero sé bien que nadie se esconde sin un buen motivo de por medio. Así que, lo siento —dijo con pesadez — Y espero que entiendas que estoy siendo honesto.