Esta historia transcurre en un universo en el cuál Clint conoció a Kete antes de "Infinity War" formando equipo de los vengadores.
-Clin se sacrificó y no Nat
Kate, Yelena y Lucky llegaron a Manhattan, después de casi 1 hora de trayecto ambas se establecieron momentáneamente en un pequeño motel cerca del puente Brooklyn, pagaron relativamente poco, llevaban poco presupuesto y no sabían cuanto tiempo podrían tardar en encontrar a Nat y Wanda así que necesitaban ahorrar dinero.
Yelena dejo su mochila en una cama para después salir sin decir una sola palabra, Kate se sentó en la otra cama y soltó la correa de Lucky; -Apenas llegamos y ya se fue, que buena compañera-, dijo Kate hablando con Lucky, quien fue corriendo a la nevera; -Quieres comer he, te parece si pedimos pizza?-.
Yelena salio del Motel y se dirijo a un bar de mala muerte, se sentó en la barra y unos chicos comenzaron a acosarla, hasta que llego otro, se sentó hasta el otro lado de la barra y Yelena se acerco a él, escafandro bruscamente de quienes la rodeaban, quienes se quedaron insultándola de lejos.
Ambos comenzaron a hablar y después de un rato Yelena le pidió un favor; -Hace años te ayude, necesito que devuelvas el favor-, -Creo que el robar y el que casi nos arrestaran no fue ayuda-, -Pero ahora tienes trabajo, me equivoco?-, el hombre se quedo en silencio tomando de su trago, miro a Yelena y pregunto; -¿Qué necesitas-, -Algo simple, una motocicleta y algo de dinero-.
Después de negociar un rato ambos llegaron a un acuerdo: Al día siguiente a primera hora, el hombre les llevaría una motocicleta, dos celulares y 2 mil pesos en efectivo, y así, luego de algunos vasos y huesos rotos de aquellos rufianes, Yelena se dirigió nuevamente al Motel.
Kate había pedido una pizza de un restaurante nuevo, "Joe's Pizza" era nuevo en la ciudad ya que era originario de Queens, la entrego un chico bajo, castaño y bastante agradable, apenas abrir la puerta Lucky se abalanzo sobre él. Comenzaron a comer pizza y ver televisión mientras Yelena regresaba.
Apenas entrar Lucky salto en ella, Kate le grito y lo alejo para que pudiera levantarse, lo hizo y después de tomar un pedazo de pizza; -Asegúrate de apagar el televisor antes de ir a dormir-, cerro la puerta de la habitación detrás de ella.
Después de un rato, apago la TV, Lucky se acoto en el sofá y Kate fue a la habitación, ya que era un Motel, únicamente había una cama y un cuarto, así que dormirían juntas, o al menos en la misma habitación.
Antes de entrar Kate trato de pensar en que decirle, no sabía si pedir perdón o quizá simplemente "Buenas noches" seria suficiente, sin pensárselo más, entro a la habitación solo para encontrarse a Yelena completamente dormida del lado izquierdo de la cama.
Kate se tranquilizo al pensar que ya no tendría que hablar con ella hasta mañana, se sentó del otro lado de la cama, se quito las botas, la sudadera y se acomodo para dormir, no sin antes decirle algo al oído a Yelena: "Lo lamento", Kate se giro y siguió durmiendo, sin saber que Yelena no estaba precisamente dormida.
Al día siguiente Kate despertó, calentó la poca pizza que quedaba, alimento a Lucky y llamo a Yelena, quien solo le contesto con un; -Si-, desde la habitación, hasta que tocaron a la puerta y por primera vez Lucky no se vea precisamente feliz, lo que preocupo a Kate, aún que aun así abrió la puerta.
El hombre del otro lado creyó haberse equivocado, hasta que detrás apareció Yelena y salio con él, sin embargo Kate los siguió dejando a Lucky en casa. Las llevo al estacionamiento del Motel, donde estaba estacionada una motocicleta con una bolsa de dinero, Yelena y el hombre hablaron mientras Kate miraba asombrada la motocicleta.
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-Creí haberte pedido específicamente que no fuera llamativa-
-Esto es lo que ganas por pedirme cosas sin tiempo-, cuando Yelena volteo a verla, se sintió extrañamente aliviada y lo dejo, le agradeció, y se fue al cuarto; -Vámonos, debes recoger a tu perro-.
Kate se apuro a alcanzar a Yelena, le pregunto un millón de cosas, como si podría manejarla, a donde irían, si era suya ahora, y si ella escogió el color; actuaba como una niña, aunque no molestaba a Yelena, a todas sus preguntas contesto lo mismo, "No".
Tomaron sus cosas y se fueron a buscar a las demas.
