Cerca de él

28.8K 2.2K 1.6K
                                    

Hinata*

Bueno, el plan consistía en qué primero trataríamos de ser más cercanos a ellos, claro que no sería cercanos como amigos, ya no podía esperar para dar el primer paso.

Salimos otra vez del cuarto pero está vez más consientes de cada uno de nuestros movimientos.

— Mira... Yamaguchi esta ahí sirviendo la leche, tú ve y ayúdalo.

— Si ya voy... espera tú desde cuándo me das órdenes? Ya veras enano maldito.

Reí tapando mi boca para no llamar tanto la atención de los dos chicos.

Caminamos y llegamos al comedor, tenía demasiada hambre, vi como Tsukishima entro a la cocina y puso un brazo sobre el hombro de él pecoso.

Me emocioné más que él creo, porque solté un pequeño grito de emoción, ellos dejaron de hablar para voltear a verme y fingí demencia mientras miraba como una hormiga cargaba una hoja.

Kageyama*

Bueno el panorama no estaba tan mal, Tsukishima estaba al lado de Yamaguchi y Hinata los miraba con una mirada tan... Iluminada.

Fruncí el entrecejo y di pasos rápidos hasta frente a él, de pronto su mirada cambio y ahora estaba muy rojo.

HINATA ESTABA ROJO OH DIOS MÍO ES TAN LINDO CUANDO SE SONROJA UN DIA MORIRÉ POR VER ALGO TAN LINDOO

— ¿Que? Deja de mirarme así, idiota, solo vine por un vaso de leche— bueno eso no era lo que pensaba pero solo salió de mi boca.

Le di una última mirada y entre a dónde estaba esa olla grande de leche tan... Perfecta.

— No pueden ser más discretos?

— ¿Que? Atrévete a decirlo otra vez— Tsukishima se acercó a mi y dejó caer unas cuantas tapas al suelo.

Yamaguchi al parecer lo tenía bien dominado pues, con tan solo decir "Tsukishima Kei" el más alto ya estaba arrodillado pidiendo perdón.

Era divertido ver cómo se comportaban pero tenía que volver al gimnasio para poder practicar un poco más antes del partido en la noche.

- Hinata.... Tú quieres que... Uhh tú... Solo ven conmigo vamos a practicar— mi corazón estaba acelerado y no podía decir lo que quería, de seguro estaba cansado.

Hinata*

Genial, Kageyama me invitó a jugar ahora podría estar más tiempo cerca de él.

- Por aquí!!!

Esa era la señal para que yo pueda rematar esos balones que me mandaba Kageyama, todo estaba yendo de maravilla, nadie hablaba el único sonido era el de la pelota chocando fuertemente contra el suelo.

Me encanta.

Me encanta no hablar pero saber que es lo que queremos.

Me encanta lo conectados que estamos.

Me encanta que no importa como o donde, él siempre levantará el balón para mí.

Era como un sueño, que él chico que te guste siempre camine contigo para ir a casa, que siempre te proteja y nunca deje de molestarte pero con cariño.

Perdido en mis pensamientos no me di cuánta el momento en el que una pelota cayó sobre mi cabeza, en verdad dolió.

Lo miré algo molesto pero mi enojo paso al ver cómo venía preocupado a ver cómo estaba, claro que solo duró unos segundos pues pasado ese tiempo, me insulto y fue al baño, ya debía hacer lo que me dijo Tsukishima.

Respiré hondo y me adentre a el baño, lastimosamente Kageyama estaba lavándose la cara, me puse a su lado y volví a suspirar, mire por el espejo como su cara estaba algo extrañada.

- A que no puedes correr por todo el gimnasio antes que yo.

- No estoy para juegos... Yo...

- Lo suponía yo soy mucho más fuerte.

Obviamente dañé su orgullo, pues salió del baño a toda velocidad, negué con la cabeza y lo seguí.

El ligero viento que entraba de las ventanas rodando nuestras pieles, los sonidos de nuestros zapatos , nuestros gritos sin razón.

Solo podía hacer este tipo de cosas con él, y ahora estoy seguro, nunca me rendiré hasta que logré conquistarlo, aunque me cueste perder mi dignidad.

Kageyama*

Terminamos jadeando y sudando, nunca había corrido tan rápido, pero es que vamos, ¿Quién podía negarse a una petición de Hinata?

— Oye Kageyama, tengo que ir a mi cuarto no me siento bien.... ¿Puedo hacerlo?

— No soy tu dueño ni nada ¿Qué te pasa?

Vi como sus ojos antes iluminados perdían el brillo y bajaba la cabeza, dio un pesado suspiro y se dio la vuelta para dirigirse a su cuarto.

AHHH BASTA CORAZÓN NO COMIENCES A LATIR DE ESA MANERA SI LO HACES NO PODRE DEJARLO IR !!!!

- Hinata! Espera, te acompaño.

Ese brillo volvió a él, me sentía tan bien de poder ver esa carita de felicidad levemente sonrojada, era lo mejor.

Ahora hablábamos de por qué el Nekoma era él mejor equipo ,después de nosotros claro. A veces... no, siempre me daba tanto enojo ver cómo hablaba de Kenma , vamos solo era otro simple chico yo podía ser mejor que él.

— Sí, pero Kenma es muy buen setter— bien esa fue la gota que colmo mi paciencia, nadie se atrevería a decir que otro armador era mejor que yo.

Adelante mi paso y me pare frente a él, agaché mi cuerpo hasta llegar a su oído y susurré unas cuantas palabras que ojalá nunca se le olviden .

"Si vuelves a hablar de otro setter frente a mi haré que esa pequeña boca tuya no vuelva a querer hablar de cualquier otra persona"

Lo mire por última vez y camine más rápido hasta mi propio cuarto, no quería pero supongo que él estaría bien.

.
.
.
🩸

Atrás dejo a un Hinata completamente sonrojado y nervioso, nunca se imaginó que Kageyama sería así de dominante.

Estuvo como 10 minutos en shock y luego fue casi volando a contarle su avance a Tsukishima.

"KAGEYAMA ME HABLO AL OIDOO!!" grito el peli naranja ni bien llegó a su cuarto.

Él más alto misteriosamente no estaba en su cuarto, Hinata se puso una mano en la cadera y suspiro.

Al otro lado se escuchaba una conversación, y efectivamente era la voz de Tsukishima.

"Pero yo no debo tocar la puerta porque también duermo aquí!!" Kageyama gritaba.

"Y que pasa con la privacidad de Yamaguchi? Él no puede ser visto por nadie ¿entiendes?" Tsukishima parecía que quería matar a alguien

¿Qué es lo que paso?

Campamento de cuatro [ Kagehina ] [Tsukiyama]Where stories live. Discover now