EXCLUSIVA (Mitsuya Takashi x OC)

21. Estrellas 💜

¿Esto era real? Takashi y yo nos estábamos besando pero no de manera necesitada si no se manera tranquila en donde ambos disfrutábamos de aquel bello y largo beso. ¿Será igual que Ran? No lo sé pero disfrute cada segundo de ese maldito beso.

Nos separamos un poco por falta de aire y me giré al darme cuenta que ya era de noche y la luna se elevaba cada vez más.

— ¿Cuando tiempo estuvimos así? — dije sonrojada.
— C-creo que unos 15 minutos — habló con pena y sonrojado.
— Gracias, ese postre fue el mejor de todos.
— Te dije que había hecho tres postres y falta el último — seguía rojo.
— ¿Cual es el tercer postre? — rasque mi nuca y una gotita de sudor recorrió mi frente.
— No seas mal pensada — puso una cara seria — es algo que tengo que darte por obligación pero antes necesito hacerte unas preguntas.
— Está bien... Dímelas.
— ¿Quieres romper el contrato después de esto?

No esperaba esa pregunta pues creo que con el beso ya le había dejado claro que si quería estar a su lado y al menos así no sentiría forzoso ser exclusiva de Mitsuya Takashi, no me siento atada a la fuerza por nada del mundo.

— No quiero — respondí firme.
— Siguiente pregunta — saco una cajita negra de la bolsa de su pantalón — ¿puedo ser tu novio? Pero algo que no sea falso si no más real.

Abrió la cajita y en ella estaba el broche que le regale cuando éramos pequeños, se veía cuidado y también un pequeño anillo con letras grabadas.

— ¿Me estás pidiendo que seamos novios con el broche que te regale y ese anillo que dice M • T ? ¿Quién no aceptaría? — dije feliz.

Sonrió y me puso el anillo, también coloco el broche en mi cabello y se notaba muy contento.

— Yo tengo otro anillo — me mostró su mano — tiene tus iniciales — se sonrojó.
— ¿Sabías que te diría que si?
— Pues si la respuesta era negativa me iba a poner triste pero también me hubiera esforzado mucho más hasta conquistarte y me correspondieras de la misma forma.
— ¿Por qué?  Perdón si crees que está mal la pregunta pero Berchoux es bonita y creo que pudiste pedirle matrimonio desde el momento en que te sentiste enamorado de ella y aún así... Estás aquí.
— Con Berchoux no sentí lo mismo, cuando yo te vi parada frente a mi en la oficina con esa poca seguridad me pareciste valiente y muy linda — toco mi mejilla — después me respondiste de una forma segura y molesta, ¿quien hace eso en una entrevista de trabajo? Exacto Lily ¡nadie! — sonrió — me pareció curiosa la forma en cómo mis ojos brillaron cuando te mire y me interese tan rápido en saber más de ti... — suspiró.
— Pero yo siempre había sido invisible, incluso creí que te habías burlado de mi — baje la mirada.
— Para mi brillaste tanto que te convertiste en deidad.

Mi expresión era algo indescifrable y lo supe por el rostro que puso. Tenía miedo de todo y a la vez quería lanzarme a sus brazos por hacerme sentir por un momento, que yo lo podía ser todo para alguien.
Tenía la boca entre abierta y los ojos cristalinos, una lágrima amenazaba con salir pero mi mente no dejaba de repasar la última frase que salió de su boca. Sentí cómo esa lágrima recorría poco a poco mi mejilla y él aún no sabía qué decirme.

— Perdón — dije aún con la misma expresión de sorpresa — creo que mi egoísmo y mis problemas de grandeza se emocionaron por sentir que por fin alguien me necesitaba e idolatraba, perdón.
— ¿Es necesario arruinar todo con eso? — achinó los ojos — dices cosas así para protegerte.
— Me conoces — apreté los labios.
— Me gustan las chicas malas — dijo de pronto.
— ¿Soy mala? Hakkai-kun me dijo que ya le había dicho eso antes sobre mí.
— Puto Hakkai — apretó el puño — pero me gustan las que son como tú, inseguras y a la vez llenas de maldad — sonrió — porque cuando son malas pueden ser tercas y seguras de sus decisiones.
— Solo soy una tonta — hable desanimada.
— No te vuelvas a decir así porque tú tienes esto — señaló mi frente — y esto — puso su dedo sobre mi pecho — bien controlados y jamás en la vida podría considerarte una persona incapaz.