|Capítulo 8|

190 40 5
                                    

- ¿Qué haces?

- Tarea.

- ¿A las 3 de la mañana?

Zayn rodó los ojos en cuanto escribía las últimas notas que faltaba para culminar su estrategia.

- Si, y si no te importa quiero permanecer en la soledad y el silencio de mi habitación- se giró y lo miró- así que has el favor de irte.

- Todavía no entiendo porque eres tan pesado- los ojos grises de Zayn observaron con atención como el cuerpo delgado de su hermano se sentaba en su cama, a la vez que trataba de quitarle el papel que aún tenía de las manos- ¡Oh vamos Zayn, al menos deja que te ayude! ¡Estoy aburrido!

- Estoy bien así- Zayn cogió todas sus cosas y buscó la dirección hasta la puerta- prefiero sacar "0" como calificación que necesitar tu ayuda.

La mirada de James fue de ofensa pero aún así no se atrevió a insistirle, sabía de ante mano como era su hermano pequeño, y en su pequeño y reservado vocabulario no existía la palabra: Sí.

Zayn bajó las escaleras y cruzó la puerta de su casa, siendo en realidad lo que traía entre sus manos los planos y notas de lo que sería su próximo plan.

Hace menos de dos días que lo había decidido y justo ahora era el único tema que a él le importaba.

El hospital era uno de los sitios más frecuentados de la ciudad, puesto que a todas horas cientos de personas deambulaban por los pasillos. El día anterior Zayn se había tomado la tarea de estudiarlo y pudo darse cuenta que solo habían cuatro guardias de seguridad, dos en cada puerta, por lo que no sería tan complicado salir desapercibido. Las enfermeras solo visitaban a los pacientes tres veces al día, y por lo que había notado no permanecían tanto tiempo dentro de las habitaciones, pero aún así, el tiempo récord tendría que ser solo de 15 minutos ya que además de las enfermeras estaban los familiares, cuyos eran los que jamás abandonaban la puerta desde afuera.

Tenía que ser rápido, y veloz, ya que un paso en falso podría ser la próxima soga que colgaría sobre su cuello.

Frente a sus ojos el cielo se torno azul claro, y el sol hizo su gran aparición.

Dentro de sí, Zayn estaba listo, estaba preparando. Todo tendría que salir bien. Solo faltaban horas para ejecutar todo.

Una parte de él temía al resultado, pero otra, anhelaba más que nada hacer desaparecer aquello que se interponía entre sus planes.

Al principio la compasión paso por su mente, y pensó que todo esto no era más que un error, que él no era quien para decidir por la vida de nadie, y mucho más que eso, no era alguien para ejecutar tales actos.

Jamás en la vida Zayn pensó que por su mente cruzaría algo como aquello, en ningún momento se atrevió si quiera a sopesar la idea, pero justo ahora, bajo la tormentosa desesperación era lo que más ansiaba en la vida.

Por más que sonará extraño luego de dos días se había hecho creer que era lo correcto, y que al fin de cuentas, muchos eran las personas que llegaban a sobrevivir a tal estado, y bajo las circunstancias en las cuales se encontraba la madre de Jo, él bien sabía que no duraría hasta finales de año, ¿Por qué no adelantar el trabajo?, Así le ahorraba dolor y lágrimas a sus familiares. Dentro de sus planes una muerte rápida era uno de sus principales ideas, puesto que no quería ver el rostro de ella desgarrándose de dolor con el paso de los minutos, él suponía hacerlo rápido, cortar el problema de raíz y así hacer desaparecer el problema que ella representaba.

La hora transcurría con lentitud pero el lapso ya estaba marcado.

Ese día al marcar las 12:00am Clarisse dejaría de respirar.





Como si fuera WattpadWhere stories live. Discover now