El Hermano de Jackson

VIII.- Buenas Noticias

A la mañana siguiente Deucalion fue el primero en despertar sonriendo al ver que en la cama no solo se encontraba el bello jaguar que era su hijo sino que su esposo también se había transformado. Jackson no se quedó atrás y ahora era un hermoso lobo de pelaje miel con motas castañas. No pudo evitar sonreír y acariciar a cada uno de los animales. Después de las caricias decidió preparar el desayuno porque estaba seguro de que sus cachorros se despertaría con mucha hambre, después de todo habían pasado por su primera transformación completa además de que Stiles había despertado su naturaleza y eso le tomó mucha energía.

Unas horas mas tarde Stiles fue el primero en despertar, con cuidado salió de la cama y de alguna forma volvió a ser humano, desnudo pero humano. Tomó unos pantalones deportivos que Deucalion había dejado y bajo a la cocina donde se encontró al lobo bebiendo una taza de café mientras el olor de la comida inundaba sus sentidos. Ahora podía escuchar, ver y todo el paquete de ser un sobrenatural pero de alguna manera lo estaba llevando mucho mejor pero se entendía después de todo había nacido para ser eso.

- Buenos días, papá. – le saludó Stiles con un ligero sonrojo mientras movía sus manos de manera nerviosa.

Deucalion sonrió con ternura y se acercó para revolver el cabello de su hijo.

- Buenos días, Mitch.

Stiles sonrió aunque su rostro cambio a confusión cuando su padre frunció el ceño al ver su torso.

- ¡Mierda! – exclamó Stiles mirando su torso descubierto, el cual tenía algunas cicatrices de heridas de bala y en su cadera tenía una bastante gruesa, grande y larga.

- ¿Esto te sucedió en el FBI? – preguntó Deucalion viendo con atención las cicatrices de su hijo, incluso paso su dedo por la mas grande.

- La mayoría. – señaló una pequeña en su hombro un poco más grande que otras pero no sobresalía – Esta es de un accidente de cuando éramos niños. No sé si lo saben pero cuando Jackson tenían doce años y yo once tuvimos un accidente donde salimos bastante mal, estuvimos un tiempo en el hospital. – señaló las heridas de balas – Fueron hechas en mis primeros años como agente incluso cuando solo iba a de acompañante encontraba la forma de meterme en todo el problema así que era algo descuidado. – finalmente paso a la que su padre tocaba – Cuando descubrí lo sobrenatural les rogué a Sam y Dean que me llevaran con ellos cada vez que viera algo sobrenatural así que hace un año nos enfrentamos a varios demonios pero no contamos con que hubiera perros del infierno, los cuales son diferentes a los sabuesos ya que estos pueden volverse invisibles y son animales que solo siguen a su dueño. En fin, la situación se puso peligrosa y terminé siendo herido por uno de esos perros dejándome esto como regalo. – le explicó Stiles sin darse cuenta de que Noah y Jackson estaban detrás de él viéndolo con sorpresa.

- Son pruebas de lo que has superado a una edad demasiado temprana. – comentó Deucalion viendo con tristeza a su esposo pero negó con la cabeza, podía notar que había sido difícil para si hijo hablar de sus heridas y mostrarse de esa manera.

- Eres increíble Mica. – le dijo Noah con cariño mientras revolvía su cabello.

Stiles asintió algo avergonzado y luego sonrió al sentir el brazo de su hermano sobre su hombro. Amaba a su familia y sabía que aún le quedaba mucho por conocer de sus padres pero por el momento solo le bastaba con estar a su lado y disfrutar de esos momentos.

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Derek frunció el ceño al ver como la manada alfa también se encontraba en el bosque, ellos habían sido citados por Jackson, quien les había dicho que tenía que comentarles algo importante y que algo muy bueno para él y Stiles. Ambas manadas esperaban a los Stilinski, los cuales llegaron juntos entre charlas y pequeños juegos de los menores que a los ojos de Peter parecían unos cachorros molestándose.

- ¡Hola, chicos! – los saludó Stiles con una gran sonrisa recibiendo caricias en su cabello, abrazos y una pequeña caricia en su mejilla de parte de Derek.

La manada alfa no era tonta y sabía perfectamente que estaban marcando su territorio con el pequeño castaño que ya no olía como antes.

- ¿Qué querías decirnos y por qué estamos todos aquí? – preguntó Derek al lado de Stiles con sus brazos cruzados sobre su pecho y su rostro serio que solo hacía que el castaño quisiera reír con diversión.

- Como saben Mitch y yo fuimos adoptados, creímos que nuestros padres estaban muertos porque eso fue lo que nos dijeron. – empezó Jackson.

- Yo empecé a pasar tiempo con Noah y Deucalion, me sentía extraño a su alrededor, era un sentimiento bueno así que decidimos hacernos una prueba de ADN.

- Cabe decir que yo no tenía ni idea. – interrumpió Jackson con diversión mientras su hermano fruncia el ceño.

- Los resultados nos llegaron ayer y somos hijos biológicos de Deucalion y Noah o como a mi me gusta decirles papá y pops. – terminó de contar Stiles mientras señalaba a los mencionados.

- De cierta forma lo sospechaba. Desde la primera vez que vi a Noah con el cachorro supe que había una conexión mas profunda. – comentó Peter mientras abrazaba a Stiles con cariño.

- Tu siempre sabes todo, Pet Pet.

- A parte de eso al ser nuestros hijos también son un lobo y jaguar de nacimiento así que pueden transformarse por completo. – explicó Deucalion con orgullo.

Las manadas miraron a los hermanos con sorpresa, los cuales solo dejaron brillar sus ojos. Jackson en azul eléctrico y Stiles en verde.

- Te dejamos unos días y te conviertes en un sobrenatural. Debemos de hacer algo con el mocoso, Sammy.

- Déjalo Dean, es nuestro querido Michi así que podemos confiar en él.

Las manadas miraron detrás de ellas donde se encontraban dos hombre, uno alto castaño de ojos café con motas verdes y uno más bajo rubio castaño de ojos verdes.

- ¡Sam! ¡Dean! – exclamó Stiles alegre mientras abrazaba a los recién llegados.