One-shots KilluGon, By Anirreyna

Confesión

Me sentía frustrado, siempre lo mismo, me digo "eres Gon Freecs, puedes hacerlo" pero en cuanto estoy frente a él apunto de hacerlo, me dan ganas de correr e irme a vivir lo más lejos de él, quizás a la Luna, Marte o Venus.

- Kurapika como es que Leorio y tú... Ya sabes... Terminaron juntos - el rostro de Kurapika se puso como un tomate, me preguntó por qué?

- eh, Gon, esa es una historia, un tanto, adulta - odio que a veces se olviden que no soy tan inocente, así que decidí jugar un poco.

- ah! Entonces simplemente, hablaron de sus sentimientos, y luego te dieron duro contra el muro - jiji, que malo soy.

- Gon! Esas cosas no las puedes decir así nada más, en especial con lo joven que eres -

- primero no me has negado nada y segundo, tengo 17 años y tú 21, es normal que entienda de esos temas -

- eso no tiene nada que ver! y para tu información lo que haya pasado esa noche no debería importarte - advertencia, corto momento de rebeldía.

- o si no que!?-

- o si no le diré a mito-san que estas portandoté mal - dijo Killua.

- ah? Hola Killua, que bien que llegas, al menos tu si pudiste detener a este revoltoso - gracias Kurapika eres muy amable, nótese el sarcasmo.

- de nada, en fin de que hablaban?-

- de la inmortalidad del cangrejo!!!- dije casi gritando por los nervios de que el haya escuchado algo.

- en realidad Killua hablábamos de que Gon quie– Auch!- Kurapika no pudo terminar de hablar debido a que lo pise para que no hablara demás, aunque parece que me pase con la fuerza, da igual, se lo merece por chismoso.

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Hoy tuve que salir un poco más temprano de lo normal, pero todavía tengo que esperar a Kurapika y Leorio.

Decidí pasear por el campus, normalmente estaría con Killua, pero tenemos algunas clases diferentes, el debería estar ahora en clase de matemáticas y yo en clase de historia, pero Satozt-sensei nos avisó desde temprano que tuvo un problema con su auto, por eso no pudo venir.

Llegué a mi sitio favorito de todo el campus, un gran banco al que siempre le da la sombra y la Brisa, recordé las veces en las que Killua y yo solemos subir por sus ramas y ver las aulas desde arriba, una vez el director Netero nos atrapó e hizo que los del equipo de quemados nos arrojaran balones para que nos calleramos, tuvimos varios moretones y rasguños, por supuesto, no faltó las 2 semanas de castigo.

- ah~ Killua~- exhale el aire que tenía en mis pulmones mientras decía su nombre, al mismo tiempo mire hacia arriba, hacia el árbol bajo el cual estoy sentado, extrañamente escuche un ruido y cayeron unas 3 o 4 hojas, supongo que fue por el viento.

- Killua - continúe hablando con la nada - sabes, cuando no estás conmigo me siento solo, es decir, siempre estoy con Kurapika, Leorio, Zushi, Biscuit, Retz, Palm-sempai y otros más, incluso en casa estoy con mito-san y la abuela Abe, pero, no es lo mismo, siento que sin ti, estoy incompleto-

No importa que en realidad estoy solo, que simplemente estoy fingiendo que Killua está junto a mi, que realmente le estoy confesando mis sentimientos, de una forma muy torpe cabe destacar, se siente bien decirlo y por eso continue hablando.

- hace poco me di cuenta de siento un extraño sentimiento hacia ti, no lo comprendía, por eso le pregunté a Kurapika, Bizcuit y Retz, ellas me dijeron qué es amor, me enamore de ti, de tus bellos ojos tan azules como un mar en calma, tu bella voz más melodiosa que el canto de las aves, me enamore de tu compañía la cual en este momento me encantaría-

- este sentimiento hacia ti, me hace querer hacer cosas egoístas como monopolizarte, tenerte solo para mí, realmente quisiera algún día poder decírtelo en persona, pero aunque no me lo creas soy demasiado cobarde -

Estaba apunto de retirarme cuando algo o mejor dicho alguien, en un rápido movimiento se bajó de el árbol, se sentó en el banco y me tomo del hombro.

Me quedé estático.

No podía ser posible.

No no no no no no.

Me jalo del brazo y me sentó junto a él.

- gon~- esa voz la conocía perfectamente. La usa cuando quiere molestar a alguien

- ah! Ho-hola, Killua, hace... Hace cuánto que estás hay?- definitivamente me mudaré a Marte.

- no mucho, la profesora de matemáticas nos dió la clase libre, pensé que estabas en clase por eso decidí esperar a que terminarán las clases, subí al árbol para ver qué hacían los demás-

- n-no deberías hacer eso, te podría ver el director Netero, otra vez- dije obviamente desviando el tema de la pregunta ¿ Me oíste decir todo eso?

- que importa, además escuche algo realmente interesante - dijo con su típica sonrisa gatuna.

Diablos me escucho, enserio escucho todo lo que dije, Kurapika, Leorio vengan pronto o juro que moriré de vergüenza.

- Gon~ no quieres saber lo que escuche?- su voz tenía un tono realmente divertido y su sonrisa no se borraba.

- que... Escuchaste, Killua?- mi cara está ardiendo, y no podía hablar bien, el se acercó un poco más a mí.

Soltó una pequeña risa y luego siguió hablando.

- lo normal, las aves, el viento, las hojas y... Mmmm... Había algo mas, Ah! Ya recuerdo, escuché al chico que me gusta decir que está enamorado de mi, no es eso genial, Gon?- se junto mas cerca de mi y me miró fijamente.

- que?- me quedé en shock, no podía asimilar lo que Killua me estaba diciendo.

- Gon, a veces creo que eres algo lento, por eso te daré una pista- se acercó a mi y planto un suave beso en mis labios.

Unos segundos después, me recompuse y empezé a seguirle el ritmo con algo de dificultad debido a que soy inexperto, poco a poco el beso se intensificó y terminé recostado sobre la blanca, con Killua sobre mi y sus brazos a ambos lados de mi cara sosteniendolo.

Nos separamos por falta de aire y nos quedamos mirando por unos segundos antes de seguir con lo que estábamos haciendo.

Poco a poco su mano izquierda empezó a subir por debajo de mi camisa y chaqueta Verde, a su ves, las mías se enredaban en sus sedosos cabellos.

- oigan, si saben que aún están en la escuela?- dijo Leorio con un tono sumamente divertido.

- déjalos, el mismo hoy se estaba burlando de mí porque a nosotros nos pasó igual cuando nos confesamos -

Al oír sus voces enseguida caímos en cuenta de lo que hacíamos y dónde lo hacíamos, mire a Killua, su rostro estaba un poco sonrojado, sus cabellos estaban revueltos y a diferencia de mí, el tenía una sonrisa despreocupada y burlona en su rostro mientras me veía fijamente como si el fuera un león y yo un apetitoso trozo de carne.

Kurapika y Leorio estaban de brazos cruzados y viéndonos, Leorio divertido y Kurapika un tanto molesto.
- definitivamente me mudaré a Marte- dije rendido ante la vergonzosa situación. Enserio en ese momento quería que la tierra me tragara.

Fin.