^MY LADY ASTRID^

^ 07 ^

-¿Puedes explicarme qué demonios significa esto?- le preguntó su padre directamente, mientras que su madre ponía varios periódicos sobre el escritorio.

Hiccup observó atentamente cada uno de ellos. En todas las portadas habían fotos de él y Astrid en sus tantas salidas, también habían unas donde aparecían su hermano y su novia. Pues sí, en estos últimos 5 meses escapaba de algunas responsabilidades para salir y pasar tiempo con la rubia y claro está, que algunas de esas veces, eran acompañados de Jack y Elsa.

«¿El nuevo amor del Príncipe Hiccup?» «La chica misteriosa del futuro rey.»
«¿La futura reina?»
«¡Un nuevo romance real!»

Esos eran algunos de los títulos que se leían en estas portadas, resaltando un posible romance entre él y Astrid. Aunque, claramente, quería que todas esas suposiciones sean ciertas, aún no lo eran. Algunos periódicos estaban mintiendo.

-Ok, puedo explicárselos, pero van a tener que esperar a que la presente en persona ante ustedes.- declaró después de aclarar su garganta.

-¿Con quiénes crees que estás hablando, Hiccup?- espetó Estoico con fastidio- ¡Somos los reyes de todo el Reino Unido y queremos que nos lo expliques ahora!- reclamó.

-Hijo...- lo llamó Valka con más calma- ¿Sabes cuántos rumores se han creado en estos meses?- le preguntó.

-Perdónenme. De verdad, no tenía idea, pero sólo confíen en mí esta vez.- rogó.

-¿Quién es esta chica?- volvió a cuestionar la reina con un poco más de insistencia.

-Es la indicada.- respondió su hijo de inmediato, así los reyes suavisaron sus expresiones enojadas- Por eso no quiero hacer las cosas mal, hoy es su cumpleaños y voy a pasarla bien con ella. Confíen en mí.- pidió de nuevo y esta vez se alivió al ver que sus padres suspiraron resignados.

-Solo déjame recordarte que ya tienes 29 años, Hiccup. Es hora de apresurar las cosas y que te comportes como tal, necesitas una buena esposa y, al menos, un heredero.- le dijo su padre con seriedad.

El castaño solo asintió con el ceño fruncido y se retiró.

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-Está muy buena la decoración, amor.- halagó el menor de los Haddock a su novia, mientras pasaba un brazo por su cintura.

-Muchas gracias, cariño.- agradeció ella con una sonrisa orgullosa.

-Voy por unas bebidas.- avisó el chico, antes de irse y dejarla sola con su hermano.

-¿Puedes dejar de analizar a nuestros amigos? En serio, pareces loca.- le pidió el castaño en broma al verla tan impaciente, mientras miraba a todos.

-¡Cállate!- regañó la chica con ímpetu. Ella agradecía que estaban un tanto alejados de sus amigos- Solo quiero que Astrid baje ya para que se acabe está pesadilla.- confesó viendo las escaleras por donde pronto bajaría la mencionada.

-Oye, si temes que no la acepten, estás en un error.- aseguró el príncipe.

Hiccup tenía razón, estaba angustia por nada, conocía muy bien a sus amigos. Patapez Ingerman, Patán Jorgenson, Brutacio y Brutilda Thorton, Heather Berserker, Dagur y Mala Berserker y Atali; son las mejores personas de la alta sociedad.