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5 Meses después...

Mansión Hofferson...

Una paranoica y ansiosa Elsa caminaba de un lado a otro, como un león enjaulado, por todo el salón más grande de su residencia. El cual estaba completamente decorado para una elegante, pero a la vez, sencilla fiesta.

-Todo va a salir bien, cálmate, todo va a ser perfecto para tu hermana.- se decía a sí misma, mientras pasaba sus manos por su característica trenza.

-Señorita Elsa, el príncipe Jack llamó para avisar que pronto estará aquí con su hermano.- le avisó Rosa en cuanto llegó a su lado.

Pero, al parecer, la chica ni la escuchó.

-¡¿Sabes qué día es?!- chilló la ojiazul llevando sus manos a ambos aldos de su cabeza.

1 de Julio de 1977.

¿Pero qué tenía esta fecha de especial para poner a la mayor de las hermanas Hofferson de ese modo?

-Es el cumpleaños de la señorita Astrid.- respondió con simpleza la mujer.

-¡Error!- volvió a gritar la peliblanca- Es el primer cumpleaños de Astrid que lo celebramos con una fiesta y con invitados externos.- corrigió- ¿Y si no le gusta? ¿Y si algo sale mal? ¿Qué pasa si no encaja en la sociedad? ¡Me va a odiar!- empezó a disparar situaciones erróneas.

-Señorita, no sea tan dramática.- rió Rosa con sutileza- Nada de eso va a pasar. Será como otra fiesta más y su hermana s la pasará de maravilla.- aseguró antes de irse a servir los bocadillos en la mesa principal.

Elsa la vió hasta perderla de vista entrando a la cocina, inhaló profundamente y exhaló.

Tal vez, Rosa tenía razón. Todo saldrá bien.

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Castillo real de Inglaterra...

-¿Ya estás listo?- le preguntó Jack a su hermano, mientras terminaba de ajustar su corbata.

Ambos Haddock traían puesto un termo negro, lo único diferente era el color de sus corbatas. La del castaño era roja y la del ojiazul era azul marino.

-Sí. Vámonos ya.- respondió el ojiverde- Recuerda que le prometimos a Elsa llegar antes que inicie la fiesta y lleguen los invitados.- le recordó.

No obstante, cuando se dispusieron a salir de la habitación del mayor para ir a su auto, Bocón se apareció en la puerta.

-¡Wow!- exclamó al casi chocar con Hiccup- ¿Y a dónde creen que van ustedes 2, muchachos?- cuestionó llevando sus manos a sus caderas y entrecerrar sus ojos.

Los hermanos se lanzaron miradas de sorpresa.

-Aaammm...- musitó el peliblanco buscando una excusa- ¿A pasear?- dijo con duda.

Obviamente, su tutor no le creyó para nada, sin embargo, decidió no discutir. Pues tenía que avisarle algo con urgencia al mayor.

-Tu padre está llamándote, Hiccup.- anunció relajando sus expresiones- Él y tu madre te esperan en su oficina real.- añadió para luego recibir un asentamiento por parte del príncipe.

-Espérame en mi auto.- le indicó éste a su hermano menor, antes de ir con sus padres.

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^MY LADY ASTRID^Where stories live. Discover now