CAPÍTULO 28 DESASTRE

11.3K 1K 41
                                    

Melanie
Salí rápido de la ducha, no quería dejar tanto tiempo solo a mi hombre, pero desde lo alto de las escaleras observé lo que sucedía, lo que me faltaba, que esa también me lo quitara a él, ¿qué demonios le veían? Sabía que no era ella, era él, quien la acosaba, aun así me enfurecí y aproveché que pasó junto a mí, para dejarle claro quien mandaba, la tomé del cabello y la acerqué a la orilla, mi intención no era deshacerme de ella, no en ese momento, eso vendría más adelante, pero perdió el equilibrio y de no haberla soltado, yo hubiera ido a parar junto con ella, mi mente empezó a trabajar a mil por hora para idear lo que le diría a Carlos, el creería que se había tratado de un accidente, miré a mi amante salir huyendo del lugar, iba a salir tras él, cuando quede helada por lo que vi.

Carlos
Mientras conducía mi teléfono sonaba con insistencia pero no le presté atención. Llegué a la casa, apenas estaba entrando cuando escuché gritos y alcance a ver a Elisa y a Melanie en lo alto de las escaleras, Melanie luchaba con mi hermana, con horror vi cuando ella se precipitó, me quedé paralizado y horrorizado, sentí como ese tipo pasó por mi lado huyendo, pero no me importaba él, corrí hacia donde había caído mi hermana.

Mateo
Desde el momento en el que Carlos me pidió que fuera por Elisa y por sus niños, empecé a mover a mi personal, salí lo más rápido que pude en uno de mis aviones privados. Él viaje fue un total infierno, no sabía que sucedía realmente, me preocupé, más cuando al llegar llame a Carlos y no me contestó, aun cuando me había pedido que no dejará de avisar cuando estuviera en la ciudad. Sin perder tiempo subí al auto que mi asistente ya tenía listo para mí con todo y chofer, detrás mío iban dos hombres de mi equipo de seguridad, ¿no les he contado que tengo uno? Pues sí, mi familia es muy importante y a menudo surgen situaciones difíciles por lo que es necesario contar con protección, estamos en la mira de innumerables grupos de distinta naturaleza, hay ocasiones en las que me doy el lujo de prescindir de ellos, pero en general, me acompañan a todos lados, como ahora, que se movían en otro auto rentado, al igual que yo y el escolta que traía a mi lado.
Durante el trayecto a la casa de Carlos seguí marcando su número pero no respondía.

Cuando por fin llegamos, no esperé a nadie, salí corriendo, ahí estaba ya el auto de Carlos, iba a entrar, cuando un tipo salió corriendo, no averigüe de quién se trataba, si huía, no sería por nada bueno, así que lo detuve con un golpe en el rostro, cayó pesadamente y no me detuve a averiguar nada, mis escoltas se encargarían de él.

Al entrar, mi corazón dejo de latir, en la parte superior de las escaleras, Melanie miraba horrorizada otra escena, Eliza tirada a mitad de estás en un pequeño descanso, su cuerpo estaba en una posición realmente increíble, ensangrentado y sin movimiento, a su lado, Carlos intentando llamar a emergencias, luchando porque el teléfono no cayera de sus manos y al mismo tiempo luchando por tomar la decisión de moverla o esperar, estaba vuelto loco.

Yo estaba igual, pero ganó en mi la cordura, de nada me serviría entrar en pánico, tomé mi celular, marqué rápido a emergencias, porque Carlos estaba tan desesperado que no atinaba a responder lo que se le preguntaba. Empezaba a dar los datos, cuando apareció uno de mis guardaespaldas y le pedí que continuara, entregándole mi celular. Entonces me acerqué a ella le tomé el pulso y lo sentí, yo como Carlos sabíamos que no debíamos moverla, pero era aterrador verla en esa condición y no hacer nada.

_ Mi amor. - toque su mano, ni siquiera podía sostenérsela porque no sabía que tan lastimada pudiera estar. - la ayuda viene en camino, no te rindas. - dije esperando que ella pudiera escucharme.

No supe que sucedió a mi alrededor, solo era consciente de ella, de Carlos a nuestro lado y nada más, no nos separamos, hasta que la ambulancia llegó y los paramédicos tomaron el control. Fue entonces que Carlos reaccionó y fue en busca de sus pequeños, yo envié a uno de mis hombres a ponerse a su servicio, sea lo que fuera que necesitara. Sé que otro de ellos tenía retenida a Melanie y el otro al hombre que huía cuando llegamos. La Policía también había sido llamada y estaban llegando.

Lo que vino después fueron días de angustia y de espera, no había nada más que hacer

Mi hermosa novia fue llevada al mejor hospital de la ciudad, se fracturó un brazo varias costillas. Una rodilla dislocada, un fuerte golpe en la cabeza que necesitó de varias puntadas y golpes en diferentes partes del cuerpo, en estos momentos la tienen sedada, para que su organismo se recupere más rápido, los pronósticos son reservados por el golpe en la cabeza, según los estudios que le hicieron se espera que solo se trate de una inflamación, por eso optaron por sedarla.

Yo estoy desesperado, quisiera que despertara ya, pero no soy Dios, soy un simple mortal, con mucho dinero, sí, pero que en casos como este, de nada me sirve, no me queda más que esperar.

Carlos
Todo se había salido de control, me reprendí a mí mismo por no haber acudido a casa desde el primer momento en el que me di cuenta de lo que estaba sucediendo, pero sinceramente no pensé que pasará algo como esto, después de todo las cosas habían estado iguales por mucho tiempo, me refiero a que no podía predecir, que justo ahora se desencadenaría este desastre, ahora mismo mi hermana estaba hospitalizada, ni siquiera sabíamos si cuando despertara estaría bien, yo no tenía en donde dejar a mis pequeños por lo que los traía conmigo, también ellos fueron a dar al hospital, porque la zorra de Melanie los tenía sedados, esa tarde cuando el personal capacitado se hizo cargo de Eliza, recordé a mis hijos, corrí a su habitación y los encontré dormidos, me extrañó que después de todo el alboroto no despertaran, los moví y no respondieron, me asusté tanto que los llevé al hospital, antes de eso y aún en casa, uno de los paramédicos los revisó y me dijo que parecían solo estar dormidos y eso puso un poco de paz a mi alocado corazón.

No se pierdan el capítulo final de esta historia.

LA SIRVIENTA/No. 1 De La Serie: HERMANOSWhere stories live. Discover now