CAPÍTULO 4 TU HERMANO VA A ESTAR BIEN

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Maratón 1 de 3. En el transcurso del día subiré los otros dos capítulos. Espero que sean de su agrado.

Mateo
Anoche no pude conciliar el sueño, el recuerdo de su rostro angustiado me impidió dormir, a pesar de que tomé cartas en el asunto nada más llegar a mi cuarto de hotel, y no me importó que fuera de madrugada, de inmediato contacté con la empresa que me presta servicios de vigilancia y protección, es una de las mejores, no solo del país, sino del mundo, por lo mismo tienen gente en todas partes y su servicio puede ser sumamente rápido. Tan rápido que son las tres de la tarde ya tengo un informe sobre mi escritorio y no sólo eso, he contactado con José el dueño del rancho. Si me preguntan de que se trata todo esto, les diré que anoche que ella hizo esas dos llamadas, los números quedaron registrados en mi teléfono, con solo esos dos números los investigadores me informaron que el primero corresponde al hermano de ella, Fabián, el segundo es de su jefe José. Y lo que más me sorprendió fue lo que sucedía.

A veces me sorprende lo que la gente es capaz de hacer, o será que yo no podría dejar de tenderle la mano a alguien en necesidad. Es culpa de mis padres, aunque siempre hemos estado bien económicamente, nos enseñaron a ver por los menos afortunados, quizás por eso tenemos tanto, mientas más damos, más recibimos. Bueno el caso es que ahora estoy desesperado por verla y no puedo quejarme de mi buena suerte, porque mientras me quebraba la cabeza pensando de qué forma acercarme a la casa de Carlos sin ser tan obvio, él llamó para hacerme una invitación a cenar, en otro tiempo claro que la hubiese rechazado, pero ahora me caía llovida del cielo, así que acepté.

Elisa
Está noche Carlos y Melanie tienen de nuevo invitados, no les bastó la fiesta de anoche, pero así son ellos, les gusta presumir lo que tienen, malo para mí, porque nuevamente todo el trabajo recae sobre mis hombros, estoy exhausta, gracias a Dios los niños ya se durmieron y yo puedo tener un respiro, con sigilo me dirijo hacia el jardín, mi lugar preferido es el rincón más remoto, en donde nadie se acerca. Es un lugar olvidado por los demás, en donde un poco de maleza ha crecido, a mí no me molesta, porque me esconde de los demás, nadie pensaría, que ahí hay alguien, salvo aquel hombre que la noche de ayer llegó hasta ahí, seguramente estaba perdido. Su recuerdo me hace estremecer, era tan apuesto, tan varonil, y tan amable, nada que ver con el tipo de gente que mi hermano y su esposa acostumbran a traer, todos me ven con desprecio, con altanería, con superioridad, pero él no, era tanta mi desesperación que permití que se me acercara, en lugar de alejarme de él y lo peor, le pedí ayuda, fue una gran sorpresa que él aceptara hacerlo. No lo esperaba.

Melanie aún no me regresa mi celular, sin embargo, lo intenté nuevamente esta mañana desde el teléfono de la casa, a escondidas, claro, pero sigo sin obtener respuesta de ninguno de los dos.

Estoy tan absorta en mis pensamientos que no escucho nada hasta que alguien hace ruido demasiado cerca de mí. Estoy a punto de gritar asustada, cuando lo veo.

Mateo
La cena a transcurrido demasiado aburrida para mí, por supuesto no era el único invitado, estoy harto de sus charlas presuntuosas y vacías, cada quien se esmera en hacer ver a los demás, que es el que más posee o el que está mejor posicionado en los negocios, o el que más poder tiene. Llega un momento en el que no aguanto más, me disculpo y pregunto con discreción a mis anfitriones por el cuarto de baño, me miran desconcertados, pero quieren quedar bien conmigo y todo se me perdona, así que salgo. No pierdo tiempo y me dirijo hacia el jardín, ni siquiera, se por qué debería encontrarla de nuevo ahí, pero es el primer lugar que se me ocurre, de no encontrarla la buscaré en cada habitación de la casa si es posible.

Camino en la dirección en la que lo hice la noche anterior, está un poco alejada de la casa, la verdad es que no sé cómo llegué ahí ayer, pero lo hice, miro hacia adelante y aunque el jardín está iluminado, esa parte en especial permanece en penumbras, la visibilidad no es mucha, aun así, distingo su silueta y doy gracias mentalmente, me acerco y ella pega un brinco asustada.

_ Disculpa. - me detengo. _no era mi intención asustarte.

_ No esperaba verlo aquí. - me miró con sus ojos expresivos.

_ La verdad es que te estaba buscando.

_ ¿A mí? - no pudo ocultar su sorpresa.

_ Si. - dije acercándome un poco más. _ necesitaba hablar contigo, pero ni siquiera, sabía si te podría encontrar Aquí

_ Quizás a sus anfitriones no les agrade que hable conmigo. - dijo con timidez.

_ Lo siento por ellos. - digo sin apartar mi vista de ella, la pongo nerviosa y miro hacia otro lado. _ solo vengo a decirte que tu hermano está bien. - digo mirándola de nuevo.

Ella me mira sumamente sorprendida.

_ ¿Recuerdas que marcaste de mi celular? - pregunto.

Ella asiente con su rostro aún sorprendido.

_ Pues, está mañana recibí una llamada de José, el jefe de él. - mentí. _ ninguno contestaba porque tu hermano se puso mal y lo estaban llevando a que recibiera, atención médica, pero ya está mejor. - me apresuro a decir al ver su cara de preocupación.

_ ¿De verdad está mejor? - me mira con ansiedad.

_ Así es. - asiento. _ el mismo te llamará en cuanto tenga oportunidad.

Me estoy arriesgando a que esto no pueda ser posible porque, él realmente está mal, pero yo creo que con el tratamiento adecuado en uno o dos días pueda de verdad comunicarse con ella.

NOTA:
Para quienes me piden más. Se que los capítulos son cortitos, lo siento, para compensar va este maratón.
Bendiciones.

LA SIRVIENTA/No. 1 De La Serie: HERMANOSWhere stories live. Discover now