Capítulo 26: Giovanni.

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1.

Me hago un té y Blake se hace café, nos vamos a sentar al sillón.

— Pasaron rápido los días.

Lo quedo mirando, se ve relajado.

— Sí, deberíamos venir otra vez — comento.

— O ir a la playa, la verdad me gusta más el buceo que esquiar.

— Pero eres bueno esquiando — puntualizo.

— Soy bueno en todo por naturaleza — contesta con una sonrisa engreída.

Ruedo los ojos pero sonrío divertido. Es un creído.

Sigo tomando de mi té. Escucho pasos y veo que es Olivia que baja las escaleras, se acerca a su esposo y le da un beso. Creo que es la primera vez que los veo besándose.

— ¿Amor te dije que Giovanni es mi nuevo mejor amigo? — le pregunta Olivia a Blake.

Sonrío divertido mirando un segundo a la pelirroja.

— ¿Ah sí? — nos pregunta divertido.

— Somos hermanos separados al nacer — bromeo — ¿no ves el parecido?.

Blake se ríe.

— Oh claro, sobre todo en el cabello.

Nos reímos y luego Olivia se va a servir café, se sienta al medio de los dos.

— Amor, Julie va a hacer una fiesta por su cumpleaños y quiere que vayamos.

Blake hace una mueca.

— Odio a esa chica.

— Lo sé y yo igual pero de todas maneras quiero que vayamos.

Su esposo lanza un suspiro.

— Mándale un mensaje a Elisabet — es todo lo que contesta.

Olivia sonríe.

Terminamos de tomar desayuno y me voy a ordenar mis cosas, pongo todo en mi maleta. Le envío un mensaje a mi madre para avisarle que voy a llegar hoy.

Salgo de la habitación y bajo al primer piso, veo a Athanasia comiendo papas fritas con un café en la cocina.

Me sonrojo un poco al recordar la erección de ayer pero me calmo y solo rezo para que no se haya dado cuenta.

— Giovanni — sonríe al verme — Sabrina estuvo aquí recién y dijo que se irá con Olivia y Blake.

— ¿Por qué?.

Se encoje de hombros.

— No sé, no le pregunte.

Asiento. No es cómo si me molestara estar solo con Anthia, en realidad es todo lo contrario.

— ¿Ya estás listo para regresar? — me pregunta curiosa.

Lanzo un suspiro.

— Bueno... — me recargo en el mueble de la cocina — tengo que dar un examen del que depende a cuál universidad voy, mi padre se opera y quizás tenga que irme en menos de 3 meses.

Hace una mueca.

— Eso es un no.

Asiento un poco desganado.

— Me siento tan… — lanzo un suspiro al no encontrar la palabra — cómo si el tiempo pasara más rápido de lo que quiero.

Solo con ella puedo ser tan sincero sobre lo que en realidad siento sin sentirme juzgado por ser más débil que el resto o menos seguro. Athanasia es mi lugar seguro desde que la conozco.

Una segunda oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora