-Cinco-

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Le despertó el sonido de una cremallera.
Girando el rostro vio a Stiles vestido y con su maleta hecha.
-¿Stiles a dónde...-
-Me he encontrado un mensaje de mi superior y tengo que volver- respondió antes de que Derek acabara la pregunta.
-Si me das cinco minutos estaré listo y nos vamos...-
-No, no, no- negó el castaño.
Arrugando el ceño y sentándose en la cama, Derek le miró extrañado:
-¿Por qué no?-
-Ya dejamos claro que no nos verían...juntos-
Dando un suspiro y asintiendo, Derek dijo:
-Claro-
-¿Qué te pasó anoche?- preguntó de repente Stiles ganándose una mirada tensa por parte del moreno.
-¿Por-por qué lo...preguntas?-
Enseñándole la pulsera, el joven respondió:
-Me la rompiste-
Derek solo se encogió de hombros.
-¡Necesitaré otra para dentro de dos semanas cuando volvamos!-
-Ya te dije que a mí no me importa-
-¡Pero a mí sí!- espetó Stiles.
A Derek le pareció percibir un leve olor a...¿Miedo? emanar del castaño.
¿Por qué olía así?
-¿Te pasa algo Stiles?- se preocupó Derek.
-Por qué me preguntas eso- inquirió sin énfasis el joven.
-Porque hueles como si tuvieras miedo-
Dando un bufido y golpeando el suelo con el pie, Stiles exclamó nervioso:
-¡Deja ya de olerme!-
-Solo me preocupaba por ti- suspiró Derek al mismo tiempo que se frotaba los ojos -No creo que sea como para ponerse así-
-No tienes que preocuparte por mí- declaró Stiles.
El olor a miedo cambió por otro de...¿Pesar?
-Escucha, me visto y nos vamos- apuntó Derek levantándose de la cama y permitiendo al humano verle al natural.
Otra vez varió el aroma del chico, siendo ahora algo embriagante.
Estaba excitado.
-¿Tienes que exhibirte a todas horas?- increpó Stiles.
Mirándole por el rabillo del ojo, Derek vio que se había dado media vuelta y se cubría la mitad del rostro.
-Llevas viéndome desnudo un año entero- se burló el moreno.
-¿Y qué?-
-Que no entiendo el porqué de que ahora evites hacerlo- rezongó Derek.
-Ha sido... instintivo- escupió Stiles.
Sin volverse para mirarle, agarró la maleta y echó a andar hacia la puerta del loft.
-Stiles espera a que me vista...-
-Tú no- interrumpió Stiles llegando ante la puerta.
Derek se quedó en shock.
-Aaa y por cierto...¡¡Cómo me vuelvas a morder te meto un palo de serbal untado en acónito por tu peludo culo!!- amenazó el castaño antes de salir del loft.
-¿Qu-qué?- el henley se le cayó de las manos al oír lo que le dijo.
-¡Que me mordiste!- espetó Stiles.
Vale, no era que no se acordara de lo que pasó por la noche...
Pero lo de morderle creyó que lo había soñado.
-¿Có-cómo que te..mordí?-
-Naaaa, no te hagas el ignorante conmigo- desdeñó Stiles.
Cambiando de dirección, se le aproximó con pasos largos.
Plantandose delante del lobo, le dio la espalda, se agarró el cuello de la camisa y lo apartó.
Los ojos de Derek casi se salen de sus órbitas al ver la llamativa y preciosa marca de sus dientes en la nuca del joven.
¡Lo había reclamado!
Vale, ahora venía lo complicado.
¿Cómo se lo explicaba?
-¿Lo ves?- achacó Stiles.
Derek se aproximó un poco más a él y actuando por su instinto acarició aquella marca con la yema de sus dedos.
Stiles sintió una especie de escalofrío recorrerle de los pies a la cabeza al notar los dedos del moreno tocarle la zona mordida.
Rápidamente se apartó y se volvió para mirarle.
-¿Qué... qué ha sido eso?-
-¿El qué?- intentó hacerse el loco Derek.
Él también lo había sentido.
-Eso que he notado-
-Yo no he notado nada- mintió el moreno.
-Ok, vale, yo...yo me voy, ya tú verás si vienes o no-
-¡Pero qué dices!-
Derek se apresuró a seguirle hasta la puerta.
-Te he dicho que si te esperas nos vamos los dos-
-No, tú no- hizo ahínco en su negativa Stiles.
-No creo que pase nada si nos ven en el mismo coche- repuso Derek colocándose en jarras -Que yo sepa hemos estado ya antes en un mismo coche-
-Seeee y me comí el volante- desdeñó Stiles.
Derek se presionó entre los ojos.
-Lo siento, era demasiado...temperamental y... más joven y...-
-Siii y más gilipollas también- añadió el castaño.
Derek levantó la vista.
Si hubiera sido antes bien seguro que lo habría estampado contra la pared o la puerta para asustarle un pelín.
En el fondo, por aquel entonces, le gustaba ponerlo alterado pues de esa manera podía oler mejor su aroma...
Y tenerlo asustado hacía que se intensificara.
-Sí, también eso- dio la razón cruzándose de brazos.
-Menos mal que lo que reconoces- sonrió Stiles victorioso.
A punto de salir del loft, Derek se le interpuso delante
-Te digo que podemos irnos a la vez-
-No, tú... tú espera hasta mañana o...pasado y...yo estaré en el apartamento-
-¿Para qué te han enviado el mensaje, ocurre algo?-
-Sí-  Stiles vio cómo él lobo se puso en tensión -A ver, pasa algo pero no de lo que crees, sabes que no me van a sacar más en una operación gracias a...ya sabes-
Derek se tapó la boca para esconder una risa.
Sí.
Ya lo sabía.
Él mismo lo había llevado en brazos y a pesar de hacerle creer que le resultaba de lo más embarazoso, no quiso soltarlo.
-Siii tú te ríes pero yo recibí un disparo en el dedo gordo del pie...¡¡Y no veas cómo dolía!!-
Derek agachó el rostro llevándose la mano a los ojos.
Sus hombros se movían, seña de que se estaba riendo.
-¿Derek?-
-Jujummmju- le oyó hacer un ruido gutural.
Cómo si se estuviera aguantando unas terribles ganas de reír.
-¿Derek, te...te estás riendo de mí?- inquirió Stiles bastante molesto.
-No, no, no me...no me río- respondió el lobo alzando la mirada.
-Ujum- fue lo que dijo el castaño -Bueno, yo me voy, ya nos vemos, ale, adiós-
Sin darse cuenta, y actuando por inercia, Stiles zampó un fugaz beso en los labios del pelinegro, quien se quedó atónito.
Aún sin procesar lo que acababa de hacer, Stiles abandonó el loft y desapareció dentro del ascensor.
Derek se tocó los labios con la yema de sus dedos y una sonrisa boba asomó en ellos.
Luego regresó al interior del loft y cerró la puerta tras él.
Mientras bajaba, Stiles iba en su mundo...
Pensando...
Y pensando...
Y...
Desencajó los ojos.
-¡¡Oooo Dios!!- exclamó exasperado -¡¡Me he despedido de Derek...con un beso!!-
¡Cómo lo hace una pareja!
Avergonzado, se dio un manotazo en la frente.

EL REGALO DEL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora