Regalo «TaeKook»

O7| Regreso a casa

Los dos días habían pasado demasiado rápido para su gusto, ahora no quedaba nada más que despedirse de su familia y esperar a que sus vacaciones se den para viajar.

Toda la familia se encontraba comprando algo de comer en la tienda, aunque ya habían preparado algo de comer, pero por si las dudas.

—Ustedes dos, van a visitarnos o yo mismo juro que les arranco las orejas —tanto omega y alfa asintieron con una sonrisa, de hecho que.—

Una vez guardaron lo comprado, se dirigieron hacia el terminal para dejar las maletas dentro del bus, tal vez diez minutos demoraron pero habían dado aviso que en diez minutos más el bus partiría.

—Cuídense mis bebés —el momento sentimental había llegado. Hoseok si quería llorar, pues era la primera que se separaría de su familia así que abrazo a cada uno hasta el punto de casi asfixiarlos mientras sus lágrimas bajaban. Ahh, cuanto los extrañaría.
Mientras Jungkook, pues..él ya estaba acostumbrado, pero eso no evitaba que se sintiera triste, igualmente abrazo a cada uno, dejando al último a sus tíos— Vigila que tu primo no haga babosadas —río con los ojos llorosos, estaba sentimental ¿okey?— Cuídate, te estaré llamando.

—Me avisas cuando lleguen a casa, tía —una vez se despidieron, los demás integrantes de la familia se subieron al bus. Mientras Hoseok y Jungkook se despedían desde abajo viendo la ventana donde se encontraban su familia.—

—Te vas a acostumbrar, Hoseokie, no llores, ahora los extrañaras por ser tu primera vez. —abrazo con fuerza a su primo, quien terminó cargandolo con excesiva fuerza que se quejó— Ay  Seokkie, bajame, ¡Bajame, tonto! —enrollo las piernas en la cintura del menor, sin dejar sus quejidos obvio— Seokkie vas a quedarte chato.

—Más que tu no lo creo —gruñó escuchando la fuerte carcajada de parte del alfa— Quedate a dormir hoy, mañana te dejo en tu casa, por favor, Jungkookie. —asintió con los ojos cerrados recargando su cabeza en el pecho de su primo; y pensar que tiempo atrás era él que arrullaba a Hoseok. Como los tiempos cambian—

—Hobi, vamos que no quiero llegar tan de noche a la casa. 

—Ya voy, por cierto pasemos comprando fruta por el mercado. —asintió posando sus pies en el suelo cuando Hoseok lo bajo— Vamos que la tarde está por acabarse.

• • •

—Dios mio, iré a comprar el mango, como se nos pudo olvidar, Hoseok. —suspiro, habían pensado en preparar ensalada de frutas y compraron bastantes frutas para que saliera variado, pero se les olvidó el mango, sin eso no comían, era lo que más deseaban en ese momento— Por favor evita cortarte los dedos. Quiero con yogur no con sangre.

Salió de la casa luego de asegurar que tenía dinero, se dirigió a la tienda y como siempre había unas cuantas personas, así que formó fila.
Claramente se fijo si estaba Taehyung entre ellos, pero no, no estaba y eso le hizo hacer una mueca, ¿por qué no estaba?

Miro la hora en su celular, apenas eran las nueve...o tal vez ya era demasiado tarde...

Cerca de las once, Hoseok le dijo que ya se iría a dormir, ambos se retiraron a su habitación luego de un largo abrazo.
Había pasado una hora desde eso, siendo las doce con cinco, Jungkook se removió en su cama sin poder dormir, soltando un suspiro pateó las colchas y se levantó hacia la ventana del cuarto, sonrió y se acercó.

La luna estaba presente que quiso tomar una foto pero a final no lo hizo, solo se quedó admiradora, hasta que su mirada se poso en la casa del alfa de enfrente, tratando saliva cuando en el balcón se encontró con el mencionado, quien lo miraba fijamente como si planeaba su muerte.