Auch. Me dolía ver esa carita triste.

—No... me gustan las corbatas. —bajé la mirada algo apenado, sintiéndome un idiota por mi maldito malestar debido a aquellos recuerdos.

Lo había dicho antes ya, me jode no ser normal para ella. Es sólo un pedazo de tela, Jeon.

—¿Es porque quieres andar enseñando pechuga? —preguntó con una mueca triste jalando del cuello de mi camisa.

—Siempre... —traté de pensar una forma de decirlo sin que sonara tan mal y así n— detesté que las personas jalaran de ella.

Ladeó la cabeza y creo que mis esfuerzos por no verme demasiado nervioso o incómodo fueron en vano cuando preguntó:

—¿Qué personas?

—En la escuela me molestaban. —me encogí de hombros como si no fuese la gran cosa.

—¿Y quienes más? —mordí mi labio inferior negado a decirlo. Me sentía ridículo y hasta me daba la sensación de que podría comenzar a hartar a Cleo June con todo esto— ¿Tus padres? Sabes que puedes decírmelo, JungKook.

No podía ocultarselo, así que finalmente avergonzado y desviando la mirada a un costado, asentí.

—Solía llorar porque no sabía hacerla, —dije refiriéndome a la corbata— y eso hacía enojar mucho a mi padre.

No fue necesario dar detalles para que se imaginara lo que podía suceder cuando mi padre se enojaba, y creo que mi cara también lo decía todo, así que no me pidió continuar. Sentí su mano calida posar y acariciar una de mis mejillas, haciéndome así levantar la cabeza para mirarla.

—Lo lamento, Kookie. —dijo antes de rodear mi cuello con sus brazos pegándome totalmente a ella.

—Descuida, ya pasó. Sólo... Me trae malos recuerdos. —susurré.

—Te entiendo, cariño. Pero... hospitales, médicos, corbatas... No está bien que esos miedos permanezcan en ti, porque son una parte de tu pasado que no has soltado y te van a seguir lastimando. —deshizo el abrazo y al apartarse vi como sus ojitos me miraron tristes, realmente preocupados por mí— Quiero que estés bien. Déjame ayudarte con eso, de a poco, ¿sí? Yo no voy a hacerte daño. —sonrió— Si no te gusta, te la quitas ¿okey?

Ella tenía razón, y eso era lo que yo quería, superar de una vez todo lo de mi pasado para que ya no afecte mi presente y futuro, sobretodo el que quiero con ella. Esto lo haría, de a poco lo iba a intentar.

Okey... —repetí, no muy emocionado, pero con la certeza de que con ella nada me lastimaría, ni siquiera los malos recuerdos.

Su sonrisa se animó un poco más, lo que a mí me hizo sonreír también, y comenzó a abrochar esos últimos botones de mi camisa que siempre estaban abiertos. Aunque no quisiera, yo estaba dispuesto a esforzarme para ser... un poco más normal.

—Mira, es más fácil e inofensivo de lo que parece. —dijo colocando la corbata deshecha al rededor de mi cuello, y me miró— ¿Listo?

Asentí una vez más.

»El dinosaurio pasa por debajo del manantial. —dice cruzando ambas tiras de la corbata, ganándose así una mirada confundida de mi parte por tal incoherencia— Cruza el puente de las almas perdidas del inframundo. Recorre una pradera de flores. Corta camino por las islas de Hawaii. Se detiene a comprar un taco. —me mira unos segundos sin hacer nada como un pequeño descanso y provocandome una pequeña risa— Y finalmente pasa por el túnel místico del reino de las hadas. Y ya. —aplaudió contenta.

Absolutamente todo es mejor sólo si lo hace ella.

—No... entendí nada de esa explicación. —reí algo desconcertado por aquél... ¿recorrido?

bad boy ━━ [#1] jeon jungkookWo Geschichten leben. Entdecke jetzt