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-¿cuánto tiempo lleva perdida la niña?.
-este es el tercer día -respondió Glenn mientras me miraba dar vueltas y vueltas en el techo de la camioneta.
había pasado un día de la operación de Carl, yo había insistido en quedarme cuidándolo mientras ellos buscaban a la niña perdida, pero Maggie insistió en que saliera un poco afuera, no me quedo opción que ir.
Maggie me dijo que Otis había muerto cuando fue a buscar el respirador para Carl, y que Shane dijo qué se había sacrificado por él, yo honestamente por alguna razón sentía que no era así.
me di un susto cuando vi al tal Shane sin pelo, ahora resaltan más sus orejas de dumbo y su nariz de tucán.
creo que voy a tener pesadillas..
-Mapa topográfico -Maggie llegó con un mapa y lo desenrolló arriba del capó del auto, yo bajé mis pies al suelo y me posicione al lado el sheriff- muestra el terreno y las elevaciones.
-es perfecto, podemos organizarnos al fin, rastrillaremos todo el área divididos en equipos -habló el oficial.
-tu no -él me miró- diste casi tres unidades de sangre, no durarías ni cinco minutos con este calor sin desmayarte -finalizé, el hombre pareció pensarlo unos segundos.
-la niña tiene razón, Rick, diste mucha sangre, es mejor que te quedes en un lugar mientras los demás buscan, y tu -el anciano miró a Shane- si fuerzas tu tobillo estarás postrado un mes y eso no le conviene que nadie.
-iré solo -musitó Daryl- volveré al arrollo y comenzaré ahí.
-¿puedo ir? -pregunté dando brinquitos en mi lugar- en la casa me aburro, y ya me leí todos los libros.
el me miró unos segundos, estaba a punto de negar pero al verme hacer puchero y cara de tlacuache aplastado y terminó asintiendo.
no lo conocía mucho, pero me cae bien.
-yo aún puedo ser útil, conduciré hasta la estatal y veré si Sophia regresó.
me quedé mirándolo unos momentos
-que grandes orejas tienes -pensé en voz alta.
ay.. santo Merlincito
Shane me miró serio y se acercó a mi amenazantemente -¿que dijiste niña?
-¿para que tienes orejas grandes si no escuchas? -pregunté con un tono de burla, haciéndome para atrás.
-Shane, déjala es una niña -habló el sheriff poniéndose delante mío, este me miro unos segundos y volvió al tema en el que estaban.
