~•~•38•~•~

Start from the beginning
                                    

-Hola -. Saludó.

-Hola, Irene, ¿Cómo va la búsqueda? ¿Ya se encontró algo? -. Preguntó el guardia.

-No mucho, la verdad... estamos trabajando en ello -. Sinceró. -Por cierto, ¿Han visto al operario del jefe Choi?

-¿Hablas de Wooyoung?

-Sí, ese

-Hace rato fue a mi área para revisar las grabaciones que ya había checado el Presidente Park -. Aseguró. -De hecho, encontró algo importante, así que se llevó la USB con él, dijo que se lo tenía que mostrar al señor Park

-¿Estás seguro, Taeyang? -. La pelinegra lo miró con duda.

-Sí, ¿Por qué?

-Porque... no ha ido con nosotros...

Taeyang se sorprendió ante esa declaración.

-¿Qué? Pero... tiene una hora que se fue de mi área -. Confesó el mayor.

La chica desvió la mirada con preocupación. Si Wooyoung había salido del área de vigilancia hace una hora, y no había ido con Park, entonces... ¿En dónde estaba?

-Bien, gracias Taeyang, nos vemos Kihyun -. Se despidió y salió corriendo, tenía que encontrarlo, tal vez estaría en alguna otra área.

Al menos eso esperaba.

-¡Ren! -. Gritó al ver al rubio, quien de inmediato se giró con una sonrisa, una que se esfumó al ver la cara tan asustada que tenía su amiga.

-¿Por qué traes esa cara? ¿A caso viste un fantasma? -. Bromeó.

-¿Has visto a Wooyoung? -. Soltó, ignorando por completo las palabras del contrario.

-Amm, no, ¿Por...?

-Ayúdame a buscarlo, es urgente -. Suplicó, tomando al rubio del brazo.

-De acuerdo pero... ¿No crees que regresó a su casa? Digo, ya son las diez de la noche y... es tarde

Esas palabras hicieron que la chica se sintiera un poco más aliviada, aunque no del todo. Ren tenía razón, ya era de noche, y lo más probable era que el menor se haya ido a su casa a descansar.

-Cierto -. Sonrió nerviosa. -No lo había pensado, gracias -. Dijo ya con un poco más de calma.

Ren asintió y continúo guardando sus cosas, él también tenía que ir a casa a dormir.

La joven de cabello negro soltó un suspiro agotador, el sueño había comenzado a dominar le, pero no podía darse el lujo de descansar, pues debía continuar con el informe que Park le había pedido hace media hora. Una vez, de nuevo, en la oficina del mayor, pudo percatarse de que el semblante del pelinegro era confuso; una combinación entre miedo, angustia, temor y, sobretodo, enojo. El ceño del contrario estaba levemente fruncido, y con una mirada perdida.

-¿Presidente Park...?

-Irene... -. La miró. -¿Y Wooyoung?

-Ren me dijo que tal vez ya esté en su casa... ¿Por qué? ¿Sucede algo?

-Llama a su mamá, el contacto de ella lo tiene Song, pregúntale por Woo -. Mandó.

Park la vió irse y soltó el aire pesado que no sabía que estaba sosteniendo. Estaba nervioso y preocupado. Minutos antes le había llegado un correo para nada amigable; dicho correo contenía una imagen bastante borrosa, que a duras penas se podía apreciar a la persona que estaba fotografiada, la cual estaba atada a una silla de madera, si mal no veía. Un frío le recorrió cuando la silueta se le figuró al novio de su amigo.

Lo intenté // SanwooWhere stories live. Discover now