Diez Días

1.0 El Final

¡¡¡Hola!!! Les traigo una nueva historia después de andar medio desaparecida jajaja  Ya saben, los personajes no me pertenecen :3 Cada capítulo va a ser muy corto, ya está terminada también, solo necesito editar cada capítulo :3

¡¡Espero que les guste mucho y que le den mucho amor!! 

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Diez Días

— Sé que nos hemos conocido antes, pero me gustaría presentarme apropiadamente dadas nuestras nuevas circunstancias; soy Kuroo Tetsurō y voy a ser tu esposo.

El hombre que se sentó con la espalda recta y firme al otro lado de la mesa vestía, además de un traje agradable y formal, vestía una sonrisa bañada de la más fuerte y arrogante confianza en el rostro. Era muy desagradable, sin embargo sus ojos...tal vez debería haberlo visto en ese entonces.

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El sonido del reloj colgado en la pared se esparcía por una habitación amplia y alta, rompiendo el silencio que había caído sobre las cuatro personas reunidas en la mesa. Tic tac, tic tac, caía constantemente como un sonido perezoso, tan nítido, tan vivo en el espacio, una y otra vez, uno detrás de otro como si temiera decepcionar al mundo, como si tratara de responder al apagado y ocasional sonido de hojas agitándose bajo los delgados y blancos dedos del chico rubio que parecía terriblemente concentrado en el más mínimo detalle entre cada párrafo y línea.

— No puedo evitar notar...la propiedad de la que te hablé ayer, parece que no está.

Alzó la mirada y se recostó perezosamente sobre el asiento, los brazos cruzados y la barbilla alzada en lo más alto para enfrentar al hombre que jadeó y huyó de su mirada por un segundo — Te dejé tener la casa, todos los autos que dijiste que te gustaban van a ser tuyos, también te estás llevando dos de mis mejores centros vacacionales y ese parque temático tan genial, dijiste que ibas a estar aburrido después del divorcio y que querías entretenerte viendo la nieve, así que no me quejé y...estoy bien con que también tengas esa otra propiedad, comparado con todo lo que tienes ahora, un pequeño...

— A nuestro hijo le gusta mucho, Kuroo ¿No te acuerdas? — repentinamente la voz del rubio se volvió más suave y sus pestañas cayeron como si tratara de ocultar desesperadamente una mirada bañada en una amarga melancolía — Aquella vez hizo un castillo de arena muy alto, trabajó muy duro para armarlo y también quiso que su hermano se volviera el guardián, cavaron un foso juntos y trataron de llenarlo de agua y cangrejos, luego...

Luego las olas del mar lo derribaron, ya era bastante tarde y ellos estaban muy tristes, sin embargo se levantaron muy temprano al día siguiente para intentarlo otra vez. Muy felices y emocionados, tomándose de las manos y sonriendo. Los dos eran gemelos, pero en realidad nunca fueron muy apegados al otro y a veces preferían jugar por su cuenta. Eso los había unido inesperadamente más de lo que pensaba, no todos los días podían divertirse tanto así y ese se transformó en un buen recuerdo para ambos, uno que los haría muy felices y emocionados cada vez que iban para quedarse a esa agradable propiedad junto al mar.

— Eres muy malo conmigo — se quejó el moreno, sin embargo Tsukishima ya sabía que era su victoria — ¿No vas a detenerte hasta exprimirme todo lo que puedas?

— Los niños lo apreciarán — Tsukishima empujó en contrato de divorcio, esa mirada suave y tranquila ya no estaba más. Lo que necesitaba estaba hecho, sabía que siempre que pudiera tocar el corazón de ese padre amoroso y blando lo tendría, también sabía que lo consiguió, así que no tuvo ningún problema en insistir más con el asunto — Este año fue complicado, pero me gustaría llevarlos el próximo verano, te vas a encargar ¿Verdad?