Capítulo 4

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   El carnaval iba a ser en pocos días, en Brasil lo celebrarán a lo grande, grandes decoraciones, bailes magníficos, y música por todas partes, además de lentejuelas, plumas, y sonido de batucadas.

______ estaba emocionada, nunca había visto un carnaval, al menos, no uno de Brasil en vivo y en directo.

— Oye South, ¿irás al carnaval?.— Su torso estaba al descubierto, ninguna prenda la cubría, aún le dolían las caderas, y no sentía del todo sus piernas, pero, fue una gran noche. South abrazaba su cintura, hundiendo su rostro en el hueco del cuello ajeno, aspirando su fragancia, un aroma tan dulce, y embriagador.

— Vamos, responde tonto~.— Río la fémina, sonrojandose ante el tacto ajeno, ¿en que los convertía todo aquello?.

— Depende, ¿aceptas ser mi chica?.— Dijo el más alto, en un tono serio, mirándola a los ojos, pero manteniendo aquella sonrisa de siempre. Si no lo conociera en todo este tiempo, pensaría que no era en serio.

   ______ lo besó en respuesta, estar con South, se sentía bien todo el tiempo.

   Ya era mediodía, y ninguno de los dos quería salir de la cama. Pero ______ tenía hambre, así que hizo el intento de caminar.

  A lo cuál, a South le hizo demasiada gracia por como lo hacía.

— Cosita rosa, camina chueco JAJAJA, ay mi vida~.—

  _______ le lanzó una mirada de "odio" cubriéndose con la sábana mientras iba a la cocina por gomitas.

— Tarado, obvio que voy a estar "rosa" si me llenaste de nalgadas.— Sus padres la matarían si se enteraban de ello, pero, ¿y si nunca lo hacían?, no parecían dar indicios de estar buscándola siquiera.

  South llegó detrás de ella momentos después, y la rodeo de la cintura, llenándola de besos en la mejilla y cuello.

  Desde que le dió esos vasos, él ha estado más presente con ella.

 
  Ahora que eran pareja, podían sincerarse de todo. E irían al carnaval juntos, o ese era el plan.

  Comprar algodones de azúcar, bebidas, y compartirlos, comer palomitas bañadas en almíbar, y ver los fuegos artificiales a la par de los bailes. Era lo que _____ soñaba despierta todo el tiempo.

    A dos días del carnaval, _______ volvió a salir, pero, lamentablemente esa vez South tuvo un imprevisto con unos temas ilegales suyos por ahí, así que no pudo pasar tiempo con ella, pero, le dejó dinero para que se comprara cosas, y una nota con palabras bonitas, era un gesto muy apreciado por ella.

  Se sentía amada.

— Bien, veamos, tengo que comprarme algo que usar en el carnaval con South, algo...que lo deje boquiabierto jaja.— Habló para si misma ______, caminando por el pueblo, viendo las diferentes tiendas. Gracias a South, ya sabía guiarse mejor, pero aún así, seguía siendo una despistada.

  Tanto, que cuando se dió cuenta que sus padres estaban acercándose en su dirección con el coche, ya era tarde, no le dió tiempo ni siquiera de correr.

— ¡_______!, ¿estás bien?, ya vinimos por ti, tranquila mi princesa, todo estará bien.— Su madre la abrazó sin darle oportunidad de oponerse, sabía que su hija era odiosa a esos temas.

  _______ estaba que se moría, no quería volver, no sin South.

— Yo...ya no quiero volver con ustedes.— Soltó la menor, no correspondiendo el abrazo.

— ¿Así que, te atreves a desobedecer a tu madre?, cuando tengas 21, podrás hacer lo que quieras, hasta entonces, nos vamos ya mismo para la casa.— La amabilidad había acabado ahí, simplemente la tomó de la cintura, la alzó y la llevó dentro del auto. ______ protestó en todo el proceso, incluso llegó a gritar.

  A lo cuál, su madre, la mandó a callar, alegando que, parecía una loca histérica.

— No entiendo porqué quieres quedarte aquí, no perteneces a este lugar.— Mencionó su madre, viendo por la ventana mientras el auto se ponía en marcha, alejándose cada vez más, de la casa de South.

  ______ solo veía el picaporte de la puerta, poniendo su mano ahí, intentando tirarse del coche en movimiento, no le importaba, no abandonaría a South.

  Su madre, supo exactamente que intentaría hacer su problemática hija, así que, puso las trabas a la puerta.

— Sigue así, y te mandaré a terapia, ¿eso es lo que quieres?.—

— ¿Ser una loca?.— Completó su padre, mientras manejaba viéndola por el espejo retrovisor.

  Estar muerta, hubiese sido mejor para _______. En especial, cuando vió a South de pasada por la ventanilla, apenas lo vió, se apoyó contra el vidrio, golpeandolo para llamar su atención, él la vió.

  Pero no vió lo que ella quería que viera.

Solo vió, la traición.

  La canción Taboo de Don Omar sonaba en la radio en aquel momento. Complementando la escena de dos amantes, que fueron separados cruelmente.

  _______ siempre recordaría el dolor y la ira que pudo ver en los ojos de South en aquel entonces. Siempre le dolería.


  South siempre pensaría que lo traicionó. Y ella siempre pensaría, que él la odiaba sin haber podido oír su explicación.

Varada. (South x Fem! reader)Where stories live. Discover now