El héroe del pueblo se ha ido y se ha encontrado con un destino mejor que el que la chica de Ordon pudiese dar. Ella irá en su búsqueda, ¿encontrará lo que tanto ha anhelado?
Ambientada principalmente en las regiones de Twilight Princess.
Portada cr...
Mi cuerpo duele... Duele tanto que solo quiero dormir, quiero seguir durmiendo, pero...
Ese recuerdo hace que mi cabeza duela... Esos hombres, ¿Dónde están?
Mi corazón duele... Por favor no quiero morir...
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Hoy, los techos de madera filtran constantemente la lluvia común de la estación anual.
Una, dos, tres gotas que caen desde el techo hacen que el rostro de aquella chica reaccione, humedeciendo el mismo, provocando que ella despierte de un largo sueño que hasta ahora había llegado a su fin.
¿Qué es esto tan frío?
¿Dónde estoy?
Abro los ojos, lentamente porque duelen; otro goteo me cega por un momento, pero me acostumbro después de un rato y entonces lo primero con lo que me encuentro es con un lienzo confuso, nuboso.
¿Dónde estoy? ¿Qué es lo que está frente a mí?
Claro... Eso es el cielo, al parecer aún no para de llover.
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Las gotas siguen cayendo a mi rostro, algunos agujeros en el techo me dejan mirar un poco del oscuro cielo, no es solo la lluvia...
Es un cielo semidespejado, con algunos círculos brillantes en él...
¿Dónde estoy?
Intento cubrirme el rostro, pues la gotera comienza a ser molesta, elevo el brazo y...Y entonces al mirarme la mano izquierda, me doy cuenta de que lleva una venda envuelta completamente desde el antebrazo hasta la palma de mi mano.
¿Qué me ocurrió?
Me levanto estrepitosamente, quedando sentada sobre algo que parecía un catre, al parecer estoy cubierta con una manta café desde los pies hasta la cintura.
¿Qué es este lugar?
Toco mi cabeza con la misma mano que lleva una venda, y entonces me doy cuenta que una parte de la misma está envuelta también, pero eso es solo el inicio, pues al bajar un poco, justo debajo del cuenco de mi ojo, mi tacto logra sentir una irregularidad.
¿Era como lo pensaba?
No lo sé, pero mi mano logró tocar un apósito que abarcaba toda mi mejilla.
Levanto por fin la mirada, y miro detenidamente, es un lugar distinto sin duda...
Hay una pequeña ventana justo frente a mí, y desde ahí logro comprobar que realmente continúa la lluvia aún; incluso alcanzo a divisar árboles y un ambiente verde y fresco.
