2.

2 0 0
                                    

Cerré la puerta con delicadeza, dejando de lado cualquier pensamiento que me recordara que era mi mejor amigo.

Las palabras sobraban, solo existíamos él y yo.

—¿Quieres escuchar un poco de música?—soltó rompiendo el hielo, solo asentí con la cabeza

Se levantó de la gran cama haciendo un ruido mínimo. Colocó la primera canción en aleatorio. Bastante lenta para mi gusto y sus gustos, pero eso no importaba en lo absoluto. Todo encajaba.

Me senté en la orilla de la cama, Jungkook repitió el mismo movimiento. Nos encontrábamos en la misma habitación, unidos por la amistad, el placer y el ¿amor?

—¿Estás segura de que quieres hacerlo?—lo miré con detenimiento.

—Si. —respondí sincera.—O... ¿Quieres jugar play?

Me levanté lentamente quedando sentada sobre los muslos de Jungkook. Su mirada parecía desnudarme sin tocarme, sus manos continuaron lo que iniciaron minutos atrás. Recorriendo sus manos por mi espalda fundiéndonos en un beso apasionado dejando sonidos obscenos por toda la habitación. ¿Estábamos cometiendo un error realmente? Amo a Jungkook. Sin embargo, no sé en qué podrá terminar esto. Será mi perdición.

—No quiero jugar play Anne.— habló con voz ronca.—Levántate y date la vuelta.—obedecí siguiendo las indicaciones que me daba.

Esperé un momento cuando volví a sentir sus manos en mi espalda, delicadamente bajaba el cierre de mi vestido para después deslizarlo por mis hombros para deshacerse de aquella prenda. Quedé solo en ropa interior y pantimedias de red que llevaba con mi vestido. Me volteé hacia él quedando de frente, lleve mis manos a su camisa desbotonado poco a poco de ella, lentamente, hasta el último botón.

Retiré su camisa dejándola sobre el piso, me dirigí a su bragueta del pantalón dejándolo completamente en ropa interior, volví a la misma posición de antes quedando sobre sus muslos frente a él, unimos nuestros labios en un beso dejando caricias sobre nuestros cuerpos, caricias penetrantes, quizá eran los efectos del alcohol, todo se sentía más sensible en nuestros cuerpos. Nuestros besos continuaban hasta hacerse aún más apasionados. De un solo movimiento Jungkook tomó la pantimedias rompiéndolas completamente dejando libre mi ropa interior la cual fue quitada levantándome de nuevo con brusquedad quedando casi desnuda, me alejé un poco de él quedando a su vista perfectamente. Desabroche mi bralette, quitándomelo haciéndolo a un lado para quedar completamente desnuda.

—Eres muy hermosa.—dijo con deseo mirándome de arriba a abajo sin detenimiento.—Ven aquí.— golpeó sus muslos indicándome para acercarme.

Me dirigí quedando a la altura de sus muslos, quedó sorprendido ante mi acción. Bajé sus bóxer hasta sus pies despojándolo de ellos. Lo miré una vez a los ojos para tomar su miembro entre mis manos comenzando con un movimiento de arriba a abajo viendo en dirección de Jungkook quien me miraba mientras soltaba gemidos de satisfacción. Pasé mi lengua por todo su miembro para después llevarlo directamente a mi boca, succionando con delicadeza.

Tomó con suavidad mi cabello para aumentar los movimiento. Su rostro era de satisfacción.

De un movimiento brusco se levantó llevándome hacia la pared, comenzado a dejar besos mojados recorriendo todo mi cuerpo hasta detenerse sobre mi vientre, para llegar a mi parte íntima pasando su lengua llevándome a las nubes ante cualquier tacto o movimiento de él.

Subió directo a mi boca dejando un beso hambriento mientras me dirigía hacia la cama.

Lentamente puso un condón sobre su miembro en dirección de mi entrada para introducirse dentro de mi.

Era doloroso pero soportable para ser mi primera vez.

La noche se hacía larga y nuestros jadeos y gemidos resonaban por toda la habitación.

—¿Te gusta así?—decía entre jadeos.

Asentí rápidamente sin poder decir una palabra. Era bastante obvio por mi estado.

Sonrió para mi mientras acariciaba mi cabello. Tomó mi mano entrelazándola sobre la cama.

De un momento a otro el rostro de Jungkook derrochaba placer al tener aquel orgasmo al mismo tiempo que yo.

—Fue increíble.—habló en un susurro en mi oído. —Déjame quedarme aquí contigo.

—Esta bien, quédate.—respondí mientras acariciaba su cabello.

Nuestros cuerpos desnudos y solo las respiraciones tratando de tranquilizarse.

FUE INCREÍBLE.

Ahora... ¿Cómo voy a mirarte mañana Jeon Jungkook?

The Sound Of The Ocean Waves Where stories live. Discover now