Capítulo 49. Tu voz en mi cabeza

Start from the beginning
                                    

•••

Al día siguiente los cuatro amigos fueron a la playa, Dez y Austin corrieron al agua mientras Trish y Ally se echaban crema protectora la una a la otra.

—Ayer Chuck me mandó un ramo de flores— empezó a contar Trish, completamente enamorada —así sin motivo, solo porque me quiere.

—Que bien— comentó su amiga.

—Y ya solo queda un mes hasta que termine los exámenes de la uni y pueda volver a Miami.

—Que bien.

—Tengo tantas ganas de verle... he preparado un montón de planes, vamos a ir a un festival de arte y cultura latina, he conseguido una mesa en ese restaurante tan famoso que tiene meses de lista de espera, vamos a follar mucho...

—Que bien.

—¡Ally! ¡No me estás escuchando!

Trish había notado que su amiga no hacía más que mirar al horizonte mientras ella hablaba y estaba claro que no se estaba enterando de nada de lo que ella decía.

—Pues claro que te estoy escuchando— dijo Ally, pero al ver la mirada de su amiga tuvo que confesar —la verdad es que no, lo siento.

—¿Que te pasa?

—Nada, simplemente tengo la cabeza en otra parte... ¿vamos al agua?

Trish asintió y se levantó quitándose la arena que se le había pegado y ambas se acercaron hasta la orilla.

—¡Está helada!— chilló Ally cuando la primera ola bañó sus pies.

Tan solo era primeros de mayo y a pesar de que allí hacía calor casi todo el año la temperatura del océano sí que demostraba que aún quedaba mucho tiempo hasta que viniese el verano.

—Quizás si entramos poco a poco...— sugirió su amiga.

Las dos chicas empezaron a avanzar lentamente y cuando el agua ya les llegaba por la rodilla empezaron a acostumbrarse al frío.

—¡Cuidado que vienen olas!— gritó Dez tirándose a su lado.

Ambas gritaron al notar el agua fría bañándolas por completo y cuando consiguieron recuperarse del shock Trish lanzó al pelirrojo una mirada asesina y salió corriendo tras él vociferando.

—Se lo tiene merecido— rió Austin apareciendo por detrás de su novia sin previo aviso.

Ella dió un pequeño sobresalto y asintió con una mueca extraña en el rostro al ver a sus amigos pelear.

—¿Qué tal ayer con Andrew?

—¿Cómo?

Ally sintió como la piel se le ponía de gallina en un instante, ¿acaso Austin sabía lo que había pasado entre los dos?

—¿Pudisteis terminar el trabajo?

—Ah— suspiró ella aliviada —sí sí, era muy fácil.

—Me alegro, eso significa que hoy eres toda mía— dijo el rubio cogiendo a su novia entre sus brazos y arrastrándola hacia la parte más profunda mientras ella protestaba entre risas.

Estuvieron nadando para entrar en calor pero el agua estaba tan fría que Ally empezó a tiritar.

—Creo que me voy a salir— dijo con los dientes castañeteando.

—¡Pero si nos acabamos de meter!— se quejó su novio poniendo una mueca de disgusto.

—Austin estoy congelada.

When Future Becomes Past.Where stories live. Discover now