Capitulo 14

10.5K 859 159
                                    

Maratón: 2do y final.

-¿Porque la gente no coloca sus tiendas en el pueblo? Quizás podría ganar más-Le hablo queriendo saber un poco más de todo esto.

-Fácil, porque el gobernador del pueblo y el jefe de aquí hicieron un trato para mantener a la gente de aquí, distanciada con los de allá-Termina su cucurucho y se limpia las manos con la servilleta.

-¿Por que? A fin de cuentas todos somos seres humanos-.

-Porque no todos quieren estar en paz con los del pueblo, en el bosque no solo existimos nosotros, también están los tipos de cosas que te atacaron y más especias nada amigables con los humanos. Si algún día esas cosas llegaran a atacar a los humanos, por el contrato firmado hace muchos años, nosotros tendríamos que ayudarlos al igual que ellos a nosotros con cualquier cosa que nos haga falta-.

-¿Se dan cuenta que están arriesgando su vida a cambio de solo cosas materiales, no?-Hablo con las cejas arrugadas.

-Ellos no se pueden regenerar, nosotros si podemos hacerlo. Además de que somos capaces de controlar a todas esas bestias, no es mucho esfuerzo al matarlos, pueden ser muy peligrosos, si, pero matar a algunos resulta fácil-Se encoje de hombros mientras mira hacia el frente.

Caminamos al lado de los puestos mirando las cosas que venden hasta que uno en especial me llama la atención y me quedo ahí.

Miro el collar frente a mi, realmente hermoso, esta armado formado por una perla azul mientras su al rededor es de plata.

Es realmente hermosa.

Sonrío y sigo caminando guiando mi mirada a diferentes objetos de variados vendedores.

Cuando estoy a unos pasos más adelantes, entrando nuevamente al pequeño camino para llegar a su casa, me doy cuenta que Diego no esta a mi lado.

Antes de que me gire para comprobar si seguía detrás de mi, siento su presencia llegar. Con el toque de su mano sobre mi pelo, lo mueve a un costado, rozando mi cuello y hombro, su toque tan suave pero áspero a la vez genera escalofríos en mi ser. Guía sus manos detrás de mi antes de que aparezca una cadena con la parte de atrás de un colgante frente a mi y se acomode a la altura de mi clavícula.

Es el collar que vi antes. Pensé que no estaba prestando atención en ese momento.

Lo termina de acomodar dejando un suave beso en la parte trasera de mi cuello haciéndome cerrar los ojos. Sigue moviendo sus labios sobre el, pero empezando a ir hacia delante sin moverse de su lugar. Abre cada vez más la boca dejándome sentir suaves toques de su lengua enviando sensaciones directamente a mi clítoris. 

Bastante sensible eres, diría yo.

Llega hasta mi lado derecho sin dejar de besar mi cuello colocando sus manos sobre mi cintura y llevándome contra él haciendo que sienta a su amiguito bastante atento a la situación.

Mierda, se siente muy duro y grande.

Jadeo al sentirlo chocarlo contra mi trasero y empezando a moverlo. Aprieta más mi cintura con una mano y la otra empieza a subirla pasando delicadamente sobre mis pechos hasta llegar a mi garganta agarrándola. Sus dientes presionan suavemente una parte de ella haciendo que suelte un gemido echando mi cabeza hacia un costado pero él con su mano en mi cuello la deja quieta en su lugar con una presión no la suficiente para lastimarme pero si para calentarme.

-Quisiera sentir lo mojada que estas ahora mismo, angelito-Susurra en mi oído.

La mano que estaba sosteniendo mi cintura se coloca en mi abdomen cubierto por una tela aunque queriendo que la arranque para sentir más de su piel contra la mía.

-Lo suficiente para saber que empieza a mojar mi ropa interior-Siseo mientras cierro los ojos.

Siento como presiona más su erección contra mi sintiendo la necesidad de querer tocarla. Intento mover mis manos pero él reacciona-Manos quietas-Su agarre firme contra mi cuello hacen que me detenga sintiendo su sonrisa contra mi oreja-Buena niña-.

Mierda que deje de decirme así porque me le tiro encima.

-Necesito...-No me deja terminar cuando responde.

-Lo se, pero se que si tu mano llegara ahí no me podría controlar y te follaria contra un árbol dejando que todos escuchen tus encantadores gemidos-Paso su lengua sobre ese costado al cual no deja de prestar su atención.

-Ahora iras a la casa con toda esa humedad entre tus piernas y veras como reaccionaran-Deja un ultimo beso sobre mi mejilla.

Lo primero que captan mis ojos al abrirse es su erección bastante llamativa haciendo que no pueda parar de verla.

-¿Vienes?-Pregunta notando que no lo sigo, asiento con la cabeza mientras caminamos los pasos que quedan hasta llegar a la casa.

La humedad entre mis piernas no hace más que crecer al imaginarme a él tocándome o a alguno de los otros hermanos.

Él abre la puerta para mi con sus ojos más oscuros que de costumbre.

-Hola chicos, los estaba bus...-Catriel se queda parado en su lugar con su cuerpo tenso y sus ojos abiertos.

No me jodas ¿Ellos en serio pueden notar cuando estoy....así?

-¿Sucede algo, hermano?-Le pregunta Diego con una sonrisa pasando por su lado.

-No, nada, solo quería saber si querían que haga pasta-Sisea cerrando los ojos por un momento.

-Me encantaría-Le digo avanzando un paso pero él asiente rápidamente y se dirige a la cocina.

Mierda el color rojo llena mi rostro al darme cuenta que Diego tenia razón. 

No me doy cuenta que Marco también esta en la sala hasta que me fijo en los sillones a un costado de la chimenea. Él no deja de mirarme tan fijamente y prestándome toda su atención. Se levanta de su lugar y empieza a caminar en mi dirección haciendo que yo empiece a retroceder por lo fija que esta su mirada en mi.

Mi espalda choca contra la puerta haciendo que ya no tenga espacio a donde ir, no nos dejamos de ver empezando a ya sentir toda la tención en el aire formarse, se inclina un poco hasta estar mucho más cerca de mi rostro-Si no te corres, no podre salir-Susurra.

Miro sus labios viéndolos apetecibles a esta distancia y sintiendo su aliento mentolado llegar a mi boca y nariz.

Carraspeo y me muevo a un costado no queriendo hacer más larga la tensa conversación, agarra su saco y abre la puerta pero antes de salir por esta me mira de reojo.

-No juegues con fuego Akira, no conmigo-Susurra y antes de que la cierre completamente pongo mi zapatos para que no lo haga.

-Que lastima, me gustaría tanto quemarme-Lo miro una ultima vez antes de subir las escaleras yendo a darme una ducha. 

. . . . . .

Buenassss

Tardecito pero seguro.

Espero que les haya gustado este capitulo con bastante tensión.

¿Hasta ahora, quien les gusta más? ¿Catriel? ¿Diego? ¿Marco? ¿Akira? ¿Yo?

Acuérdense que son hermosuras desde nacimiento y con una corona con todos sus logros sobre su cabeza.

Los amo hermosurasssss <3

Chauuu


Ella y Ellos [+18]Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon