Ella y Ellos [+18]

CAPITULO 7

La mujer empieza a caminar por los pasillos de la casa dejándome ver los cuadros tan abstractos, colocados en las paredes de color gris con columnas pegadas a ésta de color negra.

Los pasillos son anchos con luces colgando del techo alumbrando algunos pero dejando algunas sombras con los objetos colocados en algunas mesitas de color blanco.

Nos detenemos frente a un cuadro donde aparecen dos bestias que las reconozco como iguales a las que antes me estaban siguiendo, una de color negra y otra blanca.

Tan diferentes pero al estar juntos combinan tan bien.

-Tan diferentes pero con un sentimiento en común, el amor. Ella era la reina de la luz, la que alumbraba las noches de las bestias. Él, él era la oscuridad escondido entre los arboles esperando a ver a su amada iluminada. Los dos esperando a verse y quererse. Pero esa noche fue diferente a las demás, esa noche los dos perdieron al amor de su vida-Termina de relatar quedando viendo al cuadro-Esa fue la historia detrás de esta imagen.

-Fue...hermosa, pero, ¿Qué tiene que ver conmigo y la situación que estoy viviendo?-Arrugo las cejas confundida.

Ella me mira con una ceja alzada como si me estuviera llamando "tonta" con la mirada.

-¿Las cosas que te estaban siguiendo en el bosque, eran iguales a las de aquí, no es cierto?-Cruza sus brazos sobre su pecho.

-¿Como...-Quedo aun más confundida al intentar descifrar como sabe eso.

-Ay sabes, tengo muy poca paciencia, una imagen vale más que mil palabras-Pasa al lado mio y se va nuevamente afuera.

La sigo rápidamente, hasta llegar a la salida y noto que los hombres estaban en una esquina hablando, pero cierran los ojos por un momento y nos ven, o específicamente, a mi.

Los ignoro y miro al rededor viendo como las bestias ya no están.

¿Dónde se fueron?

-¡Frederic!-Alza la voz y un muchacho de estatura baja, pero aun superándome, trota hacia nosotras y hace una leve reverencia hacia la mujer.

-Estoy a su disposición, Mi señora-Dice mirando pacientemente a su señora como el la llama.

-Conviértete-Le contesta ella.

Creo que no puedo estar más confundida en estos momentos.

Veo como los tres e incluido el padre de los muchachos llegan corriendo.

-Madre, no creo que sea buena idea-.

-Es la mejor forma, la humana nunca creería algo de eso sin verlo con sus propios ojos-.

¿Humana? ¿Y ella que es? ¿Un extraterrestre?

-Mariot, piensa bien las cosas, creo que no es la forma-Le habla su marido y lo noto al ver las sortijas que llevan en su dedo anular.

El chico mira del hombre a la mujer cada vez que hablan, como si sus ojos jugaran un tenis y el no supiera a quien obedecer.

-La humana no lo creerá si no lo ve-Insiste dándome una mirada rápida y yo levanto una ceja.

-Disculpe ¿Y usted que es? ¿Un zombie?-.

-No. Soy una mujer lobo-Los cuatro hombres se tensa y me ven como si estuvieran atentos a mi reacción.

Suelto una carcajada-Si, claro y yo soy la reina Isabell con mi harem acá atrás-Señalo a los hombres atrás mío.

Veo de reojo como el callado abre la boca para decir uno de sus comentarios y antes de que lo haga, hablo nuevamente -No quiero escuchar ningún comentario, de ningún tema relacionado a lo que dije- La esquina de sus labios hacen una leve inclinación hacia arriba pero se borra rápidamente.

Aunque lo conozca desde hace solo minutos, ya se por donde va su personalidad.

-¿Ves? Es mejor que lo vea por sus propios ojos-Le habla a su esposo para ahora mirar al chico-Conviértete-Y esa vez lo remarca con el tono que usan las mamas latinas y que da miedo.

El tipo asiente rápidamente y luego su cuerpo se empieza a mover de forma extraña.
Es como si sus huesos se movieran dentro de él aun con su piel reteniéndolos.

¿Qué....

mierda?

En un pestañeo veo a la bestia a la que vi al llegar a este sitio. Su pelaje de un color marrón me hace darme cuenta que no es como los que me perseguían.

Siento como mi cuerpo esta rígido, sin animarme a mover un solo musculo. Mis ojos abiertos al igual que mi boca sin poder pronunciar mísera palabra.

La bestia de cuatro patas antes humano o.....¿Hombre lobo?. Me mira con sus ojos marrones, observando atentamente cada uno de mis movimientos.

Mi pecho se eleva y baja con respiraciones aceleradas, mientras no puedo sacar de mi mente como paso de ser un humano a esto.

-¿Que?...¿Cómo?-Son las primeras palabras que salen de mi boca, aun con la impresión en mi.

-¡Oh genial! La traumaste-Habla irónicamente el esposo a su mujer.

Ella hace un sonido de molestia y me mira-Tranquilízate, él no te hará nada-Habla con su tono molesto-Si así lo quiero-.Retrocedo un paso al instante mientras ella se va del lugar hacia la fogata.

-¡Mariot! ¿Puedes parar? Ya suficiente tiene la niña-Escucho como sus dientes rechinan al decirlo mientras se alejan.

-Frederic, ya te puedes ir-No puedo dejar de observar al hombre lobo hacer una inclinación con la cabeza e irse.

-Llevémosla a una habitación para que descanse-

Mis piernas empiezan a perder fuerza haciendo que me tambaleé y casi caiga de no ser por unos brazos me sostiene contra un pecho desnudo. Empiezo a temblar y tener mucho frio. 

-Esta muy caliente, tiene fiebre-Siento manos tocar mi cara pero aun sin identificarlas me siento segura al rededor de ellas.

Unos brazos me agarran por debajo de las rodillas y espalda, colocando mi cabeza sobre su pecho, sin parar de temblar.

-¡Iré por una enfermera!-Siento muchas voces a mi al rededor mientras me apoyan sobre algo suave y cómodo. Agua cae sobre mi cuerpo haciéndome mover impaciente hasta caer en la inconciencia sin ser consiente de lo que me rodea.

 Pronto te convertirás en eso a lo que tanto temes perra....

°°°°
Hola hermosuras!!!

¿Como estan? Yo llena de tareas y pruebas.

Pregunta del día:
¿De donde son?

Acuerdense de tomar awita y no ponerse mucho debajo del sol porque si no se pueden derretir bombones.

Gracias por leer, comentar y votar mi historia, en serio eso me ayuda mucho.

LOS AMOOO

CHAUUUUUUU