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3 años. Pasaron 3 años desde que Frank puso un pie en Hell's Kitchen de nuevo. Frank estaba feliz en Queens con su pequeño cachorro, el cual se la pasaba jugando con legos de Star Wars. A pesar de que Peter tenía 3 años era un pequeño listillo, y eso sin dudas lo había sacado de una sola persona.

"¡Papi! ¡Max se quiere comer mis legos de Star Wars!" Frank suspiro, era la sexta vez que Max quería hacer algo así y no importaba cuánto tratara de hacerle saber a Max que no se comiera los legos, el simplemente lo seguía haciendo.

"Max, deja de molestar a Peter. No te daré carne si lo sigues haciendo" Max soltó un chillido de tristeza y se alejo de las piezas de lego. Peter comenzó a sentir lástima por el chillido que acercó su mano hacía Max y acaricio la cabeza del perro.

"Max no estés triste, no quise hacer que papi dijera eso. Te daré carné luego" Peter prácticamente estaba consolando a Max. Max lamio la mano de Peter, era una forma de hacerle saber que estaba aceptando sus disculpas. Es una escena hermosa y adorable pero Frank la tenía que romper o sino llegarían tarde al establecimiento infantil que había conseguido por el horario de su trabajo.

"Peter, tienes que terminar de vestirte o llegarás tarde a clases"

"¡Ah, cierto!" Peter rápidamente salió disparando hacía su cuarto y comenzó a vestirse por si solo. Unos 10 minutos después, Peter estaba todo arreglado "¡Estoy listo, papi!" Frank sonrió ante el entusiasmo de su bebé y beso la cabeza de este con cariño, Peter soltó unas risas por la muestra de afecto. "Ya basta papi, se nos hace tarde para ir a clases"

"Si, si. Vamos entonces" Con una sonrisa agarró la mano de Peter y ambos comenzaron a salir del departamento, las calles de Queens eran pacíficas en el día en las noches no tanto. No es que fueran tan peligrosas como Hell's Kitchen, pero eran algo. Frank había hecho una nota mental para eso, no querría correr el riesgo de que algo le pasará a Peter así que evitaba viajar tan tarde por las noches.

"Papi ya llegamos" ante eso Frank volvió en si y miro a Peter, luego miro el establecimiento de infantes, y si, ya habían llegado.

"Si, puedo ver eso. Bueno Peter, vendré a recogerte en cuanto termine la hora escolar así que no te vayas con extraños, ¿Si?" Peter asintio con la cabeza, sus ojos llenos de determinación realmente le hacían recordar a esa persona "Papá te ama chorro" beso suave la mejilla de Peter.

"Peter también te ama papi" el pequeño beso suave la mejilla de su papá y le dio una suave sonrisa. Frank se quedó en la entrada saludando hasta que Peter entro al establecimiento, una vez que su cachorro ya no estuvo a la vista se dio la vuelta para ir a si trabajo de medio tiempo.

"¡Zack!" la voz llena de entusiasmos se hizo presente en el establecimiento "¡Es bueno verte!" la persona prácticamente se había lanzado hacía Frank y estaba presionando su mejilla contra la del Omega.

"Es bueno también verte, Sara" Frank sonrió para corresponder el abrazo de su amiga alfa. "¿Cómo estuvieron tus vacaciones?"

"Fueron relajantes, ¿Sabías qué en el hotel al qué fuimos pudes nadar con delfines?"

"Vaya, eso se escucha emocionante" Sara hizo un ante el sarcasmo de Frank pero no dijo nada, solo sonrió suavemente y se dispuso a trabajar. Pasaron las horas y el sonido de la puerta del local abriendose fuertemente se hizo presente. Frank estaba apunto de decir algo cuando el aroma conocido lo atravesó sin dudar, ese aroma tan conocido.

"¿Franco?" es ahí cuando Frank se queda helado sin saber que decir, solo puede mirar a la persona que lo llamaba. Aquel rostro, aquella anteojos rojos, aquel cabello rojizo, aquel bastón. Era Matt Murdock en persona y estaba sintiendo a Frank como un fantasma.

"Red" fue un susurro suave, pero lo suficientemente audible para Matt. Murdock comenzó a acercarse lentamente hasta que estuvo frente a frente contra Frank.

"Ha pasado un tiempo desde que... Hemos sabido de ti" la voz normalmente rígida de Matt había cambiado a una triste y algo amarga, Frank realmente no sabía el porqué de ello.

"Si... Uh, ¿Quieres algo para tomar o algo?" Pregunto con su toque de empleado. Matt se quedó quieto por unos segundos para luego asentir con la cabeza.

"Si, si. Una tasa de café estaría bien" Frank soltó un gruñido de afirmación y se dio la vuelta para dejar la orden, mientras mas rápido hagan lo que Matt había pedido más rápido este se iría. Tenía que irse antes de que tuviera que ir a buscar a Peter. Cuando el pedido estuvo listo, llevo la tasa y se la dio a Matt "Gracias..."

"De nada..." fue muy incómodo, el siemple hecho de que Matt le agradeciera por algo era incómodo. Lo era más gracias a qué este soltaba su aroma, como si quisiera que dicho aroma estuviera en su ropa y en su persona. Marcandolo.

Unas horas más tardes su turno había terminado y se dispuso a despedirse de todos ahí, le dio una última mirada a Matt para luego salir de la cafetería. Mientras caminaba por las calles podía sentir aquella mirada tan conocida clavada en su nuca. Realmente quería decirle a Matt que lo dejara de seguir, pero el estaba seguro de que lo tratarían como loco si le hablaba a la nada.

Unas calles más y llego al establecimiento donde Peter se encontraba. Entre la multitud de personas recogiendo a sus niños, había un pequeño niño sentado en el banco mirando a todos lados. Frank sonrió un poco, su pequeño retoño lo estaba buscando.

"¡Peter!" el llamado hizo que el niño levantará la cabeza y mirara a su papá, con una sonrisa se levantó del lugar en el que estaba sentado y corrió hacía Frank.

"¡Papi!" Peter sonrió mientras Frank lo levantaba, el niño estaba feliz de ver a su papá. Aunque realmente en ese momento el quería oler el aroma de su papá, pero estaba seguro de que tendría que esperar hasta que llegarán al departamento. "Papi, papi te extrañe" dijo con voz suave y llena de anheló, Frank acaricio la espalda de su cachorro y frotó su cabeza contra la del niño.

"Yo también chorro, yo también. Pero sabes algo" Peter hizo un sonido interrogante "Papi tiene una sorpresa para ti" Ante eso los ojos del cachorro se abrieron con felicidad y antes de que estuviera apunto de decir algo Frank lo cayó con una sonrisa. "No puedo decirte que es, ya que no sería una sorpresa" Peter hizo un puchero ante eso, pero luego sonrió suavemente.

"Bien, pero papi tiene que dármelo cuando lleguemos a casa"

"Es un trato entonces" Y con eso ambos sonrieron. Por ese momento Frank se había olvidado del justiciero-abogado-alfa-ciego que lo estaba acechando hace unos momento atrás. Se había olvidado que dicho alfa podía escuchar todo lo que estaba diciendo desde miles de cuadras, pero bueno, que se le puede hacer. Estaba más concentrado en Peter que en el alfa del que estaba enamorado.

Matt por otra parte estaba todo sorpredido. Cuando llego a Queens junto con Foggy y Karen lo primero que escuchó fue aquel sonido de corazón particularmente conocido. Corrió sin darles explicaciones algunas a sus compañeros y solo se concentro en encontrar a la persona de corazón latente. Cuando la encontró supo 100% que era Frank, pero había algo raro en el. Su cuerpo parecía hacer pasado por una fase y su aroma estaba mezclado con el de una alfa y muy, muy abajo de eso estaba el dulce aroma a leche. A cachorro. Frank podría tener un cachorro. Rápidamente negó ante esa posiblidad, no era posible, tal vez estaba sacando las cosas de contexto. Eso quería creer el.

Todo se fue al caño cuando siguió a Frank y este busco a un cachorro no más de 3 años en el lugar que parecía un establecimiento infantil. Al menos eso era lo que podía sentir con su olfato. Es ahí cuando la loca idea de antes realmente no era tan loca. Frank tenía un cachorro y... De seguro estaba emparejado con un alfa. Eso había hecho que su alfa estuviera enojado con el por no hacerlo mordido aquel día.

Si, Matt recordaba aquel día como si fuera ayer. El tener su cuerpo presionado y anudando el de Frank fue un momento único para el. El llenarlo con sus cachorros...Espera, ¿Llenarlo con su cachorro? ¿Cuántos años tenía de nuevo el niño? En la mente de Matt las matemáticas comenzaron a trabajar, si sus matemática eran las correctas tal vez el era el padre del cachorro de Frank. Tenía que buscar ayuda rápidamente con eso y sabía exactamente a quien ir.

Positivo, ¡Mierda!Where stories live. Discover now