Muérdago

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—Lou, no vas a creer lo que me pasó.— dijo entrando con una gran sonrisa y pegándole un casto y sonoro beso en sus labios.

Antes de que el castaño le diera respuesta, fue a darle un abrazo a Zayn y a Liam —que también ya conocía— y obviamente le dio muchos besitos en ambas mejillas a su pequeño.

Louis había ido a la cocina, había terminado de poner los dulces en cada recipiente. Tenía una gran sonrisa dibujada en sus labios por ver así de feliz a Harry. El ojiverde fue con él, robó un chocolate de un recipiente.

—Cuéntame lo que no me voy a creer, amor.— sonrió.

Harry tomó aire y cerró sus ojos. Louis notó un poco de la paz que reflejaba. Y así empezó a contarle cómo habló con su mamá desde que llegó a su casa, hasta que se tuvo que ir. No paraba de sonreír y expresarse con las manos, como Louis ya sabía que lo hacía si algo lo tenía tan bien.

Louis le prestaba toda la atención del mundo, su felicidad se la transmitió, era hermoso saber que su madre lo seguía queriendo y ahora lo apoyaba, aunque no negaría que se sentía un poco mal por ella y la situación con su esposo.

—Tú puedes ayudarla para entrar en razón, amor.

—Quiero hacerlo, de verdad. Me duele saber que hay muchas cosas que no hace por culpa de mi papá.— hizo una sonrisa de lado que más pareció una mueca.

Louis puso su mano encima de la espalda de Harry y le dio suaves movimientos circulares.

Louis, Harry, Thommy, Liam y Zayn decidieron hacer un concurso de casitas de jengibre para ver quien podía hacer la casa más linda en tres horas, o al menos la más completa

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Louis, Harry, Thommy, Liam y Zayn decidieron hacer un concurso de casitas de jengibre para ver quien podía hacer la casa más linda en tres horas, o al menos la más completa. Hicieron dos equipos; el de Zayn y Liam y el de Louis, Harry y Thommy.

Ahí se encontraban los cinco, en el centro de la sala de estar frente a la mesita de centro, sentados en el piso con sus piernas cruzadas, Thommy sobre el regazo de Louis.

Las casitas ya estaban fuera de sus cajas, al igual que todos los dulces y los diferentes tipos de betún y icing que servían como pegamento para las decoraciones.

—Son las dos de la tarde, a las cinco se acabará el tiempo y ya no podemos hacer nada, ¿entendido?— Liam y Zayn asintieron. Harry le susurró algo al oído de Thommy, algo que lo hizo reír y llevar su manita a sus labios. —Y nada de trampas, solecito.— agachó un poco su cabeza para ver los lindos ojitos azules de Thommas, el menor hizo un puchero mostrando su labio inferior.

Iban a iniciar cuando en la puerta se hicieron presentes otros golpes. Louis se puso de pie, corriendo a abrirla. Todos los presentes a excepción de Louis miraban con el ceño fruncido a la entrada del departamento. Todo se relajó cuando al abrirla vieron a un castaño cruzar la puerta.

—Niall.— Harry lo dijo en un tono más alto para saludarlo. El castaño le regresó el saludo.

—Olvidé decirles que invité también a Niall a pasar el rato.— dijo Louis tras cerrar la puerta. —Haremos competencia de decoración de casas de jengibre, harás equipo con Zayn y Liam para que estemos a la par de tres y tres.— la emoción ya estaba en su voz y en la forma de darle las instrucciones a Niall.

Sweet Little Creatures [L.S] (Trilogía SLC I) [M.Preg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora