Koi no Yokan (Sano Manjiro x Tú) [Pausa]

Fascinación.

Shirakiin Mikami, 20XX

― ¡Mikami-chan! – Lo escuche gritar. Me di la vuelta y lo primero que vi fue sus ojos. Nuestras miradas se encontraron en un solo instante – Te estaba esperando – Dijo mientras me otorgaba una sonrisa. Comencé a avanzar hacia él.
― Así que si era aquí – Me detuve frente a la puerta. En la entrada había tres personas más.
― ¡Disculpa a mi hermano! – Hablo una chica – Es un idiota que no puede hablar con las mujeres.
― Con que fue por eso el azote de la puerta en mi cara – Me burle. Un chico de cabello largo y azul, con una cicatriz que le atravesaba el abio solo me miro en silencio.

― De verdad lamentamos eso – Se disculpó un chico con cabello largo y platinado. Y con unas llamativas cejas – Bienvenida...
― Me llamo Shirakiin Mikami – Me presente.
― El es Mitsuya Takashi – Entro Sano – Amigo de la infancia. Puedes llamarlo Mitsuya.
― Tal vez el debería decidir cómo quiere ser llamado – Le recalque al chico rubio.
― Puedes llamarme como gustes, Shirakiin-san – Parecía incomodo ante la situación.
― Disculpa eso, Mitsuya-san. Procurare de no tratar mal a Sano-san en tu presencia.
― Mikami-chan, eso deberías decírmelo a mí – Reclamo Mikey en su forma infantil.
― ¿De verdad eres esa Mikami? – Cuestiono la chica - ¿La que golpeo a Mikey?
― Veo que Sano-san ya ha hablado de mi – Lo mire de reojo.
― Yo no había dicho nada – Respondió despreocupado.
― De verdad no pareces ese tipo de chica, te vez tan elegante.
― Ya déjala, Yuzuha – Pidió el chico platinado.
― Gracias por eso, Yuzuha-san, pero debo decir la verdad. Si, golpee a ese tipo.
― ¡Mikami-chan! ¡Llegaste! – Se acercó mi amiga.
― Hinata-chan – Corrí a tomarla de las manos – Disculpa, apenas me desocupe.
― Descuida, sabía que lo lograrías.
― No estoy entendiendo – Se unió Sano-san - ¿Tenias pendientes Mikami-chan?
― Desde que supo la fecha de la fiesta se esforzó por terminar sus pendientes y poder asistir.
― ¡H-hinata-chan!
― Vaya, vaya – La mirada de Yuzuha estaba sobre mí – Primero golpea a Mikey y ahora termina sus pendientes para venir a verlo – Estaba burlándose.
― ¡Y-yuzuha-san! Te aseguro que hay una explicación y no tiene que ver con Sano-san – Gire a ver al chico. Estaba disfrutando de la situación – Sera mejor que no te hagas ideas – le advertí al chico que seguía sonriendo.
― ¡Claro! Yo no escuche nada.