Nunca te olvide. - YinWar [Libro 2]

Capítulo extra

Tiempo después...

Ha pasado de nuevo, prometí no hacerlo pero paso, se ha ido nuevamente y ya no se que hacer, ver sus ojitos llenos de decepción y tristeza me ha destrozado el corazón, juro que no lo hice a propósito. El doctor me ha diagnóstico un trastorno explosivo intermitente, no se muy bien que significa, mi mente no dejaba de pensar en ese día, le hice más daño que aquella vez.

He perdido contacto con él desde ese día, agarró sus maletas y se fue, estoy llorando por su partida mirando con tristeza aquel hermoso anillo que le entregué con mucho amor, aún se encontraba en la mesa desde ese día que se marchó. Aún queda algunas de sus cosas en la habitación, su perfume se puede oler por la casa, su poco ropa sigue en el lugar donde las dejo.

Me he quedado solo, mi padre ha muerto, mi madre no está conmigo, el amor de mi vida se fue para siempre y mis amigos se alejaron de mi. Les he echo demasiado daño pero no sé cómo pasa, estábamos bien platicando y lo único que recuerdo es ver a Prom en el suelo con el labio sangrando, mi vista era borrosa y mi cabeza daba vueltas, los gritos de War y Benz se escuchaban a lo lejos, la irá se apoderaba de mi y lo peor es que no recordaba el motivo por el que estaba así.

Me he disculpado pero nuestra amistad no volvió hacer lo mismo, el tiempo paso, cuando pensé que las cosas con War estaban perfectas y que todo marchaba bien pero por las noches no podía evitar aquellas miradas de incomodidad por parte de War, sabía que no podía olvidar el pasado, lo noté desde antes de pedirle que se casará conmigo, se que me ama pero no me ha perdonado.

—¿Cómo te has sentido? — pregunto el doctor.

Todos los miércoles vengo con el doctor para una revisión, apesar de ya me dio el diagnóstico no está seguro por eso vengo una vez a la semana.

—Bien — respondí cortantemente.

Cómo siempre el doctor hizo sus revisiones.

—¿Quieres contarme como lo lastimaste? — pregunto nuevamente el doctor.

Lo mire rápidamente con confusión. Era la primera vez que lo pensaba, sabía que le había hecho daño pero no recuerdo cómo fue, solo podía recordar su cara de miedo, de terror como si lo que  estuviera viendo fuera de otro mundo. Sus ojos llenos de lágrimas y aquellas palabras que se repiten a diario "prometiste no hacerlo de nuevo" mientras se quitaba el anillo y lo ponía en la mesa, llevándose sus maletas para nunca volver.

—Bien, no es necesario que me cuentes — el doctor dijo. — Al parecer tu enfermedad ha avanzado mucho al grado de tu mente bloquea aquellos episodio de irá y recuerdes solo unas partes, ¿Te ha paso algo así? — me observo detalladamente.

Asentí.

—Es hora de que vayas con un especialista — anoto datos en una libreta y me lo dio.

¿Bloquear? ¿Algo así como le pasó a War? Tenía razón aquello que mencionaba, no puedo recordar cómo pasaron las cosas con Prom ni con War. Salí distraído del hospital, ignore por completo los gritos del doctor. Mis lágrimas se hicieron presentes, recordar aquellas palabras del amor de mi vida me destruían, el tráfico estaba al tope, se escuchaba a la gente gritar, los claxons de los carros resonaban por toda la ciudad.

Entre el medio de la culpa y mi tristeza logré llegar a casa, al entrar mi nariz absorbió el poco perfume de War que quedaba, me fui a recostar, aún seguían las cosas en el mismo lugar que solían estar, agarré una de las pijamas favoritas de War y me la puse, apesar de tener tiempo guardada aún conservaba su olor. Me acosté en la cama donde dormíamos los dos, se sentía tan sola, fría, me veía pequeño en esta habitación. Los recuerdos de ese día volvieron, War llamaba a Dylan en la cocina murmuraba algo que no alcazaba a escuchar, recuerdo que tire su teléfono al piso, la exaltación de War y su cara de preocupación, empecé a llorar con más fuerza y sin darme cuenta me quedé dormido.

—Yin — la voz de alguien sonaba a lo lejos. — Guapo despierta — aquella voz se me hacía familiar. — Llegarás tarde a la reunión con Prom — la voz de War se hizo presente.

¿Había regresado? ¡Volvió! Esta aquí, con gran emoción y felicidad me desperté, mis vista aún era borrosa, trataba de enfocar a la persona que me estaba hablando, después de unos segundos mi vista se aclaró y en la habitación no había nadie ¿Todo fue un sueño? De inmediato me sentí extrañado y nostálgico, pensé que había vuelto pero no es así. La pijama estaba mojada de sudor, mi cuerpo se sentía caliente y mi cabeza dolía demasiado. Aquella voz solo había sido producto de mi imaginación.

Él no va a regresar nunca, no después de lo que le hice...