T2 Cap. 4 (lemon)

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"Un enfrentamiento... complicado."

Pov's (T/n)

Las clases habían terminado por hoy, el día estaba tranquilo, un día nublado.

Adoro los días así, con viento y un poco de frío,

- ¿quieres un poco más de pan? - cuestionó Amajiki y yo sólo asenti con la cabeza.

Por esto amo estos días, el poder estar con mi novio recostados en la cama, tomando chocolate caliente y pan dulce, me dio un pan y con las mejillas sonrojadas entro a la cama y se cubrió con las sábanas, lo abrace y vimos una pelicula.

- ¿qué quieres hacer ahora? - Me pregunto mi novio.

- No lo se -- sonrei un poco.

Le di un pequeño beso en sus labios, el me miro sonrojado y me beso de nuevo, esta vez lo tome de la nuca atrayendolo a mi, el se posiciono sobre mi con cuidado y despacio, casi esperando que le diera algun tipo de señal de que se quitara o me molestara, pero solo me acomode debajo de el y segui besandolo, con una mano tomo una de mis mejillas y la bajo lentamente a mi cuello y despues a mi clavicula, la acaricio de manera suave mirandome a los ojos, sentia cosquillas y una sensacion tan extraña pero se sentia bien, me beso nuevamente mientras acariciaba mis hombros por encima de mi blusa, aun por encima de la ropa su tacto se sentia tan bien, dejo de besarme y me miro a los ojos mientras bajaba lentamente su mano a mi pecho, esperando nuevamente alguna señal, solo lo bese y eso basto para que siguiera tocandome, paso su mano por debajo de mu blusa hasta llegar a mi brazier metiendo su mano debajo de este comenzando a tocar mis pequeños pechos.

El se separó de mi para quitar mi blusa, cada acción que hacía parecía que me pedía permiso.

- tu... ¿q-quieres esto (t/n)? - sabía bien a qué se refería y sabía también que se reprimía mucho por cosas que me pasaron.

Lo bese y puse la mano que tenía libre sobre mis caderas, él las acaricio de manera lenta y suave, me removí en mi lugar en busca de más contacto, en específico en mi entrepierna, el no tardó mucho en darse cuenta y, con las mejillas sonrojadas, tocó esa parte de mi haciendo que diera un fuerte suspiro al sentir como movía su mano sobre mi clítoris, se sentía tan bien.

Me besó, de manera lenta y profunda pasando su mano restante por mi cintura, acaricie su cabello y comenzó a dar besos en mi cuello y luego en mi pecho, hasta bajar a mis senos, eso y que me estuviera masturbando me hacía sentir ansiosa, paro de mover su mano y antes de poder reprocharle, me quito los pantalones, y depósito besos por mi abdomen, luego mi ombligo. Parecía que se sentía más confiado y esa parte de el que no había dejado ver me está gustando bastante.

Un suspiro se escapó de mis labios y se me erizó la piel por completo cuando sentí su respiración sobre mi ropa interior y entre mis piernas, con sus dientes jalo mi calzon y termino deslizandolo con sus manos hasta mis pies, depósito un par de besos en mis labios, cerca de mi clítoris haciendo que me desesperara y me exitara

¿Quien es este hombre y dónde dejo a mi novio?

Mi mente regreso a dónde estaba cuando sintí la lengua húmeda de mi amado en mi clitoris, ese tacto se sentía como estar en las nubes, no tenía ni idea de lo bien que se sentía, era maravilloso, cada lamida, cada succión, si no podía estar más en éxtasis, introdujo sus dedos en mi vagina simulando embestidas, cuando crees que nada puede superar como te sientes, te demuestran que si.

Era inevitable soltar gemidos, estoy avergonzada de mis propios sonidos pero no callaré mi voz, algo tan extraordinario cómo estas sensaciones debo expresarlas.

Tamaki... Dónde rayos aprendiste a hacer sexo oral tan bien...

Acaricié su cabello con una de mis manos y la otra entrelazaba mis dedos con su mano restante, me sentía en el cielo...

Sentí mi vientre caliente, mi espalda se arqueo, mi vista se nublo y una demasiado agradable sensación de cosquilleo desde mi entrepierna a todo mi cuerpo apareció, sentí mi respiración agitada y como unas cuantas lagrimas salieron de mis ojos, un gemido que jamás abría escuchado salir de mis labios  apareció, era un mar de sensaciones...

— ¿Estuvo bien? ¿Te gustó?

Tamaki se apresuró a preguntar una vez que comencé a respirar normal.

—claro que si.

Respondí con una gran sonrisa y algo cansada, el me beso y tocó mis piernas, acariciandola levemente. Se quitó la ropa, quedando desnudo y contemple su maravilloso cuerpo unos segundos, no pude evitar tocarlo, pase mis manos por si cuello y luego por su pecho y abdomen, es un dios, no cabe duda en ello.

Volvió a besarme y yo, sin querer quedarme atrás después de tan maravilloso orgasmo que me hizo sentir, toque su miembro, aprisionando lo entre mi mano, subiendo y bajando, logrando así que varios suspiros salieran de sus labios.

El sujeto mi mano deteniéndome, lo mire expectante unos segundos, el se posicionó entre mis piernas y acaricio mi clítoris con su pene erecto, otra sensación única, tomo mis manos y las coloco a la altura de mi cabeza, entrelazando nuestros dedos.

Que sexi por Dios.

Gemi de sorpresa al sentir como suavemente introducía su hombría dentro de mi, se sentía tan bien, nunca me había sentido mejor, escuché un gemido suave y algo ronco cuando me lleno por completo, me observo, nuevamente pidiendo permiso y comenzó a moverse, lento y suave, suspiré y gemi varias veces, mientras el aumentaba el ritmo, movía sus caderas como si fuera experto en esto, su respiración y escuchar sus gemidos en mi oído solo lograba que me exitara más.

Sin saber cómo paso, por lo rápido que fue, me puso en cuatro y tomo mis caderas penetrándome, esta vez se sintió diferente, más adentro, cuando pensaba que no podía llegar más al fondo, ahora siento como si me partiera en dos, por más que quisiera, no puedo callar mis gemidos, mi voz sale sola y solo me queda avergonzarme y disfrutar. con una mano me tomo de las caderas y con la otra comenzó a masturbarme sin cambiar el ritmo de sus embestidas, que clase de extraña brujeria es esta, se siente tan bien que apenas puedo pensar, mi respiracion esta demasiado agitada, mi corazon late con fuerza, mi mente... mi mente no puede con tanto que siento, nuevamente senti esa sensacion desde mi entrepierna y como salia nuevamente mi voz sin permiso, ahora mis piernas temblaban sentia como mi vagina palpitaba envolviendo su pene, escuche tambien su gemido y como daba una etocada especialmente profunda, llenandome por completo, en ese instante me senti tan cansada y solo pude recostarme mientras el salia de mi, estaba exausta, asi que me recoste sobre mi espalda y el a lado mio, mi respiracion aun estaba agitada, el me vio a los ojos y me dio un beso en la frente


- Te amo.- Me dijo con una sonrisa.

- Tambien te amo - respondo tocando su rostro.

esto es lo mejor sin duda alguna.



Continuara...



¡tu eres genial!  (Tamaki Amajiki y tu)Where stories live. Discover now