Mi Amado Eros

Decisión

Vegeta- —Hoy regresé a casa, caminé lentamente por la calle hasta que pude ver el jardín de la gran casa de Bulma. Sentí un martillazo en el corazón al ver que Kakaroto estaba con otro hombre, alto, de cabello largo, demasiado largo, inexpresivo y con una cicatriz en la cara.
Caminé más hasta poder ver la manera en que Kakaroto reía, se reía igual que cuando estaba conmigo, entre justamente por el jardín solo para que notara mi presencia, me vio y solo se me quedó viendo fijamente para luego darme una sonrisa un tanto fría, y continuó jugando con el otro imbécil. Entre completamente a la casa y Bulma me recibió con un desesperante abrazo y un beso en la mejilla que limpie rápidamente, lo único que dije fue «hola» y subí a mi habitación. Tiré las cosas a la cama y me pare junto a la ventana para poder ver el jardín, y ahí seguían jugando, solo que está vez con Tama.
Creo que la embarre el día que me fui, puede que Kakaroto se haya enamorado de otro, y yo aquí como un idiota y medio....la decisión que había tomado, rápidamente se está deshaciéndo, y lo peor es que mi orgullo y dignidad están por los suelo..—

...

Goku- —El aura de color rosa que me rodea se empezó a exparsir, dejando ver un camino que me unía a otra persona, y esa persona era Vegeta, había regresado por fin, siento su presencia caminar de tras de mi, hasta que voltee, y sí, ahí estaba viendome, lo ví fijamente y lo único que pude hacer fue darle una sonrisa horrible. También noté como su expresión cambio cuando me vio con Broly...—

...

—Hace dos semanas—

Bulma-  Ves, te diviertes, es bueno que vengas al centro comercial de vez en cuando, además ya te hacía falta ropa.

Goku- —ignorandola completamente ya qué está comiendo— sí, sí opino lo mismo ..

Bulma- ¿Quieres más helado...?

Goku- Si.

Bulma- Toma. —le da varios billetes— compra los que quieras. —como es que con este frio puede comer como si nada helado ..?—

Goku- —se levantó y se fue al puesto de helados— veamos, de cuál compro....

Otro chico se puso a esperar a la par de él, viendo fijamente el cartel que decía que tipo de helados tenían.

Goku- Hola.

Broly- ¿Hola....?

Goku- Soy Goku, ¿como te llamas...?

Broly- Broly...

Goku- ¿Quieres un helado?

...

La noche había llegado y aquellos dos hombres no habían cruzado palabra en ningún momento, y era la hora de la cena.
Goku y Bulma bajaron al comedor, y varios minutos después bajó Vegeta con una camisa blanca abotonada y una pantalones negra, dejando ver bien sus piernas trabajadas y sin ningún vello. El peli-flama se había puesto esa ropa por qué fue la primera que encontró no intentaba hacer nada más. Pero por la mente del peli-palmera pasabas cosas muy diferentes. Se imaginaba como esas piernas tan perfectas se sentirían enrolladas en su cintura o como sería besarlas cuando estuvieran en sus hombros, cosas llenas de lujuria, hasta que una tos de mujer lo saco de su lujurienta imaginación.