Aquella chica de corazón dulce y sonrisa soñadora...es entregada a un Ángel..pero un tipo diferente de Angel uno real que te causa muchas emociones, uno que te hace enojar, llorar...Pero sobre todo uno que te hace sentir viva, amada y protegida a su...
Era una mañana soleada, pero nada calurosa, el aire movía las hojas de los árboles del gran parqué y la gente caminaba por el lugar.
Arthur se encontraba manejando el auto, mientras que en el asiento trasero estaba Ángel sentado con tranquilidad esperando llegar al hospital, pero por la ventana observo una bonita tienda de flores y enseguida ordeno que se detuviera. Arthur obedeció a la orden de su señor, estacionando enfrente de aquella tienda y bajo para abrirle la puerta.
Ángel salio con serenidad y una sonrisa en su rostro de su auto...se quedo parado en la acera por unos segundos arreglando su corbata. Luego camino hacia la tienda y la gente observo el elegante porte de aquel hombre reconociéndo lo enseguida. Angel llego hasta aquella florería, observando la variedad que había afuera de la tienda, miro las flores con paciencia pero ninguna fue de su agrado..hasta que observo entre todas unas en especial que se veian de un color más suave y tenían varios pétalos en un orden un poco particular..
La chica que atendía el lugar, lo vio y enseguida se acerco a él.
Hola señor, busca algún arreglo en especial.? Desea algún ramo de nuestras más vendidas orquídeas.?- pregunto la chica con una sonrisa
Pero Angel no quería alguna otra flor, él quería las flores que estaba observando, así que le ordeno a la chica un ramo de las flores camelias y la chica asintió regresando al interior del lugar.
Pero señor, a la señora Angie le gustan más las rosas..no cree que debería llevarles unas.?- pregunto Arthur..
Lo se, pero eso es muy común y mi esposa es especial. Así que le llevaré algo especial como ella..- respondió Angel
Luego de unos minutos regreso la chica con un ramo de camelias y se las entregó a Ángel..
Son perfectas para mi esposa..- dijo Angel con una mirada de ilusión en las flores..
Le pago a la chica y regreso a su auto. Arthur volvio a conducir en dirección al hospital y luego de unos 15 minutos llegaron. Angel bajo de su auto adentrándose al lugar con el ramo de camelias en mano, se adentro al ascensor esperando que este llegara al piso que había marcado.
Cuando las puertas se abrieron salió enseguida, camino hacia la habitación donde se quedaba Angie y sin perder más su tiempo abrió la puerta de la habitación...en ese momento la puerta se abrió, dejando ver a la chica sentada en una silla de ruedas, su apariencia se veía mucho mejor que antes.
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Su cabello estaba más brillosos, su piel volvio a tomar ese tono rosado casi invisible que la hacia lucir adorable, su sonrisa era resplandeciente y en ese momento traía puesto un vestido de color violeta floreado.
